I Miss You (Rita x Ryuunosuke)

Capítulo 33: "Despedida"

Después de algunos minutos, Sorata y Mashiro ingresaron en la habitación.

— Ya estamos aquí Rita — dijo Sorata al ingresar, luego desvió la vista hacia Ryuunosuke — Con que aquí estabas. Te estuvimos buscando hace un rato...

— Llevo bastante aquí — respondió Ryuunosuke levantándose del asiento — en fin, tengo algo que hacer ahora — recordando que debía ir a comer algo, como le había dicho a Rita.

— ¿Nos dejarás? — Sorata lo miró preocupado, pensando que quizás seguían peleados.

— Sólo iré a comprar — mencionó Ryuunosuke abandonando la habitación.

La mirada del programador, y su tono de voz eran tan inexpresivos, que era difícil para Sorata, determinar si se encontraba molesto o feliz. Desvió la vista a Rita, y ella sonreía.

— No se preocupen — aclaró ella — le pedí a Ryuunosuke que fuera a comer algo.

— Ah, era eso... qué bien — mencionó Sorata aliviado.

Ryuunosuke recorrió los pasillos de la clínica buscando alguna máquina dispensadora, pero la mayoría de éstas eran de café. Cuando por fin consiguió una de alimentos, compró un paquete de galletas, fue a buscar un café, y regresó al cuarto de Rita.

Ahora se encontraba de mucho mejor humor, y no le molestaba pasar lo que restaba de ese día junto a Rita, estando Sorata y Mashiro. Escuchó un par de risas al ingresar al cuarto, y vio que todos se veían felices. Sonrió levemente, y se sentó en el sofá a comer, y a participar pasivamente de la conversación; escuchando lo que Rita y Sorata conversaban. Mashiro como de costumbre, también estaba silenciosa.

Las horas pasaron, y el día se fue oscureciendo rápidamente. Ryuunosuke no sabría decir, si aquellos fueron los minutos más largos, o más cortos de su vida. La tarde, pasó veloz, pero a cada segundo, recordaba que esa noche tendrían que regresar a Japón. Pese a todo lo que se divirtió esa tarde, no podía dejar de sentirse angustiado, y su sonrisa se fue esfumando con el paso de las horas.

Cuando ya eran las ocho de la tarde, lo sabía... No quedaba mucho más que hacer. Tendrían que abandonar el cuarto de Rita, y regresar a Japón. El vuelo ya estaba planeado para las 21:30 horas, y debían ir al hotel a buscar sus cosas, para luego tomar el vuelo.

— Ya debemos irnos — comentó Sorata mirando la hora.

— Sí — Mashiro asintió con la cabeza.

Ryuunosuke permaneció en silencio. Observó cómo comenzaron a despedirse de Rita, y no pudo prestar atención a las palabras que pronunciaban. Se quedó detenido en el tiempo. El rostro de Rita, se repetía en su cabeza, viendo sus expresiones al despedirse de Sorata y Mashiro. Notando una casi indistinguible, sonrisa falsa constante. Lo sabía, ambos se encontraban igual. Sus miradas se toparon en algunos momentos, y ambos sabían lo que le ocurría al otro. Era una comunicación más allá de las palabras, era un "te extrañaré", un "quiero seguir estando contigo", un "te necesito a mi lado ahora".

Cuando, por fin Sorata y Mashiro terminaron de despedirse de Rita, todo pareció indicar que era su turno de hacerlo. No había avanzado ni un paso sino hasta ahora, que sentía la presión de un despido forzado e involuntario para cumplir con las expectativas de la situación.

Se aproximó a Rita, caminando lentamente. Ambos se miraban con tristeza. Se acercó a ella, y sin dudarlo la abrazó fuertemente... ¿Qué importaba en ese instante su orgullo? ¿Qué importaba si su fobia se activaba? ¿Qué importaba si Sorata o Mashiro lo veían expresarse así? Ya nada importaba. Ahora lo comprendía... lo único que siempre había necesitado era estar con alguien como Rita. Alguien que lo amara y lo aceptara por quien era, pese a todos los molestos defectos que siempre le habían caracterizado.