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Me levante y hice un poco más de esfuerzo para producirme a la mañana. Salí de mi cuarto y comencé a desayunar en la mesada de la cocina. No pude evitar revivir lo que había pasado ayer, en la mesada de la cocina.
- Estamos de buen humor hoy? - me preguntó Taylor.
- Por? -
- Nunca te levantas con tiempo para desayunar, siempre salís corriendo, ni te veo a la mañana - dijo mientras se servía leche con cereales.
- Puede ser - me encogí de hombros.
- Vamos! Contame algo! No te hagas la desentendida, ayer te vi con Tom! Si no los interrumpía iba a ser testigo de... - comenzó a decir.
- No ibas a ser testigo de nada! No iba a pasar nada! Tom no quiere que pase nada! - me desquite con ella.
- Me estás cargando? - tenía la boca abierta.
- No! Yo soy la no quiere, Tom... El... Bueno, el... no sé qué le pasa - para que había hablado?! Encima Taylor no es lo más confiable que digamos, no se lo podía decir a Leila!? O a otra persona?
- Que raro! Ayer se besaban como si... A Tom parecías gustarle, estás segura? - rodee los ojos.
- Si, y Tay? - agregué - no le digas a nadie, por favor - hizo un gesto que iba a mantener su boca cerrada. Termine el desayuno y fui a la universidad.
Leila me estaba esperando en la entrada de anatomía, mi primera clase.
- YA! Contame todo! - demandó cuando me vio llegar.
- No tenes nada mejor que hacer? Una clase que tenes que estar? - le pregunte.
- No y si, tengo clase pero eso no le gana a querer saber de tu salida con Tom - le sonreí y empecé a contar.
- y bueno, después me acompañó hasta mi habitación pero cuando estaba por cerrar la puerta nos empezamos a besar y termino entrando y... - no me dejó terminar.
- NO LO PUEDO CREER! Lo hicieron - me grito en secreto.
- Déjame terminar! - le dije de la misma forma y seguí contándole lo que había pasado - nos estábamos besando pero de repente Taylor tiro un plato y pare para ver qué pasaba. Había tres personas en la habitación, así que le dije a Tom que se fuera y me fui a mi pieza - termine con el relato.
- Pero entonces? - me preguntó.
- Entonces nada, la pase increíble. Aparte no estoy lista para eso, no digo que no lo quiero hacer con Tom, solo que no quiero ser una más - le explique.
- No serías una más para él - rodee los ojos, eso nadie me lo podía asegurar.
- Él tampoco quiere - ahora rodó los ojos mi mejor amiga.
- Se nota por todos lados que él quiere, pero te conoce y sabe que lo mejor es esperar -
- Lo que digas "defensora de los que rechazan a tu mejor amiga" - le dije, aunque sabía que tenía razón.
- No digas eso! Tom no te rechaza! Tom, sabe lo que es mejor para vos -
- Si, ya se pero... - no sabía cómo explicarlo.
- Te entiendo amiga - me abrazo. Por eso la quería a Leila. Después de eso entre a anatomía y ella se fue a la clase que le tocaba.
El día paso lento y aburrido. Fui al hospital, como llegue temprano iba a pasar por la nursery pero decidí ir al piso de la guardería a ver si Tom seguía haciendo de voluntario. Pero en la guardería solo había chicos con una enfermera. Me acerqué para preguntarle dónde estaba Tom pero decidí que era mejor no hablar, ya bastante vergüenza que sea yo la que lo venga a buscar después de la primer salida, no hacía falta que se entere que pregunte por él. Me subí al ascensor y toque el 3 para ir al piso de la nursery como de costumbre, pero antes de ir a ver a los bebes entre al baño a ponerme el traje de médica. Comencé a caminar por el pasillo cuando me choqué con alguien.
- Tom! Que haces acá? - le pregunte al ver con quien me había chocado.
- Sabía que tenías que entrar dentro de un rato y vine a ver si estabas pero como no te vi estaba volviendo a la guardería - le sonreí. Él también me quería ver, no era la única.
- Yo... Emm.. Vengo de ahí - le dije.
- Así que vos también me extrañabas? - me tomo de la cintura.
- Si queres creer eso... - le sonreí. La gente pasaba y miraba raro. No era común para los pacientes ver a dos médicos abrazados en el medio del pasillo.
- Veni - me dijo y de la mano me llevó a un cuarto. Cerró la puerta y apoyándome contra ella unió su boca con la mía - te extrañe - me murmuró al oído.
- Me viste ayer a la noche - me reí.
- No aguantaba más - le acaricie la cabeza - Queres salir hoy? -
- Te vas a aburrir de mí si estamos tanto tiempo juntos - le dije. Mientras abría la puerta y comenzaba a caminar.
- Nunca - me respondió - a donde vas? - me persiguió.
- A la nursery - dije como si fuera obvio, todavía tenía un rato para ver a los bebes.
- Son TAN chiquitos - me dijo mientras los mirábamos - Esa se parece a vos -
- No hay manera que te des cuenta de eso! - exclame.
- Si! Y ese soy yo - me dijo señalando a la cuna de al lado de la que se "parecía" a mi. El bebe comenzó a mover la boca como si quisiera decir algo - Anímate - le hablo al bebé.
- Que se anime a que? - Le pregunte.
- Sabes lo que le quiere decir Tom bebe a Kate bebe? - alzo las cejas.
- Que? Que le quiere decir? - Le seguí el juego.
- Le quiere preguntar si ella quiere ser su novia - era real? Era verdad que Tom me estaba pidiendo lo que estoy pensando? - Que opina Kate grande al respecto? - me preguntó.
- Me parece que son un poco chicos, que debería esperar unos años para hacer esa pregunta - le respondí.
- Veinte años son suficientes o tengo que esperar unos más? - me estaba pidiendo ser su novia, no era un sueño.
- Veinte años es mucho, ojalá que ella siga queriendo después de tanto tiempo - le dije.
- Me estás diciendo que es tarde para lo nuestro? - parecía horrorizado.
- No - lo tome de la cintura y atraje hacia mi - te estoy diciendo que esperaste suficiente - le sonreí.
- Entonces queres? Queres ser mi novia Kate? - Me preguntó.
- Si Tom, quiero - le dije y no puedo describir la sonrisa con la que me miro pero debió ser la misma que tenía yo. Aunque lo tuve que dejar de mirar cuando me besó nunca me voy a olvidar su reacción, estaba feliz, feliz de que le había dicho que si. Fue un beso corto pero tan dulce, y con tanto sentimiento que me dejo sin aire.

SOS En riesgo mi corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora