Nueva vida, nuevo surf

Capítulo 8: ¡Punto para el experto en romances!

Hoy es Lunes. Día de fiesta en el país, así que hoy me voy de casa y vuelvo a la unviversidad. Estaba acabando de hacer las maletas cuando tocan la puerta.

- Adelante- dije.

- Hola Clara. ¿En serio te tienes que ir?

- Preciosa. Ven dame un abrazo- vino corriendo me dio un abrazo y yo le di un beso en la mejilla- Lara, mañana tengo clases, me tengo que ir. Y me encantaría quedarme aquí contigo, pero
no puedo. Estarás bien con mamá, te va a cuidar muy bien de ahora en adelante, estoy segura.

- Clara, ¿cuando competirás?

- ¿A qué te refieres, Lara? ¿Un duelo de bandas o algo parecido? No tengo banda.

- Clara. Estás mintiendo, sabes perfectamente a lo que me refiero.- con ello Lara hace un gesto de surf.

- Lara, no voy a empezar, no estoy lista...

- Clara, pensaba que tú no me mentías.

- Y no lo hago.

- ¿Y entonces cómo me explicas que cuando llegaste olías a mar?

- Me había dado un baño en la playa antes de venir.

- ¿Y pretendes que me crea eso? Clara, va, no se lo diré a nadie.

Respiré profundamente y le expliqué todo a Lara mientras ella estaba sentada sobre mi cama y yo terminaba de hacer mi maleta. De repente, nuestra madre me llama:

- ¡Clara! ¡Es la hora!

Lara y yo bajamos. Lara me metió la maleta en el coche mientras me despedía de mi madre. Luego, Lara me dio un abrazo muy fuerte y me susurró:

- Clara, tu secreto está a salvo conmigo. Te veré en tu regreso. Por cierto, tienes visita.

Me giré. Shane estaba allí. Y con una rosa roja. Estaba a punto de morirme de lo mono que se había puesto.

- Siento haberme cabreado el otro día por esa tontería.

- Shane, no tienes que disculparte, fui yo la que te lo tendría que haber contado. Y encima me llevaste a un increíble concierto. Eso lo perdona todo. No sabes cuánto te voy a echar de menos.

- Pero me lo puedo imaginar, porque no se puede estar mucho tiempo sin esto.

- Creído. Hahaha.

- Solo reflejo lo que sentiré yo.

Me da la rosa y nos besamos.

- Nos veremos, ¿de acuerdo? Muy pronto- afirmé yo.

- Eso espero mi princesa.

- Te llamo esta noche. ¿Vale?

- Estaré pegado al teléfono.

- Me tengo que ir.

- Conduce con cuidado.

Nos besamos, nos abrazamos, me despedí de Lara y de mamá y entré al coche.

Llegué sobre las 19:24, y vi que Roberto se acercaba hacia mi.

- Hola Rob.

- ¡Vaya fin de semana más aburrido!

- Eso dilo por ti. ¡¡El mio ha sido un tanto movidito!!

- Explicate.

- Mi hermana casi muere, tengo una discusión con Shane, mi madre se ha vuelto simpática, y he ido a los Teen Choice Awards (TCA).

- ¡¿Que tu hermana qué?! No... ¿fuiste a los TCA? A ver, cuentamelo todo mientras cenamos.

Fuimos al comedor y cenamos, se lo conté todo, y lo que le flipó más fue que mi made se hubiera vuelto simpática.

- ¿Y esa rosa que te llevas por todos lados? A ver si adivino: te la dio Shane antes de que te fueras.

-Punto para el experto en romances.

- ¿Voy ganando?

- ¿Cómo no ibas a ganar si eres el único concursante?

- Tal vez tu subconsciente también jugaba.

- Mira que tienes fantasía, ¿eh?

- Es decir que me estás ocultando que tu subconsciente juega, ¿eh? ¡ADMÍTELO!

- Rob, estás loco. Vete a dormir, que creo que necesitas un descanso.

- Tsss. Sólo me envidias porque te he ganado.

- Rob, ¿has bebido?

- Clara, ¿te crees que es divertido beber al mediodía?

- Supongo que quieras que responda que no.

- Correcto, y desde la tarde hasta ahora he estado contigo, ¿me has visto beber?

- No.

- ¿Pues? Traqui, que no he bebido.

- ¿Seguro?

- Tan seguro como que sé que hoy es Jueves.

- Rob, hoy es Lunes.

- Y... has caído, sólo te ponía a prueba a ver si estabas atenta.

- Hay, Roberto, ¿qué voy a hacer contigo?

- Pues puedes empezar por darme un masaje en la espalda, no estaría mal.

- ¿Sabes la diferencia entre un amigo y un criado?

- Pues claro, los amigos lo hacen gratis.

- Yo sí que te daré algo gratis.

Le di una colleja, pero sin querer fue un poco fuerte, y se tropezó, se cayó a la fuente. Me empecé a partir de risa,  vino el guardia de noche, empezamos a correr, el guardia nos perseguía, conseguimos despistarlo, y luego me choqué contra una chica.

- Lo siento, no era mi intención.

- Vaya, vaya. Mira quién se acaba estampando contra mí. La mismísima Clara Taylor.- me dijo la chica.

- Creía que ya nadie se acordaba de mí.

- Cariño, jamás caería tan bajo de admirarte.-me contestó la chica.

- Oye, ¡No hables así de Clara! ¿Entendido? - Se enfureció Roberto.

- ¿Y porqué no puedo hacerlo? - Contestó bruscamente pero relajada ella.

- Porque no tienes derecho a tratarme así sin siquiera saber quién soy- contesté yo.

- ¿Ni siquiera si soy la ex de Shane? -Nos comentó la chica.