30 Day OTP Challenge [KenHina\HinaKen] [En Edición]

Día 17 ♥Spooning♥

¿Pueden creer que existe gente que ama tanto un deporte, que al no jugarlo entre prácticamente en abstinencia? ¿No?, Pues, ese era el caso de Hinata Shouyo.

-Kenma...no pudimos jugar hoy.- Decía el pelirrojo, sentado en suelo mientras tomaba sus rodillas.- Si no practicamos vamos a perder...- Escondió su cabeza entre sus rodillas y comenzó a tambalearse.

-No creo que sean tan malos para perder por un día sin practicar.- Respondió el teñido con su videojuego en sus manos. Curiosamente, hace mucho que no había estado con este.

-P-pero...¿Y si se me olvida como rematar?- Preguntó con la voz temblorosa a causa del miedo.

Kenma lo miró enarcando una ceja, considerando que lo que acababa de escuchar era sumamente estúpido, a menos que...

-¿Tienes alguna enfermedad que no me hayas dicho?- Dejó su videojuego para ir donde su novio, poniéndose cuclillas frente a el.- ¿Déficit de atención? ¿Amnesia de un día?- Pensó lo que acababa de decir.- Bueno, la déficit de atención no te hace perder la memoria, y...¿Existe la amnesia de un día?- Preguntó tomadole el hombro.- ¿Te llevo al médico?

El pelirrojo lo miró atónito, al parecer su estupidez se contagiaba. Y si, lo admitia.

-No, no, Kenma...- Le tomó por las mejillas tranquilizandolo.- Solo estoy nervioso...- Sonrió.- Soy un adolescente, tengo derecho a una incoerencia al día.

Kenma le devolvió la sonrisa, acercó sus labios a su frente y depósito un leve beso en esta.

Hinata se paró y se acercó a su cama, acostándose en la misma.

-Quizá...si duermo un poco, se me pase...- Jugó con sus pulgares algo avergonzado mientras miraba al techo, para luego ponerse en posición fetal.

Kenma se le acercó con letintud, acostándose de la misma forma, mientras abrazaba al menor.

-Envidio tu manera de no ponerte nervioso.- El pelirrojo entrelazo su mano con la del contrario.

-¿Quién te dijo que no estoy nervioso?- Besó su cabello, encondiendo su cabeza en el cuello del mas bajo.

-Pues no lo aparentas, eso es impresionante...- Susurró ya mas somnoliento que antes, entre cerrando los ojos.

Después de todo, había sido un día pesado para los dos, por lo cual les encantaba el estar juntos en un momento de paz y tranquilidad. 

-Tu confianza me ayuda en mucho...- Susurró de igual manera entre su cuello.

-Te amo, Kenma...

-Y yo a ti...