La culpa no está en el sentimiento, sino en el consentimiento

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Narra Hinata

No lo puedo creer, ¿cómo fue capaz de hablarme así? Así no se supone que tratas a la chica de la cual estás enamorado, bueno ya no sé si está enamorado de mí, por lo visto ama a la entrometida de Sakura, ¡Dios esas amigas que yo tengo!, aunque tal vez lo esté haciendo por mi bien. Para colmo de males Kiba y yo tampoco estamos pasando por lo mejor de la relación, de hecho el otro día se atrevió a gritarme, ese idiota quería sobrepasarse conmigo, por suerte salí corriendo se su apartamento y digamos que me salve, no sin antes haber dejado que profanara mis labios.

Han pasado 5 minutos desde que me fui de la casa de Naruto, bueno, técnicamente no me fui del todo, de hecho, sigo aquí, escondida, tratando de olvidarme de mi orgullo, es estúpido que después de que Naruto escuchara mi "si, acepto" a Kiba, ahora debo ser yo la que deba escuchar el "sí, acepto" de Sakura, maldito karma

- ¿Hinata, eres tú? - Joder, no me escondí bien por estar pensando en tontadas, ahora Sakura me había descubierto

-Emmm, wow, vaya coincidencia ¿no?, jeje – dije yo con cara de estúpida

-Jajaja, no lo puedo creer, estas espiando a Naruto – soltó la carcajada, a lo que yo reaccione tapándole la boca, no quería que el rubio supiese que estaba allí

-Baja la voz, no lo estoy espiando, es solo que acabo de salir de su casa, ya me dirigía a mi casa también – dije con un poco de rubor en las mejillas

-Sí, claro, ya te creí, sobretodo el camino por tu casa es el que queda al pie de la ventana, atrás de un arbusto- de nuevo soltó la carcajada

-Okey, ya entendí, sí, pero es que...- miré al suelo, no podía de la pena

-Vale, déjame adivinar, estas ahí porque te creíste que hoy Naruto me iba a proponer noviazgo, ¿verdad? – iba a reír de nuevo, pero se controló – es fácil jugar contigo querida, por supuesto que Naruto no me ve de esa manera, a la única que ve así es a ti, y tú por estar tonteando no te has dado cuenta, o bueno, ya te disté cuenta, solo que eres demasiado estúpida como para aceptarlo

-Oye, no me ofendas, aquí la única estúpida eres tú, Naruto si te va a pedir noviazgo, acabo de salir de su casa y...y tuvimos una pequeña pelea – mi voz comenzaba a flaquear

-Lo que quieras, no me creo es cuento todavía, además ya voy tarde a mi "cita" con Naruto, si este chico quiere ser mi novio, pues no se lo voy a impedir, después de todo aquí la única que puede generar un cambio eres tú, y si tú no haces nada, no me voy a quedar sin hacer nada, al menos debo hacerte sufrir un poco – esbozo una sonrisa – le pediré a Naruto que abra las ventanas, ya sabes, para que puedas oír mejor, jajaja – rio alto y golpeo en la casa del rubio, a lo que reaccione escondiendome

Nunca creí que Sakura fuera tan mierda conmigo, se suponía que ella era mi amiga, ¿Qué amiga me quitaba al chico que me gusta?, Naruto es muy problemático, ojalá nunca lo hubiera conocido. De la nada me percaté que en mis pensamientos dije que me gustaba ese chico, definitivamente es un chico problemático, ya no se ni que pensar de él

Narra Naruto

-Hola Sakura, ¿Cómo estás? - la salude con alegría, bueno, lo que quedaba de ella

-No tengas esa cara de odio, perdón por llegar tarde, me retrase un poco, hoy la pastelería estaba llenísima

-Ya sabes que no debes traer postres siempre, me vas a engordar, jajaja – la hice reír un poco, ambos estábamos nerviosos, no sé cuál era su razón, pero la mía era Hinata, tenía miedo de que me odiara y jamás nos volviéramos a ver. Vamos naruto, nada de Hinata, ella esta con otro, y muy pronto tú también estarás con otra- me dije a mi mismo-ella va a ser alguien que hará de mis ratos más felices

¿El amor es dulce o agridulce?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora