Ya termina marzo y no la vi más desde que estuvimos esa vez a principios de febrero, hasta el sábado. Cada tanto pensaba en ella pero medio que me había resignado a que no la iba a ver más. Le tire un like en su foto de perfil (pequeños chamuyos boludos siglo 21) pero tenia como 5000 por esto de que es youtuber, ni lo iba a registrar.
A Pablo sí lo vi, dos veces y en circunstancias parecidas a la primera, con Male y su primo. En otro orden de cosas sospecho que Santiago (primo de Male) y Pablo tienen algo, son chongos, salen, algo.
El sábado fui con dos amigos a ver Persona de Male Pichot, Charo y un par de unders más que no las conocía. Todo me daba paja del plan. Son dos amigos de la secundaria que ni idea en que andan, pero bue, ya habíamos quedado eso y fui (oh sagrada decisión).
Ya afuera hablábamos de la obra y de lo graciosa que había estado y lo vi a Pablo. Estaba entre mucha gente y a ella no llegué a verla, asi que me acerqué a saludarlo sin pensar en Bárbara. Recién a 5 pasos la vi. Por un lado buenisimo, no tuve tiempo de maquinear. Me puse contenta de verla, más porque ya había fantaseado con la idea de encontrármela de casualidad para no se, ni tenía un plan. Igual me propuse entrar en acción, pero como soy una bisexual bastante idiota <esto de bisexual todavía lo tengo entre pinzas, ni lo asimilo>, me sale fácil seducir a los hombres pero no me sale en absoluto seducir a una mujer. Simplemente no tengo idea qué hacer. No es una cuestión de género, es que me atolondro cuando algo me interesa <será que los chicos no me interesan?>
Me gusta su sonrisa, su arito, ese algo que tiene así como de simpleza y de no fisura. Me hace creer que las mujeres en mi cabeza ganan por goleada. Lindas fuertes bellas manos curvas tetas (sí, perdón). Bárbara tiene todas las cosas que no había encontrado en los hombres. En realidad algunos tienen tetas, pero no del tipo que me gustan.
A que iba? ah si! Me acerqué a ellos e intercambiamos un par de palabras sobre la obra o no me acuerdo, no podía prestar mucha atención. La miré intenso, pero ella nada. Hasta sentí que se intimidó. Yo charlaba pero mi cabeza una máquina: <la puse nerviosa? la miro de nuevo? ay es tan linda la estas mirando de nuevo pará> <no hay que abusar del recurso miradas>
Impulsivamente me pareció pertinente pedirle a Pablo su celular y me lo pasó. Ya lo había visto un par de veces, habíamos hablado bastante.
Volví a mis amigos un poco por obligación después de un "Bueno, nos vemos!", tuve la oportunidad de saludarla con un beso y no lo hice. Por idiota nomás.
En la vida hay puentes imaginarios (me atrevo a hablar de puentes poco literariamente, no como Cortázar), que nos conectan imaginariamente con las personas. De mí a que se yo, Susana Giménez, hay como cinco puentes: mi mamá tiene una amiga que tiene una hija que está casada con un productor del programa de Susana Giménez. 5 puentes. Así de absurda es la teoría de los puentes. Pero el sábado reduje mis puentes hacia Bárbara, para mi fue importante. Donde antes intervenían Male y luego su primo en mi camino hacia ella ahora solo estaba Pablo, que además de ser mejor su mejor amigo es un capo.
Estamos a lunes, no le voy a hablar todavía, pero me tomaría una birra con él en estos días. Y si termino cruzando el puente PabloBárbara buenísimo.
