Narra Tamara
-Hector, no te veo desde que tenias unos 3 años- lo saluda y se abrazan.
-Hola paola, te esperabamos en unos dias mas.
-Támara, Héctor es el hijo de un fiel escudero que lamentablemente murio hace tiempo- no entiendo nada.
-¿Alguien me puede explicar que carajo pasa aqui?
-Dios Támara modula tu vocabulario querida- me toca la nariz y se dirige a la cocina y hace ese horrible ruido con los tacones- mira cariño, hace muchos años tu padre y yo gobernabamos en el bosque y nuestra mano derecha era Hoops, Héctor Hoops, osea el papá de tu "novio"-¿comillas? Estoy soñando.
-Si tam, mi nombre completo es Héctor Hoops JR- es una pesadilla.
-Que diverdito no saben sus nombres completos y ya se aman- hija de p…
-Bueno, pidamos una pizza y luego me voy a casa- Héctor interrumpe mis pensamientos.
-No querido, puedes quedarte aquí, estoy segura que a tami no le molesta- se que es mi madre, pero de hay veces que la odio.
-No me digad tami madre, no tengo cinco años.
-No discutamos hoy cielo, estoy cansada- diooooooos sacame de aqui.
-¿Por que no nos cuentas como fue tu viaje repentino?- Dice Héctor al ver que estoy apunto de sacarle los ojos.
-Pues me llamaron de mi trabajo y tenia que ir a paris, luego a londres, italia… a y te traje algo mi amor- ay no otro regalo no, siempre que me abandona me trae algo inservible.
-Dios madre, podemos dejar eso para otro dia, yo igual estoy cansada y solo quiero dormir, permiso.
-Támara regresa- me grita mi madre desde la sala de estar.
-No te preocupes, ire a ver que le pasa- escucho a Héctor.
-Ni te atrevas a cruzar esa puerta- amenazo.
-Amor, es tu madre, y esta haciendo un esfuerzo por estar bien contigo.
-No, esta siendo egosentrica, como lo hace desde hace mas de quince años, cada maldito mes desaparece y luego regresa pidiendo que la ame, no ahora que se joda- me quito la ropa y me cepillo el cabello.
-Entiende la, aun extraña a tu padre- me pongo la pijama de unicornios y enciendo la televisión.
-Esa no es una excusa, y si la estas tratando de justificar largate con ella, no te quiero ver, ni a ti ni a ella- estoy muy molesta.
-Támara, ven- se acuesta a un lado y me abraza.
-Tienes tres segundos para soltarme imbécil- me acaricia el pelo y me viene a l mente uno de los pocos recuerdos que tengo con mi padre, estabamos en mi cama viendo un programa de perritos y el me acariciaba el cabello exactamente igual, no puedo evitar soltar las lagrimas.
-No llores amor- me acuesta en su pecho.
-No entiendo por que se fue, me esta haciendo mucha falta Héctor, si el estuviera aqui conmigo las cosas serían diferentes, lo extraño mucho- me suelto a llorar.
- Te entiendo, pero el echo de que este o no este, no cambia nada.
-Claro que lo hace, si el no estuviera muerto a mi no… - carajo estupida lengua.
-¿A ti no que?- pregunta preocupado.
-Nada- miento.
-¿Que paso?- te odio estupida lengua.
-Mira, cuando tenia 6 años sali a buscar a mi papá por las calles y se hizo de noche y… bueno entre a un bar y dos borrachos…- suspiro- me… violaron- carajo esto no es facil de decir.
-¿Como? No sabía, dios Támara debió ser muy difícil.
-Nunca levante una denuncia, ni mucho menos le conte a mi madre, solo lo sabe fresa, el me a apoyado siempre- me limpio las lagrimas.
-Ahora no tienes por que lidiar con esto sola amor, eres una persona increible, estare para apoyarte, estemos juntos o no, ven mi niña duerme y yo cuidare de tus sueños, sueña con nosotros, con migo acariciando tus arrugas, y siempre seguire pensando que eres la mujer mas hermosa del mundo, te amo- fueron las ultimas palabras que escuche antes de caer dormida en su pecho.
NARRA HÉCTOR
-Buenos dias paola- le doy los bueno dias antes de sentarme en la mesa.
-Buenos dias cariño- trae puesto un traje sastre color negro unos tacones altos negros y un collar de perlas.
-Támara digo que estara lista en un segundo, yo la llevare a la escuela- como una manzana.
-O si, esta bien ammm ¿viste mi bolsa?- se preocupa mas por su bolsa que por su hija.
-Esta en el sofa.
-Gracias, dale esto a tami, seguro le va a gustar- es un collar de perros, literal tiene hasta para ponerle la puta correa.
-Si seguro- dios mío ahora entiendo a tam.
-Buenos dias solecito- baja de las escaleras con unos jeans pegados y una playera gris y sus collares de figuras extrañas.
-Que guapa mi niña- le doy un beso y desayunamos rapido para irnos.
-Te veo a la salida amor, te amo lindo dia- me lanza un beso antes de entrar a la escuela, y yo me dirijo a la universidad.
-¿Que vergas haces tu aqui? - si, Armando estaba en mi clase de literatura.
-Calmado, vengo a tonar una clase, no es mi culpa que me transfirieran de universidad.
-Dios, tienes que aparecer en mis lugares favoritos- me siento y tomo mi estupida clase de literatura y lugo voy a mi dormitorio y tomar una ducha antes de ir a mi siguiente clase.
-¡Oye Hopps!- escucho gritar a Armando.
-¿Qué quieres?- sigo caminando.
-Saber porque me odias tanto.
-Mmm, te dare una sola razón, intentaste tocar a mi novia, y eso te parese poco- yo solo quiero un baño tranquilo.
-Bah, eso fue hace dias, superalo- me paro de golpe.
-No, es mi novia y si tu te atreves a ponerle un dedo encima, te juro que tu muerte sera muy lenta y muy dolorosa ¿entendiste?
-Por dios, tu novia es la princesa y yo un simple arquero, no tienes de que preocuparte- cree que es una broma.
-Mas te vale, te tengo en la mira idiota- me sentí como chico malo de los 80's.
Tome una larga ducha y termine mis clases, fui por tamara a la escuela y fuimos un rato al bosque.
-Me gusta estar aquí, es muy tranquilo- se acuesta en el pasto a mirar las nubes.-Di, recuerdo cuando era pequeño y me acostaba a mirar las nubes con mi madre, ella es una persona muy humilde- le di un beso en la frente.
-¿Donde esta ella?
-Seguro en los campos- ella se sienta.
-Llevame, quiero conocerla- me toma de la mano y me dirijo a los campos.
-Mira, ella es mi madre- señale a una mujer mayor de cabello castaño, delgada, y los ojos azules como el mar.
Espero les guste la historia, les dejó una foto de paola y les mando un beso de vaca con artisima baba.
Nos leemos pronto.
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Yo Si Creo En Los Unicornios
FantasyTenia 17 años y todos se burlaban de mi porque yo aun creía en los unicornios... Pero sabia que existían en alguna parte yo... Bueno esta es mi historia.