Los opuestos se atraen

Capitulo 3:

Al terminar las horas de trabajo, cerré la biblioteca y me dirigí a mi casa caminado desprevenidamente, estaba más pensativo de lo normal, algo me dejaba inquieto, creo que debe ser por el cansancio, quite esas ideas y preocupaciones de mi cabeza y volví a reincorporarme a la realidad, al llegar a mi casa lo primero que hice fue tomar un baño para quitar el estrés de este largo día, puse a llenar la tina y entré al agua tibia, tal y como me gusta, podía sentir el cansancio en mis hombros, pero este baño me quitó todo el peso de encima, estaba muy inquieto, cosa que no me pasa a menudo, y más por el mal rato que me hizo pasar ese tipo... Que engreído, tal vez sólo quería molestarme. Pero me hablo con mucha amabilidad... Algo que no es normal en alguien... "Así", supongo yo, me dijo muchas cosas, pero no se sí sea verdad o me estaba tomando el pelo, pero su cara no parecía mentir... Bueno, bueno, puede que sea algo distinto, pero eso no quita que sea un busca pleitos, un grosero y un acosador, y probablemente un violador, pues ¿porque pregunto mi edad y se sorprendió tanto cuando se la dije?, sólo quería hacerme pasar un mal rato nada más, Si... Sólo eso.

Al salir de la tina, me vestí con mi pijama y tome un libro, no hay nada mejor que en una fría noche, tengas una muy suave cama calentita y un buen libro, es agradable, encendí la luz de mi mesita de noche y comencé a leer...

A quien quiero engañar, ese tipo me dejo a pensar tantas cosas que no puedo concentrarme, además, la culpa la tengo yo, ¿porque le estoy dando tantas vueltas al asunto?, cuando me guiñó el ojo, cuando me hablo y... Me dijo adorable... ¿Ah?, ¿¡qué?!, ¿¡adorable yo?!, ¿porque me dijo algo así?, ¡soy 7 años mayor que él!, se supone que debe respetar a sus mayores y... Ah. Di un leve suspiro, estoy cansado. Ya, ya acabó, él se fue y no volverá más, no debo de preocuparme tanto... Estoy, algo confundido.
.
.
.
.2 días después...
.
.

Cuando amaneció, me levanté estirando mis brazos y sentándome en la orilla de la cama para quitarme la pereza, después, lave mis dientes, me bañe, desayune, lo típico, y me puse mi ropa diaria, camisa, pantalones algo ajustados y tenis converse, y claro, no puede faltar mi corbatín, hoy será... Verde, porque no, me encantan las corbatas de moño, tengo de todos los colores para un día distinto, no puedo salir sin ellas, sí, soy raro. Al terminar, tome mis cosas y salí de mi casa, de nuevo, un día tranquilo, a veces es mejor que esté así, me topé con mi vecina, la cual vive con su gato, es una señora de avanzada edad pero muy amable.

-Hola David, ¿como has estado?.
-Bien, gracias señora Cleir.
-Oh que bien. ¿Y la novia?.
-Lo siento, pero en estos momentos no tengo mucha suerte.
-Oh, que pena David, eres un muchacho muy guapo, bueno, que tengas buen día pequeño.
-Adiós.

La señora Cleir se preocupa por mi como si fuera su hijo, y en verdad, no estoy "interesado" en enamorarme, en realidad, nunca me he enamorado, desde niño, nadie, ninguna niña me hablaba, y en realidad, no me importa, nunca he tenido un "amor" hacia alguien, sólo tengo mi familia, trabajo y vivo feliz, claro, a veces me siento algo sólo, y quiero poder hablar con alguien, que cuando esté con esa persona el tiempo pase rápidamente sin darme cuenta, pero simplemente ese "alguien" no lo tengo, quizás nunca lo tenga, quizás no exista ese alguien para mi, pero bueno, que le voy a hacer, con tal de estar vivo es una suerte... Supongo.