La Latina❤

Capitulo 118 ♥

-La latina- Capítulo 118. ÚLTIMOS CAPÍTULOS.

- James, ya tuve a mi primer hija –Es lo primero que dices al despertar- estoy tan feliz

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- Auch, auch, ¡auch! –Grita James sobándose el cabello-

- Camila, deja de arrancarle el cabello a tu padre –Ríes mientras te subes a la cama y te cruzas de piernas, poniéndote alado de James y tu bebé de ya seis meses, llamada Camila-

Narra la escritora:

James tenía en su estómago a Camila, la tenía agarrada en brazos y así no se caería, le consentían demasiado, pero aun así era la bebé más tierna del mundo. Y le gustaba jugar con Fox, sí, Fox había regresado a casa unos tres meses antes de la llegada de Camila.

James le miraba y sonreía, te veía a ti cuando eras una bebé, eran igualitas. Sí, habían rasgos que sacó de James, pero eran más de ti. La bebé reía porque James le hacía cosquillas y hacía muecas graciosas. Pero eso no detenía a Camila para seguir jalando el precioso cabello de James.

- Esta bebé me dejará calvo –Grita y la bebé ríe, tú también ríes y tomas en brazos a Camila-

- Es porque ama tu cabello, todos amamos tu cabello James –Le sonríes-

Narra James:

Mi Kira se puso más hermosa de lo que era antes de embarazarse, ahora que tuvo a Cami, se puso mejor físicamente, su cuerpo es una escultura de los dioses, y sus facciones resaltan más, ya no se ve tan adolescente, pero no se ve grande, se ve acorde a su edad, tan perfecta mi pequeña.

- Mi pequeña Camila –Sonríe James mirando cómo la bebé jugaba en la cama, comiéndose su propio dedo de su pie-

- Es tan hermosa –Llegas por detrás y abrazas a James con los dos brazos, pero sin dejar de ver a Cami-

- Sí, se parece a su madre, son igual de perfectas las dos –Se voltea, tú no lo dejaste de abrazar. Te sonrojas-

- Pero también se parece a su padre –Sonríes- su padre también es la perfección, es una Maslow

- Oh sí, los Maslow tenemos nuestro encanto –Te guiña el ojo y lo abrazas más, luego te recargas en su hombro y él te abraza-

Narra la escritora:

James creía que era un abrazo romántico, un abrazo tierno donde se daban amor y paz, y sí, efectivamente lo era, pero eras una pilla que cuando menos se lo esperó James, bajaste su mano hasta su trasero, se sorprendió y luego te separaste de él un poquito y reíste. Él sólo rió contigo y luego te volteaste para ir con Camila y sientes una nalgada en el trasero, te dolió demasiado. Pero eso significaba que James se vengó y que eras suya, eras de su propiedad.

- ¿Sabes que eso dolió, verdad? –Lo fulminas con la mirada-

- Sí, sí lo sé, y porque tú misma me has dado nalgadas en el trasero, sé que duelen y peor que una bofetada en las mejillas –Ríe-

- Me preguntó qué le enseñarás a Camila cuando sea grande, eres sucio Sr. Maslow –Bromeas-

- Ay, pero si Kira no se queda atrás, ¿quién es la sucia que grita mi nombre cuando estamos teniendo... -Lo interrumpes-

- Cállate James –Rompes a carcajadas y James también- Cami, mi bebé, no le hagas caso a tu sucio padre –Tomas a Cami en brazos y caminas hacia la puerta-

- Y tampoco le hagas caso a tu sucia madre –Te quita a Cami y bajan los dos a la cocina-

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