Deja de llamarme.

Capítulo doce.

Capítulo doce

Miles de sentimientos invadieron mi mente, entre ellos rabia, dolor, frustacion, decepcion, tristeza, ira, simplemente no lo podia creer. La vida es una porqueria. Como se venia venir, lloré mucho... no me importaba si Darren me estaba buscando, tenía que desahogarme. Era un dolor muy grande, ¿En que estaba pensando cuando mató a tanta gente? Es un demente. Pasaron como veinte minutos y fui en busca de Darren para ver como iba el juego. Me tomó un tiempo tranquilizarme, y mucha fuerza de voluntad el no ir a estrangularlo allí mismo.

Salí a la piscina y allí estaba el gritando "¿Taylor?".

—Eres malo buscando —sonreí.

Él se acerco a mi, lentamente. Su mirada carecía de emociones y su tacto era frío cuando tomo mi cara en sus manos.

—¿Estabas llorando? —¿Cómo supo?.

—No, solo que estaba en el sotano y tanto polvo me hizo mal. —Vale, soy buena mintiendo. No me había dado cuenta.

—Oh.

Ya había salido la luna y optamos por dormir y descansar pero pensar era lo que debia hacer. ¿Ahora que haría? No se que hacer, es un idiota pero... es mi idiota, me hace reír, me hace vivir. ¿Como una persona tan hermosa puede ser tan malvada? Dios santo, me volveré loca. Fuimos a la cama y nos acostamos, le di la espalda por instinto... me sentía dolida.

—Buenas noches, cariño —me dio un pequeño beso en la oreja mientras me tapaba mas con la cobija. No puedo odiar a alguien así, ¿o si?

El quedo dormido y yo... bueno, quede pensando. No sabía realmente lo que debía hacer. ¿Agarraba un cuchillo y lo mataba? ¿Debía dejarlo pasar y amarlo? No, mato a mi familia. ¿Hacerlo sufrir como el hizo conmigo? No soy realmente capaz. ¿Que debía hacer? Dios, ayúdame. Entre las sabanas mis lagrimas caían en silencio, y una idea vino a mi mente. Ya se que haría. Salí del cuarto al rededor de las 3:26 am para comenzar mi plan ahora, asi que busque en mi habitación un bolso y allí metí ropa, arregle una maleta muy común, cepillo de dientes, ropa, y esas cosas. No muy grande.

Luego fui a la habitación de Darren y saque de su caja fuerte un gran paquete de dinero, la verdad el era un hombre de buen estado financiero y nisiquiera notaria que agarre eso.

—¿Taylor? —Su voz, tan ronca me hizo voltear lentamente. Mierda, pense. Darren estaba en la cama, sus ojos cerrados, el estaba sudando y susurraba mi nombre. Me tomo unos minutos darme cuenta que estaba soñando, tenía una pesadilla. Mis nervios se relajaron y la tensión desapareció. Por un momento pensé que se daría cuenta de todo y me mataría. 

Se hicieron las cinco de la mañana y ya tenia todo listo.

Me iría a Italia en el primer vuelo que consiga, a la casa de mi tío. Estoy decidida a huir de Darren. 

N/A: 

Comenten y voten. Como me gustaría un comentario. Al menos...