Los Rastreadores.

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Izquierda, derecha. Agita la espada con gracia. Arriba, abajo; pie izquierdo adelante y luego un rápido cambio de posición. Salta y ambas espadas chocan y un fuerte clink suena con fuerza.

Rukia ha estado entrenando duro con Kaien. Ambos traen puesto su traje de combate. Rukia salta con fuerza para atacar a Kaien, pero él se mueve demasiado rápido y logra esquivarla. Ella busca con la mirada donde se encuentra, pero no lo ve en ninguna parte. De repente, sale por su espalda y a Rukia apenas le da tiempo de voltear y protegerse con su espada.

- No esta mejorando. -dice Hitsugaya con el ceño fruncido.

- Si. -le responde Renji.

- ¿Qué sucede majestad? Para estas alturas usted ya estaría muerta. Usted tiene más poder, úselo todo... ¡Aaaaaah! -dice Kaien para provocarla.

- No me digas "majestad"... Y esto es todo lo que tengo... ¡Aaaaaah!

Sus espadas chocan y Rukia cae al suelo sobre su espalda. Todos gritan asustados "majestad" y salen corriendo hacia ella, pero ella les hace una seña para que se detengan.

- ¡Estoy bien! Huf, huf... -una gota de sudor se resbala por su frente.- Estoy bien. Huf, huf. -dice con la voz entre cortada por la falta de aliento.- Estoy lista. Continuemos. -dice decidida.

- No esperaba menos de la princesa. Después de todo no eres engreída. -dice Kaien con una media sonrisa.

- No me llames "princesa". En este lugar he perdido mi título como tal. Ahora solo soy Rukia Kuchiki.

Suena el timbre de la casa y una de las empleadas abre la puerta. Aparecen Orihime y Riruka. Se quedan sorprendidas por la casa tan grande en la que vive Rukia. Renji se dirige a la entrada para ver quien había llegado a irrumpir la concentración de la princesa y se da cuenta de la presencia de las dos chicas. Él les pregunta qué hacen allí y Orihime responde diciendo que vinieron para invitar a Rukia a conocer la ciudad. El guardaespaldas les dice que ella esta ocupada.

Las chicas se quedan intranquilas al escuchar unos ruidos extraños dentro y le preguntan a Renji que qué estaba ocurriendo, este les responde que están haciendo unas reparaciones en el jardín y es por eso el ruido. Orihime se queda pensativa y Riruka no quita su cara amargada.

- Renji, ¿Qué sucede? -aparece Rukia y las chicas se quedan sorprendidas por la extraña apariencia de la chica nueva. Rukia se queda sorprendida de verlas de pie en la puerta.- Chicas, ¿qué hacen aquí?

- La querían invitar a dar un paseo, pero ya les dije que está muy ocupada, majes... Digo, señorita Rukia. -Renji se corrige de inmediato. Orihime se quedó pensando en la palabra que Renji no terminó de decir.

- Esta bien. -Renji se sorprende de su respuesta.- Me iré a cambiar. -se da la vuelta y camina hacia su habitación para cambiarse. Cuando sale, parece una chica normal. Llevaba un vestido morado, leggins, una suéter y una bufanda rosada.

- Yo iré con usted. -dice Renji.

- Renji. -dice su nombre con un tono serio.- Estaré bien. -levanta la cabeza y le sonríe. Rukia se va con las chicas.

Mientras tanto, Hashwalth busca por todas partes algún rastro de Rukia y no logra tener éxito. Luego, con un movimiento de la mano hace aparecer un polvo extraño negro y lo sopla en el aire. De la nada aparecen tres figuras negras con armaduras de plata, pero sus rostros no se distinguen.

- Rastreadores. -llega de repente Bazz-B.

- ¿Qué haces aquí? Su majestad, me envió por Kuchiki solo. -dice Hashwalth.

- Te seguí y quería ver que hacías. Solo quería acompañarte.

- Como quieras, solo no estorbes.

La Princesa de HieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora