Encuentro de espíritus

Capítulo 8 Sorpresa

Hoy es martes, mamá nos tiene resolviendo ejercicios matemáticos. Ha descargado de internet diferentes tareas y las ha impreso para nosotros. Es raro, ahora que lo pienso, los únicos que ocupan el computador es mi mamá y mi papá, lo que es Rankura y yo no lo tomamos mucho en cuenta, incluso estamos más preocupados de los video juegos de la play station 3, que las redes sociales o el whatsapp, incluso preferimos charlar por teléfono fijo que online con nuestros amigos porque tampoco queremos tener celulares, queremos nuestra colección de juegos. Por lo mismo, con ese famoso facebook creamos una cuenta familiar para comunicarnos con familiares o nos agreguen nuestras amistades y subimos fotos, aunque es mamá y papá quienes más utilizan la cuenta para copuchar.

Es chistoso, pero resuelvo los ejercicios matemáticos en un rato. Mamá me entregó una tarea de ecuaciones. Me da risa ver la cara de sufrimiento de Rankura, odia las matemáticas.

-Lica tienes que ayudarme-Me dice mi hermano.

-Claro, buscar la incógnita es un gran desafío- Le digo.

-No te creas tanto con las matemáticas eres un desastre en inglés- Me dice riendo.

-Así como tú odias los números, yo odio el inglés- Digo con voz de burla y me tapo la cara con mis manos y me rio diciendo –help me, don't speak english, i'm beautiful disaster- lo chistoso es que me sale tan a lo chileno, sin tonalidad de gringa es como jelp mi don spik énglích, aim biutifol disester, es como si se me enredara la lengua con mi pronunciación, la cuál es pésima.

-My sister is a beautiful disaster- me dice con voz gringa Rankura y mirándome con seriedad.

-Yes- le afirmo.

-Sabes hermana, pronuncias pésimo el inglés pero lo entiendes, no eres tan boba después de todo- me dice él.

Lo miro y me rio, le quito su hoja que está frente mío para ver sus ejercicios, me paro de la mesa y me siento al lado de él. Le explico con detalle cada procedimiento y estoy toda una profesora unos minutos, las matemáticas son un lenguaje extraño para él.

-Sabes, eres una excelente maestra- me dice y me da un beso en la frente.

-No eres el único que lo dice, en la clase de historia mis compañeras me tienen de ayudante para explicar y resumir todo- le digo.

-Tus compañeras son bobas ¿Cómo no aman historia como nosotros?- Me dice.

-No todos aman historia como nosotros- Le digo con tono de burla, lo miro y le exclamo, ¡Y tú, termina tus ejercicios! Mi hermano tan obediente, se concentra en sus ejercicios.

Ahora que me coloco a pensar, mis compañeras deben estar bastante contentas con la pérdida de las clases, deben pasar todo el día conectadas a las redes sociales como whatsapp y sus selfies para instagram o ese famoso facebook. Mi amiga Antu igual tiene whatsapp, nos odia por no tener celulares a Mateo y a mí, dice que podríamos pasar todo el día enviándonos mensajes grupales y hacer "conspiraciones", a las conspiraciones se refiere cuando estamos los tres juntos haciendo alguna travesura o armando un plan siniestro, siempre le da un sentido de maldad.

Igual me parece raro, que no me haya llamado mi única mejor amiga, tal vez espera que yo llame para saber de ella y está pegándose el show de que soy la peor amiga del mundo, no la he llamado ni la he ido a ver, desde que fui a su casa, creo que soy una mala amiga. También, si pienso en Mateo, tampoco sé nada de él, desde su última visita y su despedida inesperada, con mis manos toco mi boca y me acuerdo de esa sensación cálida que dejó en mis labios.

-¡Lica, llamando desde el planeta Tierra!- Miro a mi hermano que me pasaba su mano de un lado a otro lado para que reaccionara, me dice riendo mira quién llegó.