cap 13

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Habían pasado ya dos días desde que recibí aquel detalle de Alex y estaba confundida, ¿que significaba aquello? ¿realmente lo había enviado el? no lo sabia, no entendía nada.

-¿que harás este martes?- me pregunta Jose mientras nos dirigimos a nuestra clase de biología.

-nada- contesto- no tengo planes- prosigo-

-mi madre organizo un almuerzo para recibir dos primos de ella que vienes desde Suiza, solo se quedaran unos días pero ya sabes como es esa cubana- dice sonriendo.- ¿que dices? ¿me acompaña a pasarme un día de tortura con esos estirados?-

-okey, pero ¿por que estirados?- le pregunto con intriga.- iluminame.

-bueno, según lo que me cuenta mi madre, el abuelo por parte de padre de ellos era un Sir ingles pero que residia en Suiza y poseía muchas tierras y tenia una gran empresa de enlatados la cual era la única que proveía alimentos gratuitamente durante la segunda guerra mundial al país de Suiza. Dos años después el gobierno en forma de agradecimiento le otorgo todo tipo de comodidades las cuales el y su esposa aceptaron para asegurar el bienestar de sus descendientes. Ahora, luego de la muerte de sus padres en un accidente todo quedo a nombre de ellos dos.- cuenta Jose mientras se acomodaba en si puesto el cual era a mi lado.- nunca los he visto pero mi madre me dice que son jóvenes, no como nosotros dos claro, pero el debe de tener casi 30 y ella 22 o 23, no se- dice alzándose de hombros.

-¿y entonces a que vienen?- le pregunto ya motivada por toda esa historia. Yo solo he viajado a Cuba con mi madre y con los padre de Jose una vez que ellos nos invitaron. Siempre le he pedido a mi madre ir a Estados Unidos pero siempre se niegan rotundamente, como si ellos repudiaban a aquel país.- de venir hasta aquí tan lejos deben de tener un motivo.

-bueno si, mi madre para convencerme dice que es ha visitarnos pero ya tengo claro que por la supuesta historia de amor de Jhonna o Jenny realmente ni siquiera me se su nombre bien-dice y estallo en carcajadas- pero volviendo al tema, ella tuvo una historia de amor y esas cursiladas de mujeres y su novio extraviado como le llama ella, vive en República Dominicana. Es como si esta vez la reina va detrás del príncipe- dice riendo pero ya no puede continuar porque el profesor llega al aula.

*****

-¿te dijo Jose lo del martes?- me pregunta Mel una vez entramos a su coche. Hace casi 15 minutos que se habían acabado las clases y justo hoy se le dañaron los dos neumáticos delanteros a su coche.

-si, me pidió en la clase de biología que lo acompañara a un día de tortura-digo sonriendo- ¿por que?

-me lo había pedido a mi pero ya tengo planes.

-traidor- murmuro- pero ... espera ¿planes? osea ¿tienes una cita?- le pregunto moviendo las cejas con picardia y pegando le en su costado con mi codo para molestarla.

-no es lo que crees Ela, si es una cita, pero con mi doctor.- sonríe pero su sonrisa no llega hasta lo ojos. Una sonrisa sin brillo. Me preocupo al instante.

-¿te sucede algo?- cuestiono a lo que ella enciende en coche.

-nada grave- otra vez vuelve a sonreír dando me a entender que el tema no le interesa.

Una vez llegamos a casa la invito a pasar pero se excusa con que debe ir donde su abuela Rita, la mujer mas dulce del mundo.

- Ela, Ela- al entrar a casa recibo a un Dylan eufórico- ¿a que no adivinas que me regalo papa?- pregunta y en sus ojos puedo ver una alegría única, una que no veía desde que gano aquel torneo de béisbol  hace un año. Un Bóxer sale corriendo a su encuentro y se sienta justo al lado de Dylan.

-¡hola hermoso!- digo sentándome junto a el en el piso mientras me lame. Es hermoso, su característico pelo marrón con blanco llama mi atención de una forma única. Es precioso.- yo soy Ela- me presento sin importar que sea un perro.- ¿y tu eres...?

- es Chester- contesta mi hermano y una sonrisa adorna mis labios y miro con adoración al pequeño animal- papa me lo dio por obtener buenas calificaciones.- el se sienta junto a mi y juntos jugamos con Chester.

- eso es bueno enano, felicidades.- le digo ya levantándome y cogiendo mi mochila que había dejado tirada cuando entre.- ¿donde están papa y mama?-

-están trabajando, dijeron que no llegarían hasta tarde- contesta mientras comienzo a caminar a mi habitación- y Ela, la tía Alice pidió que fueras a su casa este fin de semana, dice que tiene algo para darte.- asiento voy hasta mi habitación

Al entrar lo primero que veo son aquellos tulipanes lima que me envió Alex, otra vez vuelvo a sonreír pero esta vez con amargura. No he sabido nada de el desde hace días, no me lo he topado ni por sospecha y no se como sentirme.

Me recuesto en mi cama con la vista hacia los tulipanes hasta que  el timbre de mi celular llama mi atención. -¿si?- contesto sin mirar.

-¡hey! soy yo, David- digo una vez descuelgo- ¿como estas? - pregunta.

-estoy bien ¿y tu?- me siento en la cama mientras espero su respuesta.

-¡genial!- exclama y siento en su voz mas alegría de lo que antes había.- ¿que harás este sábado en la noche?.- pregunta y mi ceño se frunce- ya se lo que piensas pero es que debo decirte algo que considero importante.- dice y me relajo.

-nada, estoy libre- contesto.

-pues bien, te paso a buscar a las 7:30 pm-

-bien, te esperare- le digo y luego cierro.

*****

Escojo un vestido blanco ligeramente ajustado en la parte superior y ancho en la parte inferior, adornado con con rosas azules y unas zapatillas con finas tiras cruzadas entre si color crema. Mi pelo lo dejo suelto y ondulado. Lista.

Las bocinas del coche de Jose me avisan su llegada y bajo al instante. Mis padres se encuentran en casa por extraño que parezca y me despido de ellos y de Chester al salir.

-no te tengo que decir que te ves guapa porque ya lo sabes, así que estirados ¡allá vamos!- una gran carcajada brota de mis labios y no la puedo evitar.

-oye, ¿no has notado algo extraña a Mel?- me pregunta Jose rompiendo el silencio.

-humm... ahora que lo pienso si, ayer me dijo que tenia una cita con su doctor pero no quiso abundar sobre el tema- contesto.

-que extraño...-murmura.

-muy extraño...-

La casa de Jose es grande, posee una gran patio delantero y uno igual trasero, un garaje para por lo menos 5 coches y una alberca espectacular donde no me vuelvo a bañar con Jose ni loca. La casa es de dos pisos y a decir verdad hay mas empleados de limpieza que dueños.

-hogar dulce hogar- dice Jose al abrir la puerta de la entrada para mi.

-¿a que hora llegan?- le pregunto una vez me siento en uno de los bonitos sofá color blanco que adorna la sala.

-ya están aquí- contesta mirando detrás de mi- ven- extiende su mano hasta mi y caminamos hasta el comedor.- familia- habla para llamar la atención de todas las personas que se encuentran allí.- llegamos.

-ohh Elaine, que bonita te ves- dice Josefina, la madre de Jose dirigiéndose hasta a mi para abrasarme.

-gracias Josefina- contesto y su padre hace lo mismo.

-mira, ellos son mis primos segundos...

-Jhon, Jhon Piaget- me saluda con cortesía un chico, mas bien, un hombre alto de piel blanca, cabello castaño oscuro y unos ojos verdes encantadores. Su mirada hacia mi es intensa y muy intimidante.- un placer- besa el dorso de mi mano y puedo sentir sus labio que aparte de finos son muy suaves. Un carraspeo se escucha detrás de mi y alejo con cuidado mi mano de el.

-igual- no se si esa fue mi voz o mi conciencia. Miro a la chica que se encuentra a su lado que por alguna extrañisima razón no me inspira nada bueno.- hola, soy Elaine. Encantada- le digo extendiendo mi mano a la cual ella con una sonrisa toma.

-soy Jhoanna, Jhoanna Piaget. El gusto en mio.

Cautivando a AlexDonde viven las historias. Descúbrelo ahora