Algo Dulce - Justin Bieber y tu

Capitulo 10 (Final Parte 1)

Justin tuvo suerte. Pasó por la habitación que tenía alquilada y vio que la habían vuelto patas arriba, pero que no habían encontrado su escondrijo. De allí sacó otro documento de identidad, un arma, munición, su placa y unas esposas. Podía volver al trabajo.
Desde el taxi llamó a Jakes, que a su vez llamó a comisaría y le dijo que un coche de policía y una ambulancia habían acudido a casa de ______, en Chelsea. Por un momento Justin se quedó helado. Entonces Jakes le dijo que la ambulancia estaba sacando a un hombre herido del apartamento. No había rastro de ______, aunque según testimonio de una de las vecinas la había visto llegar a casa del trabajo.
De pronto tuvo un presentimiento y le pidió al taxista que le dejara en el Village. Si no estaba en la tienda, perseguiría a Cheney hasta dar con ella.
La mayoría de las tiendas cercanas a la de ______ habían cerrado ya, pero había gente por la calle y un poco de tráfico, con lo que Justin salió del taxi sin llamar la atención y se acercó a la tienda.
Un Caddy blanco estaba aparcado junto a la acera un poco más abajo. Cheney estaba sentado en el asiento trasero, tan tranquilo y rotundo como un Buda sonriente. En La Cosita Más Dulce las luces estaban encendidas, y Justin vio varias figuras que se movían en su interior.
O bien arrestaba a Cheney y se arriesgaba a alertar a los que estuvieran dentro, o dejaba escapar a Cheney y se centraba en rescatar a ______.
El móvil empezó a sonar, pero lo cortó. Si Jakes supiera que iba a hacer aquello solo se pondría hecho una furia. No importaba. Si pedía refuerzos, la policía de Nueva York llegaría haciendo ruido y crearía un caos de una situación que tal vez pudiera controlar él solo.
Esperó a que pasara un grupo de peatones por delante de la tienda antes de arriesgarse a correr hasta la puerta. Tal vez Cheney lo hubiera visto, pero eso no podía ya evitarlo.
Justin iba pensando en volar la cerradura de un tiro, pero cuando empujó la puerta de cristal vio que estaba abierta. Vio a Sloss dentro de la tienda con la pistola en alto. ______ señalaba las latas y bolsas de golosinas y caramelos.
Justin recitó una oración para sus adentros, empujó la puerta y entró en la tienda con la misma naturalidad como si fuera a comprar una bolsa de gominolas.
-¡Yo te diré dónde está el rubí! -gritó Justin para que todos lo oyeran.
______ emitió un grito entrecortado.
Sloss apuntó el arma hacia Justin.
-¿Bueno, bueno, a quién tenemos aquí? -Sloss miró a Justin a los ojos-. Justin, o como te llames -se acercó a él pero mantuvo la distancia, sin dejar de apuntarlo-. Dame el rubí que le quitaste al jefe y nos largaremos.
Justin se encogió de hombros.
-De acuerdo. Puedes llevarte el rubí.
-Bien dicho. Dime dónde está -Sloss le hizo un gesto a Justin para que entrara en la tienda-. Bonny, vigila a estas dos. Si Justin intenta algo, ya sabes lo que tienes que hacer.
Bonny agarró a Blair del cuello y tiró de ella.
-Claro que sí.
Justin miró a ______ al pasar junto a ella, pero ella no supo si le estaba diciendo algo con la mirada. Supuso que si podía debía desarmar a Bonaventure. ¿Pero con qué?
-Está arriba -dijo Justin.
Sloss lo siguió por la escalera de caracol.
-¿Pero qué diablos es esto? -dijo mientras levantaba la cabeza hacia las columnas llenas de caramelos que llegaban hasta el techo-. ¿Dónde?
-Ahí dentro. Lo dejé caer dentro por la trampilla de la parte superior. Claro que a lo mejor se ha resbalado y ha caído más abajo.
-Hijo de perra. Será mejor que no me engañes.
______ los siguió con la mirada. Justin estaba diciendo la verdad. De pronto se acordó del día en que lo había llevado allí por primera vez; él se había interesado por las columnas. Cuando ella había salido de su despacho después de contestar el teléfono, había visto la trampilla abierta y a él poniéndose la bota.
Sloss se inclinó sobre la barandilla.
-Bonny, tú y las chicas mirad desde ahí abajo.
Empezad a vaciarla si es necesario.
-Eso no funcionará -dijo ______-. Necesitaríamos muchas monedas de veinticinco centavos.
-Es como una máquina de caramelos gigantesca -dijo Bonny.
Sloss le había hecho una señal a Justin para que levantara la trampilla. ______ le miró la cara cuando él se inclinó sobre la barandilla y metió las manos en la columna de caramelos para encontrar el rubí.
-Necesitamos algo para sacar los caramelos.
Sloss fue al despacho de ______ y salió con la bandeja donde ella dejaba el correo y se la dio a Justin. Este empezó a sacar caramelos con la bandeja a modo de pala y empezó a vaciar el contenido en el suelo. Sloss iba echando a un lado con el pie los caramelos, que rodaron en todas las direcciones; algunos de ellos cayeron al primer piso y se partieron al chocar contra el suelo.
-Creo que lo tengo -dijo Justin mientras se estiraba lo más posible para alcanzar los caramelos.
Tenía medio cuerpo inclinado sobre la barandilla, agarrado a ella mientras se estiraba para llegar lo más posible a la torre de caramelos.
Sloss se acercó para verlo mejor.
-No... llego...
______ retrocedió unos pasos para ver mejor. Sabía que tenía que estar lista para actuar cuando Justin lo hiciera.
Se retiró.
-Lo siento, no he podido alcanzarlo. El rubí está ahí, pero no llego.
-Yo lo haré -Sloss empujó a Justin a un lado; entonces frunció el ceño y lo miró-. No intentes nada o ni tú ni tus amiguitas vais a contarlo. ¿Bonny, estás vigilándolas?
Bonaventure volvió la cabeza hacia ______ y Blair, que estaban medio abrazadas, aparentemente tan mansas como un cordero.
______ le dio a Blair un apretón en el brazo e intentó hacerle una señal. Mientras tanto Sloss había metido el brazo en los caramelos y los removía a medida que el brazo llegaba más abajo. Justin se asomó a la columna de plexiglás, urgiendo al otro hombre a que continuara.
-Está ahí... sólo a unos centímetros más... sigue intentándolo...
-¡Ahh! -gritó de pronto Sloss.
______ alzó la vista. Justin había empujado a Sloss. Tenía la cabeza y los brazos atrapados dentro de la columna y parecía que no podía hacer nada para salir de allí.
Un ruido seco agitó la columna. Justin gritó en el mismo momento.
Al principio ______ pensó que se había rajado. Pero la alarma en la voz de Justin le hizo darse cuenta de que Sloss había disparado dentro de la columna de caramelos.
Bonaventure se apartó de la columna de un salto. Entonces pisó uno de los caramelos, perdió el equilibro y cayó al suelo golpeándose en el codo. El golpe hizo que su pistola saliera disparada.
______ y Blair corrieron por ella, pero también lo hizo Bonaventure. Se lanzó y terminó encima de ellas justo en el mismo momento en que Blair atrapaba la pistola. ______ se quedó sin aliento del golpe.
-¡Perra! -Bonaventure le agarró la mano a Blair con violencia; con la otra le aplastó la cara contra el suelo.
-¡Policía! -gritó Justin desde el balcón-. ¡Alto!
Los tres miraron hacia arriba. Sloss estaba esposado a la barandilla, escupiendo y maldiciendo. Justin bajaba por las escaleras, agarrando la pistola con ambas manos y apuntando a Bonaventure.
-Blair, ______, quitaos de en medio.
______ se retiró, deslizándose con el trasero. Blair estaba demasiado enzarzada con el ladrón como para poder moverse. Cuando Bonaventure se dio cuenta, le echó un brazo a la cintura y se giró de lado, utilizándola de escudo.
-¡No te muevas! -gritó Justin desde el pie de las escaleras.
-No deberías disparar a una mujer -dijo Bonaventure, aún intentando arrebatarle el arma a Blair.
-¿Ah, sí? -se burló Justin-. Bueno, esta es un travestí. En otras palabras, es un hombre.
Bonaventure, asustado al verse allí tumbado y abrazado a la cintura de un travestí, se quedó inmóvil un instante.
Justin aprovechó para avanzar y plantó el pie embotado sobre la muñeca del criminal. Y sin perder ni un momento le asestó un golpe en la parte de atrás de la cabeza.
-Quédate donde estás, Bonny.
Blair rodó toda llorosa hacia donde estaba ______, que automáticamente consoló a su amiga, mientras miraba a Justin con asombro.
-¿Eres policía?
-Sí -la miró pero no perdió la compostura, allí de pie sobre Bonaventure mientras las sirenas de los coches de policía inundaban las calles. Se oyeron varios frenazos y vieron el reflejo de las luces de los coches patrulla a través de las ventanas.
-No me lo creo -______ había estado mosca, pero jamás hubiera imaginado que fuera policía-. Entonces esa es tu pistola.
El sonrió. Pero no pudo contestar porque en ese momento un grupo de agentes de policía entró en la tienda empuñando sus armas. Justin puso el seguro de su pistola y levantó las manos mientras los policías se echaban encima de él y de Bonaventure.
Justin gritaba que era policía, y eso fue lo último que ______ le oyó decir.