Beautiful Mess

Capítulo 11

N/A: Gracias a todos los que seguís leyendo y comentando a pesar de tooodo lo que tardo en actualizar y agradecer también a MyDreamsComeTrue por su ayuda :)

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-Rick... -Susurra.

Parece confundida, tumbándose sobre su espalda en la cama. Castle quita el brazo que tiene por encima de su cuerpo, tragando saliva sin saber qué decir.

-Yo...

Kate sonríe, adormilada, rodeando el cuello de Richard, tirando de él hacia ella para que se acueste sobre su pecho. Suspira audiblemente y Castle puede verla con los ojos cerrados de nuevo mientras se abraza completamente a él.

Se queda en esa posición durante varios minutos, tenso, pero cuando se da cuenta de que Beckett sigue dormida comienza a relajarse, disfrutando de ese abrazo inesperado.

Rodea el cuerpo de Kate con su brazo derecho, acercándose más a ella -todo lo que le es posible-. Esconde su rostro en el hueco de su cuello, rozándole la piel con su nariz, provocando que el cuerpo de Beckett se estremezca. Vuelve a hacerlo, obteniendo el mismo resultado. Una sonrisa aparece en su rostro. Sería tan fácil dejarse llevar; dejar de aguantarse las ganas de plantar un beso en el mismo sitio donde la ha rozado con la nariz; despertarla con besos y caricias y desearle los buenos días sin tener miedo de su reacción. Si tan sólo no se hubiera apartado cuando ella quiso besarlo... aunque sabía que ella nada más podría estar confundida en ese entonces y que debería de cerciorarse de que era amor lo que ella sentía y no una forma de sentirse querida después de todo lo que había pasado, pero cada vez se le estaba haciendo más difícil al estar más unido a ella por momentos. Y tenerla tan cerca no ayudaba.

Sabe que, posiblemente, como Kate se despierte y los encuentre así, tendrá problemas con ella, pero tiene la excusa de que fue ella quien lo abrazó. Además, todavía sigue agarrada a él con sus dos brazos y apenas lo deja realizar pequeños movimientos.

En el momento en el que Beckett acaricia su brazo, su cuerpo vuelve a tensarse. 5, 10, 15 y 20 segundos pasan y Kate no ha dicho nada. Se remueve un poco con cuidado para observarla y asegurarse de que sigue dormida, o eso es lo que parece.

-Kate -susurra en un tono apenas audible pero esta no contesta-. Kate -repite. Vuelve a adoptar la posición que tenía antes más relajado. Aunque sabe que de un momento a otro, despertará.

Suspira cuando cae en la cuenta que en ese mismo día deberá de regresar a su casa. Mañana será lunes y deberá estar en su casa para arreglarse para el trabajo. Ya no podrá pasar todo el día con las Beckett y todo se reducirá a visitas que tendrá que cuadrar con su horario de trabajo. Además, ya mismo pasarán de estar dentro del sistema como tal y todo se reducirá a un pequeño seguimiento por lo que tendrá menos excusas para ir a verlas. Se alegra por ellas, claro que sí, pero no puede evitar que eso afecte a su estado emocional, sintiéndose triste. Las Beckett se han convertido en lo más importante para él.

-Rick -escucha que murmura Kate, haciendo que se levante rápidamente.

-Yo... tú... -Se rasca la cabeza sin saber qué decir, ni siquiera es capaz de formular una frase coherente en su cabeza.

-Me quedé dormida anoche -dice, obviando el hecho de que Richard estuviese abrazado a ella.

-Sí, nos quedamos dormidos -responde, asintiendo con la cabeza también -. Yo... tú me has abrazado, apenas me podía mover -se defiende cuando el silencio se apodera de la habitación, provocando que Kate se sonroje y se tape la cara con las manos.

Al verla, se siente un poco culpable de ponerla a ella por delante para librarse de... Si ni siquiera le había dicho nada cuando se había despertado.