¿QUE ME ESPERA CON EL TIEMPO?.

Parte 13

al cumplir el mes me dejaron irme porque el hospital estaba muy lleno y yo no estaba como los demas pacientes. Los médicos decidieron tenerme en control desde mi casa, no se imaginan lo feliz que me sentí al saber que saldría de ahí.

Al llegar a mi casa lo primero que hice fue revisar el face, le puse un mensaje a Ana la verdad no se emociono mucho... que esperaba si solo había hablado con ella un par de semanas. En fin hable con todos mis amigos los cuales se contentaron y así pasaron los días. Cada vez me llevaba mejor con Ana me hacía reír montones aun que estuviera tan lejos le daba color a mis días, me dio un motivo para seguir sonriendo.

Tiempo después nos hicimos mejores amigas la verdad tenemos muchas cosas en común. Nunca peleabamos por nada ella de verdad es una de esas personas difíciles de encontrar, fáciles de querer e imposibles de olvidar... entre más hablamos más la conozco, es como un mar de misterios. lo que la hace tan especial es su manera de querer a las personas.

Con el paso del tiempo le confíe todos mis secretos. Todo lo que no me atrevi a contarle a nadie, siempre me daba su tiempo, siempre me escucho y siempre me apoyo... yo traté de hacer lo mismo con ella de ser la mejor amiga sin importar aque, sin importar la distincia, sin importar cuanto dolía no tenerla a mi lado.

Por ahí de Julio y Agosto viajé a Costa Rica fui tres días, pero no la puede ver, porque la mamá no me conocía y desconfiaba. Esos tres días me sentí mal de verdad quería ir a conocerla en persona, pero no pude por qué fui a Costa Rica por la denuncia que le pusimos a mi ex novio por empujarme desde el segundo piso del colegio.
Al segundo día al estar en la corte con el y dar mis declaraciones y él las de suyas, cuando salimos de ahí el se burlo y me dijo que yo era una zorra eso me enojo demasiado y le di un puñetazo en la cara, él me lo devolvió pero logre quitarme así que le di una patada en su entre piernas, él llego y me tiró al suelo y me estaba dando puñetazos en el estomago. En eso pararon la pelea y me dijo gritado que me pondría una denuncia.

Paso todo eso y el juicio quedo en que faltaban pruebas y otras cosas, sin más nos fuimos y al tercer día nos devolvimos a Italia. En ese viaje fui con Aurora y pudimos ir a playa Tamarindo, pero por estar cortas de tiempo, solo eso hicimos.

Hable con Ana y me comentó lo triste y desesperada que se sintió. También le conté que me sentí mal al no ir a verla la verdad aun me siento mal...

Pasaron los días y vi que mamá empezó a actuar algo extraña... se iba de la casa y no decía donde iba llegaba triste y sin ánimos. Llegué a pensar que era una crisis por lo de papá, incluso llegué a pensar que tenía un novio a escondidas de nosotros dos y que el novio le había hecho daño. Me senté a hablar con ella para ver que pasaba, saber si tenía novio o no o si había tenido sexo y se había embarazado o si simplemente era una crisis por la muerte de papá.

-Yo: Mami, ¿que tienes? ¿por qué te vas y no nos dices dónde vas? ¿que es lo que pasa?.

-Mamá: Nada mi amor, es que he tenido que ir a hablar con una señora de asuntos familiares... ya sabes, cosas que ya pasaron.

-Yo: Sabes que puedes contar conmigo en lo que sea, no me gusta verte triste.

-Mamá: Si mi amor no te preocupes...

Al decirme eso vi mucha tristeza en su rostro. Algo no me llenaba de seguridad, algo no estaba bien, pero decidí dejar el tema así.

Con el paso de los días la veía cada vez más extraña. Tenía que ir a lugares por horas, ver a clientes en otras partes y no en su oficina, la verdad ya se me hacía extraño... sin embargo yo confíe en ella en que todo estaba bien. (Confíe pero no creí), sabía que algo había. Le comenté a Ana mis inquietudes sobre ese tema sacamos conclusiones, pero quedamos en ver que pasaba.

Algunas veces a nosotros como hijos nos da miedo o cosa darnos cuenta o tratar de ver que es lo que pasa con nuestros padres y muchas veces no hacemos nada, nada más dejamos que el tiempo pase y nos desentendemos de el tema o del asunto sin detenernos ni tan siquiera un minuto para pensar el por qué o cuál es el misterio o la inquietud que también pueden llegar a tener nuestros padres y la verdad es que termina siendo egoísta de parte nuestra, porque cuando nosotros nos sentimos mal o nos pasa algo, bien que mal ellos siempre se mueven o tratan de averiguar que es lo que nos ocurre. Yo doy de consejo prestar un poco más de atención a las cosas que a nuestros papás les pasa, que al final si termina siendo algo muy grave el arrepentimiento por haber sido tan egoístas es demasiado grande.