Un Rostro Y Dos Personas → Yoongi

Capítulo 13 " Nada más que decir "

No podía parar de llorar, era un asco, me quería quitar toda la piel si es que era posible, pero aquí estaba él, apoyandome y prestando su cuerpo para llenarlo de mis lágrimas que no paraban de césar.

- _____ ¿Qué te pasó? - Jungkook interrumpió nuestro abrazo- este maldito imbécil te hizo algo - empujó a Suga hacia atrás.

- Nunca le haría daño imbécil - estaban mirándose con mucho odio.

- ¿Lo hiciste por la apuesta? Le hiciste daño a _____ todo por una maldita apuesta imbecil - grito con su rostro rojo de rabia.

Y lo que me faltaba en mi glorioso día, una apuesta, una maldita apuesta era mi revancha del día. Suga habia apostado utilizando a la chica más estúpida del colegio; yo.
Después de un minuto de silencio y reflexión decidí interrumpir el silencio que había.

- ¿Apuesta? - reí dolorida por lo que acababa de escuchar- ¿Fui una apuesta? - me paré despacio ya que mi cuerpo aún me dolía por la fuerza que ocupó el profesor Jin conmigo - Respondan - grite ya aburrida de todo.

Mire a Suga, quien sólo miraba el suelo como si estuviera recibiendo un retó de su madre por una maldad que hizo, luego a Kook quien no me quitaba la mirada de encima. Jungkook decidió hablar.

-Apostamos quien era el que te llevaba a la cama primero - miro a Suga con asco.

- Suga ¿Es cierto? - trate de encontrar su mirada pero era imposible, no me quería ver- ¿Es cierto? - grite casi al punto del llanto.

Quien calla, otorga, empecé a caminar hacia la salida para irme de este asqueroso lugar, no quería volver a ver a nadie, todo era una mi***a, era mucho para un día.

Iba saliendo del colegio cuando me caigo por un tropiezo, aprete mis manos contra la acera y empecé a llorar por todo lo que había pasado, no podía más, era un infierno, un castigo que al parecer que tendría que vivir. Empecé morder mi labio tratando de parar de llorar, pero sólo logre que estos empezarán a sangrar, empecé a golpear el suelo con mis manos, el suelo se torno rojo.

- Por favor para - su voz estaba quebrada, Suga también estaba mal - no te hagas daño por favor- me trató de parar pero yo sólo lo esquive, no quería nada que tuviera que ver con el.

- No me toques - mi voz sonaba fría - nunca me vuelvas a tocar ¿Me escuchaste? - aún miraba el suelo que se veía borroso por mis lágrimas.

Sólo bastó decir eso para que se fuera corriendo.

•Narra Suga.

Lo iba a matar, lo voy a matar por hacer eso, empecé a correr por la dirección donde se había ido el asqueroso de Jin y que suerte la mía de encontrarlo esperando el autobús, corrí hacia él, lo agarré del pelo y lo tiré al suelo, al notar que era yo empezó a reír como un maldito desquiciado, le empecé a dar golpes en el rostro; lo quería matar.

- Estuvo exquisito y no sabes de que forma - reía como un maldito enfermo- vamos sigueme golpeando así te cuento como fue tenerla entre mis piernas.

No podía parar, tenía que matarlo de una p*** vez.

- Debías haber escuchado sus gritos que provocan placer, con el simple hecho de recordar me pongo caliente, la quiero volver a tener en mi.

Su cara estaba deformada, pero el seguía diciendo cosas de _____.

- Te cuento algo lindo- reía el maldito loco- Te llamo muchas veces y eso provocaba que me pusiera celoso y fuera mucho más duro y agresivo con ella, por Dios es una diosa en el sexo.

Y le di mi combo final, el cual lo dejo inconciente, me senté al lado de el y grite de frustración, me paré y le di una patada a su cuerpo, revise su pulso y aún seguía vivo, ahora si me iba ir y dejarlo ahí como la basura que es.
Volví a la escuela para encontrarme con ____, pero ya no estaba.
Ahora si me gane su odio, lo merezco después de todo, jugué al principio con ella, pero después me enamoré, rayos, maldita sea, tengo una novia que me quiere, no debería importarme tal estupidez, ella también me hirió, pero por no cuidarla hoy le hicieron daño, no sólo yo, el asqueroso también.

•Narra ______.

Caminé sin rumbo hasta que mis piernas no daba más del dolor, no quería parar, quería irme lejos, lejos de este lugar, de esta ciudad, no quiero que me vea nadie, ni Suga, ni mi madre, ni nadie de esta maldita vida. Mis pies no daban más y cuando ya veía el suelo pegado en mi rostro alguien me sujeto, me agarré de su brazo buscando consuelo, mis lágrimas volvían a salir con desespero, la persona me abrazo con más intensidad, un abrazo que yo conocía y que siempre estaba para mi ; Namjoon.

- ¿Qué rayos pasó ? - me habló en susurro- tu boca, tu ropa, tú - calló por un instante- ¿ Qué mi**da pasó? - grito lleno de frustración, desespero.

Mi llanto era más poderoso que mi voz en este momento, no le podía hablar, sólo lo apretaba más a mi, después de un rato pude decir algo.

- ¡Namjoon Te necesito! - dije con lágrimas hasta que todo se volvió oscuro.