XV

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Ya es rutina: entro a nuestra conversación de Whatsapp y deslizo la pantalla del touch como una demente esperando encontrar mensajes que no me escribís. Pienso que me pensás, me hago la Sherlok Holmes intentado desencriptar sentimientos en las canciones que publicás, saco conclusiones respecto a tus horas de conexión en cualquier medio virtual, releo nuestras conversaciones comenzando por el final. Te mido los sentimientos en las fotos. Me pongo triste si estás mal y me pongo triste si estás bien. Me despierto y me acuerdo de vos, me voy a dormir y me acuerdo de vos. Me toco el pelo y me acuerdo del tuyo, me pongo el perfume que te gustaba preguntándome si lo recordarás, pienso que me pensás. Me suena el celular y quiero que seas vos, me llega un mail y quiero que seas vos, una vieja camina lento adelante mío y quiero que seas vos.
Me compro ropa que te gustaría, me peino como te gustaría, repaso todo lo que te diría. Hago todo bien y te pienso, hago cualquiera y te pienso, camino por calles que caminamos y te pienso, me olvido de que te pienso y te pienso, imprimo una hoja y me doy cuenta de que no me hace acordar a vos entonces me acuerdo de vos. Le hablo de vos a mi psicóloga, le hablo de vos a mis amigxs, te hablo cuando me miro en el espejo. Abro Word y se abren 3 ventanas que no se cierran entonces me pongo a llorar, porque si estoy mal qué me importa el motivo, lloro. Y pienso en vos, escribiéndote. 


Bárbara Martínez y yoWhere stories live. Discover now