Capitulo 9

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Narra Héctor

-¿Qué te traes con tamara imbécil?- digo acercandome a el.

-Tranquilo tigre, tu noviecita es muy infantil para mi, ¿Has visto su collar?-dice con tono egocéntrico

-Me entero de que te acercas a ella y te parto la cara, no te quiero cerca.

-JAJAJA no pienso violar a tu novia... aun- no aguante mas y me avalance en el, lo golpeaba una y otra vez tomaba vuelo para el golpe cuando el me volteo y le dio puñetazos en la cara, le tome el puño y lo golpee, escuche la voz de medio campamanto pero no puedo dejar le golpearlo y el me golpeó y sentí sangre en la ceja.

-¡Héctor basta!- grita támara e intenta separanos pero al momento de tomar vuelo para dar otro golpe támara se acerca y la golpee en la ceja.

-¡Támara!, ¡¿Estas bien?!- dejo a armando y voy con támara que esta sorprendida, le pegue muy fuerte.

-Dejame, eres un animal, ¿como puedes hacer esto?- se cubre la ceja.

-yo no quería golpearte, te lo juro- digo sosteniendo su cara con mis manos.

-eso no bestia, esto- señala a armando.
-el me provocó- digo en mi defensa.

-vamos ven te ayudo- ayuda a armando o si que esta en problemas.

-Támara, por favor, ven, hay que hablar.

-Yo no tengo que hablar de nada contigo- dice ayudando a armando.

Narra Támara.

-No puedo creer que te halla lastimado así, ¿Por qué se pelearon?- digo curando sus heridas.

-Por ti, el cree que me gustas.

-Es muy celoso, lo lamento- agacho la cabeza y me siento a lado de el.

-Hey no pidas perdón por las tonterías de tu novio- me levanta la cabeza con su dedo.

-No se si es mi novio- lo miro a los ojos, wow pero que ojos, son verdes, perfectos con pestañas largas y ay dios mio.

-Entonces ¿Lo amas?-me mira a los labios.

-Si, mas que a nada, no se si es exactamente amor, pero se que es algo muy fuerte, el es la persona con la que quiero estar, besarlo, acariciarlo y ver sus hermosos ojos cafes, perdón estoy siendo muy cursi, me limpio una pequeña lágrima.

-No te sientas mal hermosa, me a pasado, por eso ahora soy un rebelde, rompe corazones, ya sabes hermosa.

-¿Puedes contarme esa historia? - pongo ojos de perro a medio morir, siempre funciona.

-Esta bien hermosa, pues yo era un adolescente precoz y virgen, y también me gustaba una niña de la secundaria, ella era alta con cabello entre castaño y rojo, mas bien naranja, el punto es que ella me hizo su mandadero, una noche después de 1 año de "relación" la encontré besando a una chica, si una chica y pues me lastimo, ese día decidí bloquear mis sentimientos hacia todo y todos, pero tu tienes un toque de ella, no se, eres especial- dice tomando mi mandíbula.

-Si, soy la princesa lumi debería ser especial, muchas quieren ser princesas yo no, solo quiero ir a la escuela, tener amigos, ser normal- digo evadiendo sus miradas.

-Eres mas que una princesa, sabes yo igual soy un chico "normal", igual iba a la escuela y tenia amigos, era el chico nerd de la secundaria, claro eso fue cuando tenia 15, desde entonces, en la prepa, soy el guapo, popular, busca problemas, me quiero enamorar algún dia- dice con melancolía.

- Me harás llorar- mi tono cambia de tristeza a sarcasmo.

-jaja- intenta reir.

-Ven, vamos a ver a mi "novio" no quiero que se preocupe- me levanto.

-¿Es en serio Támara? Le limpiaras las heridas, te golpeo, tienes un moretón en el labio- se levanta, se para enfrente de mi y me acaricia el moretón.

-Quiero escuchar las 2 verciones de la historia y no me pongas una mano encima, no somos amigos, golpeaste a mi novio, me acosas, ¿Quieres que siga?- le quito la mano de mi labio.

-Yo...

-Tu nada, yo me voy- lo interrumpo y salgo de la habitación.

Me dirigigo donde esta Héctor y tiene los puños golpeados y moretones, se ve muy sexy.

-¡Amor!, no, ¿yo te hice eso? Perdoname, de verdad no quería hacerte eso- se acerca y me toca el moretón.

-No te preocupes, se que fue un accidente, me preocupas tu,¿ como te sientes?- Lo veo a los ojos y me pierdo en sus pestañas.

-Yo estoy bien, perdoname- me abraza- jamas me perdonare por esto.

-Amor, de verdad estoy bien, vamonos.

-Si, a donde tu quieras.

-Vamos a la cabaña, solo quiero abrazarte y besarte, no me gusta que seas tan celoso, yo solo tengo ojos para ti.

-Lo se, me llena de rabia que alguien mas te vea con ojos de lujuria.

-Tranquilo, vámonos- me carga en su espalda y le beso en su pómulo.

Muchas gracias por leer, cada día somos mas y eso me llena de alegría.

Foto de Armando en la descripción.

Yo Si Creo En Los UnicorniosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora