"¿Estás bien?" Susurró sin aliento.
"Ajam".
Harry sonrió, frotando su nariz contra la mía. Su pulgar rozó mi mejilla mientras me miraba fijamente. El verde brillante siendo un espectáculo reconfortante. Un suspiro salió de sus labios hinchados antes de presionarse a los míos. Nuestro beso dulce me distrajo mientras sentía a Harry gradualmente retractar sus caderas, la longitud ablandándose saliendo de mí. No se sentía para nada tan extraño como cuando Harry había entrado en mí antes, mi cuerpo estaba más acostumbrado a la sensación incómoda. Sonidos agudos, interrumpidos saliendo de su boca, agarrando mi mano mientras nos desconectaba. Harry casi se veía un poco aliviado.
Mis músculos estaban adoloridos mientras dejaba que la comodidad del edredón oscuro me relaje. Quede echada, mirando como Harry se dio la vuelta a mi lado; sus largos dedos sacando a tientas el condón, tirándolo a la basura. Sus rizos eran un desastre. No pude evitar sonreír al saber que era la causa del cabello rebelde de sexo actualmente adornando la cabeza de mi novio. En cuestión de segundos estaba de vuelta conmigo. Me sentía como si no pudiera moverme, todavía un poco sin aliento con nuestras actividades calientes. Sus manos grandes delicadamente acariciaron mi cuerpo y Harry se puso a besar cada centímetro de mi piel sensible, empezando por mi hombro derecho, arrastrándose hacia abajo mi totalidad desnuda. Sorprendentemente, en ese momento, la vergüenza de estar completamente desnuda no se registró. No parecía importarme. El único sentimiento que experimentaba era Harry, su presencia abarcaba todo. Sus labios, sus manos, sus rizos, haciendo contacto con mi piel. Harry entrelazando sus dedos con mi mano izquierda, sin dejar de adorar atentamente mi cuerpo dolorido.
"Lo hiciste muy bien, bebé." Murmuró contra mí.
Sus rizos oscuros cosquilleándome contra mi estómago, sus labios esparciendo afecto justo encima de mi ombligo, y luego volteando a un lado, besando mi cadera derecha. El calor de su toque calmó mis músculos, deslizando su gran mano por mi muslo mientras Harry continuó hacia mi cadera izquierda. Mi mente me negó el tiempo para pensar antes de casi aplastar sus largos dedos entre los míos. Mi miedo de él encontrando los moretones que se habían inevitablemente formado previamente con su toque áspero. No necesitaba ver eso. Las acciones de Harry inmediatamente casaron para mirar hacia mí, con los ojos muy abiertos en la preocupación. Sus labios gruesos fruncidos a cuestionar mi repentina necesidad de que se detuviera, pero ninguna palabra salió.
"Harry". Susurré.
Mis dedos se apretaron suavemente para tranquilizarlo, su hermoso rostro apareciendo por encima del mío. Me reía en silencio mientras su nariz dio un empujón a mi mejilla, Harry claramente aliviado de que seguía sonriendo. Besos fueron dejados en mi mandíbula y cuello. Sus labios hinchados pasando sobre mi pecho, rozando mi pezón con la punta de su lengua. Mi quejido causando que Harry emitiera una risa ronca. Él me miró a través de sus gruesas pestañas.
"¿Te recostarías conmigo?" Mi voz tímida.
"Sería un placer." Su tono sincero.
El caliente hormigueo recorriendo por mi adolorida totalidad con palabras roncas de Harry. Sonrió ligeramente al besar mis labios antes de asumir el lugar a mi derecha. La tela suave al final de la cama se tiró por encima de nosotros. Los dedos aún entrelazados. Mis piernas enrolladas debajo de mí, el calor de la cubierta de ocultando nuestros cuerpos desnudos. Harry movió más cerca, ambos en nuestros lugares a medida que tranquilamente nos mirábamos fijamente. Mi mente trazó los detalles de sus rasgos impresionantes, hasta el lunar pequeño a la izquierda de su boca. Su risa profunda me hizo reír cuando toqué la adorable hendidura en su mejilla.
Acabábamos de hacer el amor. La verdad yo estaba todavía tratando de acomodar mis pensamientos. Me sentí dolorida, sin palabras, contenta. Sin embargo, una pequeña parte de mí todavía estaba secretamente consciente de la cierta oscuridad con la que Harry sin saberlo había tratado de luchar durante nuestra conexión íntima.