Inmortal; Bella&Damon [EN EDICIÓN]

→ #27; Reencuentro.

¡Hola, he venido desde las tinieblas!

Sé que me he demorado en subir capítulo y pido las disculpas correspondientes...

Ya somos casi ¡4K! Y eso me tiene profundamente feliz *-* ... 

Ahora, quería informarles que estamos en los últimos capítulos... sí, en los últimos ): ... 

Peeeeeeeeeeeero... solo si quieren, y me lo hacen saber, puedo hacer una segunda temporada, ya lo tengo pensado y todo... ¿Qué dicen? :O

...

- ¿Esto es una advertencia? – Repitió de forma burlona, Damon. - ¿Quién diablos se cree? ¿Súper-Jack? –

Yo solo lo miraba atentamente, conteniéndome las ganas de reír a carcajadas por sus comentarios.

Evidentemente todos se habían ido a sus respectivas casas.

Solo estábamos Damon y yo... bueno, y Charlie, pero estaba en su habitación descansando.

Si fue un día largo para mí, imagínense para él.

- Todavía no puedo creer cómo Stefan tiene tanta empatía por otras personas y siente lástima por alguien como él. – Gruñó el ojiazul. –

- ¿Por qué lo dices? – Pregunté mientras me sentaba en el cómodo sofá de papá. –

- ¿Acaso no escuchaste?... "Puedes quedarte en casa si deseas"... - Imitó a su hermano mayor. A lo que no pude contener mi sonrisa. –

Me quedó observando de pie por un momento, pero enseguida se sentó a mi lado con sus manos entrelazadas y algo nervioso.

- Te seré directo. – Acotó. - ¿Esto significa que hemos vuelto? – Arquee una ceja sin entender su pregunta. – Digo... cuando te tomé de la mano, ya sabes... -

- Eso depende de cómo te lo tomes tú. – Me senté recta y lo miré fijamente a esos ojos que me vuelven loca. – Pero creo que en estos momentos hay que priorizar otras cosas... -

- Entiendo... - Dijo dolido. –

- Pero – Lo interrumpí. – eso no significa que no podamos darnos una nueva oportunidad, Damon. – Puse mi mano sobre la suya delicadamente. – Sabes lo que siento por ti. Sí, en algún momento tuve esa sensación de estar "confundida", pero solo fue mi parecer ¿sabes? – Tragué saliva. – En todo este tiempo me he tomado la libertad de reflexionar acerca de todo, y con lo del accidente, realmente me di cuenta que me importas más de lo que yo misma pensaba. Me preocupé por ti, pensé que en verdad estabas en problemas y... - Susurré con dificultad. – No sé qué haría sin ti. –

Quedamos en completo silencio.

Pero no es ese silencio incómodo.

Era un silencio de tranquilidad.

Por fin estábamos aclarando las cosas... realmente quiero estar con él. Pero al parecer la suerte no está a nuestro favor... deberemos esperar lo que sea necesario.

Si hay cariño, todo con tiempo y perseverancia se logrará.

- Creo que es momento de irme. – Señaló Damon observando la hora en su móvil. –

- Oh... sí, supongo. – Dije algo triste. –

No quiero que se vaya.

Debería quedarse conmigo, toda la noche.