14

330 19 1
                                    

Me desperté al día siguiente con la sensación de que iba a ser, realmente, un gran día. Estaba contenta y feliz, por primera vez en varios días, plenamente sin opresiones. ¡LIBRE!

Me senté en la cama y me estiré intentando despertarme. Se podía oír perfectamente desde mi cuarto como llovía torrencialmente. Tomé una toalla y decidí darme una ducha rápida compensando el baño que no me había dado el día anterior.

En cierto momento de la ducha, mientras "Off the Chain" de Selena Gómez and the scene sonaba en la lista de reproducción, cerré los ojos mientras el agua que caía se resbalaba sobre mi piel. No sabía qué era lo que mi cabeza quería reproducir. Mezclaba imágenes, me confundía y a la vez me hacía estremecer. Comenzó con las manos de Carlos acariciando mi piel con dulzura mientras dejaba un camino de besos tras su camino, luego se reproducía la sonrisa de Antoine, dulce y encantadora, aparecían los ojos marrones de Carlos y su voz diciéndome 'Te amo' para luego escuchar la voz de Antoine con su acento francés pidiendo conocerme.

A Carlos lo amaba y a Antoine recién lo conocía. No tenían comparación pero mi cabeza aun así quería mostrar las distintas emociones que yo sentía al estar con cada uno de ellos.

Yo, definitivamente, debía dejar de pensar en Carlos para concentrarme en Antoine y quererlo, realmente quererlo como algo más que un amigo era la única opción. Era lo que tenía en mano y la única manera de no sufrir. Olvidándome de mi vecino.

Ese día iba a abrigarme como Dios manda, además se lo había prometido a Antoine, por lo que iba a cumplir mi palabra. Me calcé unos pantalones gruesos negros, una blusa blanca, un suéter de lana y encima una chamarra estilo canguro bastante grueso y cubrí mi cabeza con uno de esos gorros tejidos de color beige. ¿Demasiado? Si tal vez pero conociéndome tendría frío si solo me llevaba el suéter de lana.

Cuando llegué a la sala, pude ver el suéter de Antoine sobre mi sillón. ¿No se la había devuelto?

''Caminamos muy juntos, en silencio, con nuestras manos en los bolsillos. Tranquilamente, nos íbamos acercando a mi casa. Yo no quería que me acompañase, tenía en cuenta que él vivía para el otro lado pero insistió y no pude negarme a su ¿caballerosidad?

Bien, el sábado pasaré por ti e iremos al parque y te enseñaré a patear el balón ¿Tienes tenis? Preguntó cuando nos encontrábamos en la puerta de mi casa.

Me apoyé delicadamente en ella mientras sonreía como boba. Asentí simplemente una vez.

Espérame con uno de esos cafés tuyos y yo seré feliz, aunque no me olvido de nuestro trato Comentó mirándome entrecerrando sus ojos celestes.

Mejor así, esperaré con ansias, Antoine y al fin de semana también. Gracias por este... paseo. La pasé realmente bien Dije apoyando mis dos manos sobre sus hombros.

Podríamos tomarlo como nuestra primera cita, ¿no crees? Preguntó acercándose mientras me tomaba de la cintura¿Cómo crees que debería terminar? Siempre tuve esa pregunta rondando en mi cabeza.

Sabes, no eres el único con esa duda, yo también la tengo. Podría terminar acá y esperemos a mañana, ¿te parece? Comenté sin alejarme ni un centímetro pero aun así, 'marcando un límite'

Él rodó los ojos aunque luego sonrió. El esperaba otra cosa pero yo no iba a besarlo si eso era lo que él estaba esperando. Le devolví la sonrisa, besé su mejilla y entré a mi casa mirándolo por última vez. Sonreí recordando su mirada traviesa a la espera de un beso más amoroso."

𝐌𝐈 𝐕𝐄𝐂𝐈𝐍𝐎 || 𝐂𝐚𝐫𝐥𝐨𝐬 𝐕𝐞𝐥𝐚 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora