Querido Sam: No sé por qué demonios di click sobre tu correo.
Deja de jugar con mis sentimientos y no me ofrezcas porno donde no la hay. Me siento ultrajada, Samuel Woods. Ten un poco de decencia. *Yo, haciéndome la mártir*
No te preocupes Sam. Seguramente vas a mejorarte pronto. Tal vez solo dejas de comer porque las matemáticas te tienen el culo colgando de un hilo. ¿Cómo te fue al final en tu examen?
En cuanto a mis días libres, bueno, yo puedo cuando tú quieras.
Hoy mamá estaba tan molesta conmigo que me dio unas bofetadas. No sé qué demonios había hecho la verdad, pero cuando entró tenía los ojos llenos de lágrimas. Solo me miró desde la puerta, se acercó a darme un abrazo y luego ¡Plaf! Bofetada seguida de "¿Por qué demonios tenías que ser mi hija?"
¡Jesús!
Si no quería tenerme no sé por qué demonios no me abortó. Se hubiese ahorrado muchas cosas... como su cesárea, por mencionar una de tantas.
Por cierto, estoy castigada.
Y por cierto otra vez, creo que mamá solo andaba ebria.
Y también te contaré un secreto. No eres el único con un desorden. Porque... ¿Cortarse también cuenta como un desorden, cierto?
Con la boca panda como si tuviese derrame facial, Lola.

ESTÁS LEYENDO
Lithium (Una memoria)
Teen FictionHay tres cosas en este mundo que son realmente peligrosas: El ser humano, el miedo y el amor. El primero de ellos es un contenedor, lleno de emociones, de diversidades infinitas y con infiernos individuales. El segundo es una emoción, contenida de...