Capítulo 8: Tímida

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Algunos dirán que soy una tonta, torpe, entre otros insultos similares, sólo soy algo despistada, me cuesta mantener equilibrio y me pongo nerviosa, lo cual hace que me ría mucho. Pero Mina, Mina siempre se preocupa de mi.

- ¡¡¡Ouch!!!

- ¿Te encuentras bien?

Asentí sin siquiera mirar al frente, me sentía apenada, había chocado mientras ensayaba. De pronto sentí unas manos sujetando mis brazos, diciéndome que debía ser más cuidadosa y concentrarme. Miré su rostro para agradecerle por su preocupación, y noté que era muy bella. Normalmente, cuando la veía en la sala de prácticas no podía ver bien su rostro porque su chasquilla lo cubría, era muy tímida por lo que no hablaba mucho y estaba todo el tiempo cabizbaja.

- ¿Cómo te llamas?

- ¿Yo? Minatozaki Sana, tú eres Miyoui Mina, ¿no es así?

- Lo recuerdas...

- Eres la única chica que nunca habla con nadie, me llamabas la atención y así es como me aprendí tu nombre. Por cierto, jamás había visto tu rostro de cerca, eres muy linda

- G-gracias...

Su rostro se sonrojó cuando le dije eso, y se apartó rápidamente para continuar bailando. Me quedé pensando en ella, en que quizás ya que para ella resultaba difícil acercarse a los demás quizás debería ayudarla a integrarse. Por lo que me acerqué a mi amiga más cercana cuando acabamos de ensayar. Ella como siempre, destacaba por su gran baile, pero terminaba completamente agotada.

- Momo chan, ¿qué piensas de Miyoui Mina?

- ¿Quién? ¿la chica de allí?

Me preguntó con pereza apuntando con su mentón en su dirección, entonces le asentí, volteó su rostro hacia mi y me miró con seriedad

- Pienso que es muy guapa.

- Boba, no me refiero a eso, ¿no crees que podríamos integrarla? Aunque es cierto, lo es

Sonreí un poco esperando que ella aceptara, con un simple gesto de la cabeza asintió mientras llevaba a su boca una botella con agua para hidratarse. Entonces me dirigí hacia ella con el mejor de los ánimos cuando de pronto pisé una de mis agujetas y resbalé sobre ella

- ¡Kyaa! ¡¿por qué siempre me pasa esto?!

- ¿Te encuentras bien?

Me preguntó, mis mejillas ardían, cuando caí sobre ella, le di un beso. En sus labios. Y no dijo nada. Sólo se preocupó de que yo estuviera bien, aún así, no fue un beso tecnicamente, ¿no? sólo chocamos, además fue muy duro, me dolieron los labios porque sentí sus dientes con el golpe. Asentí cubriéndome la boca con la mano, pero ella la apartó para mirar

- Estás sangrando. Debes tener más cuidado ¿si?

Sin soltar mi mano me llevó hasta su casillero, lo abrió y de este sacó un pequeño botiquín, desinfectó mi herida y le puso una bendita con dibujos de hello kitty.

- ¿Mejor?

- Si, muchas gracias, siento que hayas tenido que pasar por eso. Ahm yo, nosotras, es decir, quería saber si te gustaría comer conmigo y con Momo, claro, si no te molesta.

De pronto me puse nerviosa, me sentía torpe, ¿cómo es posible que dos veces el mismo día choque con alguien? pero a ella no parecía molestarle

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