P. O. V. Normal.
- ¡Kagome! ¡Has vuelto!
Todos se abalanzaron hacia la recién nombrada, provocando que cayera de espaldas. Sus amigos realmente la extrañaban y ella lo sabía lo cual le alegraba.
- Chicos - dijo Kagome, mientras se ponía de pie con ayuda de sus amigos.
- Kagome... - susurró Sesshomaru, acercándose a ella - Hablaremos luego - desvió la mirada y desapareció, envuelto en una esfera de luz.
Shippo, Miroku y Sango miraron la escena un tanto confusos, les sorprendía el hecho de que aquel youkai orgulloso que tiempo atrás intento asesinarlos y que se supone los detestaba, haya llamado a su amiga por su nombre sin ningún rastro de asco en su tono, mientras que Inuyasha y Kikyo sólo se comportaban indiferentes, ya que estaban enterados sobre lo ocurrido.
- Señorita Kagome, le extrañábamos mucho - dijo el monje, sonriendole.
- Si, mami, me alegra que hayas venido - dijo un alegre Shippo.
- A mí igual me alegra, pero no puedo quedarme, no por mucho tiempo.
- Kagome, ahora que estás aquí. ¿Podemos hablar un momento... A solas? - preguntó Kikyo, la cual parecía viajar ahora con ellos.
Kagome miró a sus amigos, los cuales le sonrieron.
- Si, supongo.
- Kagome, hablaremos después - dijo Sango, volviendo a la cabaña, junto a Shippo y Miroku.
Kikyo se acercó a paso lento hacia ella, pero se detuvo al ver que Inuyasha no se dignaba a avanzar ni un paso.
- Inuyasha... - lo llamó, el recién nombrada bufó y caminó junto con ella, hasta quedar al frente de Kagome, donde Kikyo miró a Inuyasha.
- Quiero... - comenzó a decir Inuyasha - Quiero pedirte una disculpa, por todo lo sucedido, por haberme comportado de esa forma. Nunca fue mi intención dañarte y ahora que se lo que siento realmente, me di cuenta de mi error.
- Está bien, Inuyasha, te perdonó - dijo Kagome, dedicandole una sonrisa, la cual le devolvió él.
- Yo quiero aclarar algo... - dijo esta vez Kikyo - No fui yo quien te lanzó aquella flecha, técnicamente fue Naraku. Él me controló para que hiciera eso - explicó. Desde el principio, Kagome sabía que Kikyo no sería capaz de hacer eso, por más odio que le tenga.
- Está bien, eso ya no importa. Al final, todos tendremos que reunir nuestras fuerzas, para poder derrotar a Naraku.
...
Después de hablar con sus amigos y arreglar las cosas con Inuyasha y Kikyo, Kagome decidió retirarse, pero en lugar de dirigirse al castillo de Sesshomaru, se dirigió al pozo.
- Kagome... - escuchó la voz fría de Sesshomaru, alzó la vista y lo vio parado frente a ella.