Capitulo 4

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Capítulo 4
Miedo.

Mi día paso normal con la misma rutina de siempre con muchos más clientes en el trabajo, agradecía aquello porque me mantenía lo suficiente ocupada para no pensar en lo ocurrido la noche anterior.

El reloj había dado ya las cinco de la tarde, dándome a entender de que mi turno laboral había culminado por hoy.

Trabajaba en una peluquería, varias calles del apartamento donde vivo con mi hermano, me ahorraba mucho dinero gracias a que podía llegar caminando sin ningún problema.

Salí del gran centro comercial en el que trabajo, me sentía expuesta y exhausta así que me monte en el primer autobús que me dejaba cerca de mi -Para nada seguro- hogar.

La trayectoria fue muy larga y lenta para mi gusto, el autobús se detuvo en la parada que me corresponde y baje, camine unos cuantos pasos y llegue a la entrada del pequeño edificio.

Salude al portero con una sonrisa y toqué el botón del ascensor esperando que llegara tome mi celular para revisar si tenía algún mensaje que responder, cuando esté llego me monte algo temerosa, temía que apareciera aquella cosa aquí para atormentarme sin yo tener escapatoria, si las cosas seguían así podía causarme claustrofobia.

Presione el botón con el número seis y de inmediato se cerró para llevarme a mi destino, Salí lo más rápido que pude y camine por el largo pasillo hasta llegar a la puerta del pequeño departamento.

Saqué las llaves de mi bolso.

Abrí la puerta con las llaves del departamento tomándome mi tiempo, tenía miedo de lo que me podía esperar allí dentro, termine de abrir la puerta y las luces estaban totalmente apagadas, todo estaba completamente oscuro a excepción de la poca luz que entraba del pasillo.

A ciegas con mi mano empece a buscar el interruptor y cuando lo alcance lo presione haciendo que los bombillos se encendieran.

Cerré la puerta con seguro y me adentre, nunca en mi vida me había sentido tan insegura y amenazada estando en mi propio departamento.

Esta mañana había recibido varias quejas de los vecinos del piso superior por mis gritos a media noche, habíamos arreglado el problema sin mencionar que me pareció ver un lindo espíritu jalando mi tobillo, no quería parecer una lunática frente a esas personas con quién me tocaba convivir.

Me alegra que mis vecinos no hayan llamado a la policía, estaba segura de que aquel intruso no se trata de una persona sino de algo más.

Editado por última vez 20-08-2019

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