Sexy beast #1 [Terminada]

18

El casting. Un montón de chicas a por el mismo papel. Ramsey me espera en la puerta, ha insistido en ello. Quiero hacerlo bien. Necesito ser la mejor. 

- Nombre, por favor- pide una mujer tras la mesa dentro de la clase. 

- Audrey Edna Dutti- respondo. 

La mujer apunta algo en el papel. 

- Cuando quiera- me pide. 

La música comienza a sonar y es mi momento de demostrar lo que soy capaz de hacer y lo mucho que merezco este papel. 

***

Después de mi audición salgo a la calle para esperar a que den los resultados. 

- ¿Y bien?- pregunta Ramsey cuando me acerco a la camioneta. 

- Tenemos que esperar a que publiquen la lista- explico apoyándome en el capó junto a él. Doy un montón de bocanadas de aire profundas. 

- Relájate- me pide girando para mirarme. 

- Eso es fácil de decir- suspiro-. Estoy bien, solo son nervios y es algo normal. Se me pasará cuando den los resultados. 

- Espero que los den pronto porque no quiere verte así por más tiempo. 

- Ojalá- murmuro. 

***

Dos horas. Ese es el tiempo que hemos tenido que esperar Ramsey, yo y todas las demás candidatas para saber el resultado del casting. 

- Es el momento- le digo a Ramsey antes de irme. Él me detiene tomándome de la mano y me da un suave apretón.

- Estaré aquí cuando salgas- asegura. 

Asiento lentamente y me giro para entrar de nuevo en la compañía. Todo el mundo está alterado y empujando para ver las listas. Afortunadamente soy bastante grande y puedo verla desde cierta distancia sin problema. 

Audrey Edna Dutti - Gisselle 

No puedo contener mi alegría y doy un saltito de felicidad en el sitio. Tengo que salir y contárselo a Ramsey. ¡Dios el primer papel protagonista de mi vida! La primera vez que no me van a hacer ser un árbol o un personaje con solo para que nadie se de cuenta de lo alta que soy mientras estoy en el escenario. 

¡Joder esto es grande! 

Corro fuera la compañía con una sonrisa gigante dibujada en el rostro y me tiro con los brazos abiertos hacia Ramsey. Lo envuelvo en un fuerte abrazo y me río de felicidad. 

- Lo he conseguido- digo sin creérmelo-. El papel es mío. 

Los fuertes brazos de Ramsey se envuelven a mi alrededor y me mantienen de pie porque ahora mismo siento como si pudiese morir de felicidad. 

Separo la cara de mi hombro y lo miro a los ojos. Están brillantes y sonríe hacia mi. 

- Gracias- le digo-. Gracias. Gracias. Gracias. 

- ¿Por qué?- pregunta confundido. 

- Por dejar que me quede en tu casa- le doy una beso en la mejilla-. Por dejarme poner tu casa llena de pintura- le doy otro beso en la otra mejilla-. Por ayudarme tanto e impedirme que me vaya sin hacer la prueba. 

Pongo mis labios sobre los suyos con tanta emoción que casi me hago daño. Los labios de Ramsey no se mueven durante un segundo y permanecen tan duros como siempre, pero después se suavizan y se vuelven más delicados. Noto como muerde un poco mi labio durante un segundo y abro más la boca para dejar paso a nuestras lenguas. 

- Será mejor que nos vayamos- dice separando nuestras bocas y con la voz todavía más ronca de lo normal. 

- Sí- respondo en acuerdo. Necesito procesar todo lo que acaba de pasar. O necesito más, no lo sé. 

*** 

Sigo a Ramsey hasta su casa. No sé que se supone que busco con esto. Pero quiero besarlo, muchas veces. 

- ¿Puedo usar tu bañera?- le pregunto inocentemente. 

- Sí- responde abriendo el frigorifico y sacando una cerveza. 

Lleno la bañera hasta casi los topes y me meto en ella. Ahora que el baño tiene un suelo nuevo está mucho mejor. La bañera es de patas y la pared también tiene unos nuevos azulejos. 

El agua caliente es muy relajarte, mis músculos en tensión comienzan a expandirse de nuevo, pero es cierto que el agua muy fría haría mejor el trabajo. 

Cuando salgo de la bañera recién renovada me doy cuenta de que no tengo ropa limpia conmigo. Menudo fallo más gordo. Camino hasta la habitación de Ramsey y comienzo a buscar alguna camisa de  las suyas para ponérmela. 

- ¿Qué haces?- oigo preguntar a Ramsey. 

- Lo siento- digo dando un salto. Mis mejillas se ponen calientes por la vergüenza de ser pillada. Me aclaro la garganta. 

Giro sobre mis pies para encontrar a Ramsey ocupando todo el ancho de la puerta. Unos centímetros más y tendría que entrar en las habitaciones poniéndose de lado. 

- Es que no tengo... ropa limpia- susurro. 

Me acerco a la puerta para salir de allí pitando. La vergüenza me va a llegar hasta los dedos de los pies si sigo así. 

- Espera- dice tomándome del brazo antes de dejarme ir-. Lo del beso... 

- Lo del beso- repito tragando fuertemente-. No volverá a pasar si no quieres. Lo siento, te abordé por sorpresa. 

- Audrey, yo... 

- Ya, lo sé. No quieres nada conmigo- trato de despegar mi mano de la suya. 

- Quiero muchas cosas contigo- asegura. 

- ¿En serio?- pregunto esperanzada. 

- Es solo que quiero que sea tu elección. 

Camino hacia él y lo empujo un poco para que retroceda hasta la habitación. 

- Estoy eligiendo- susurro. 

- ¿No deberías tomarte unos días para eso?

- No, ya estoy segura de lo que quiero. 

Con solo empujar mis dedos un poco Ramsey ya cae sentado en la cama. Quiero esto, pero para tenerlo he de armarme de valor. Dejo caer la toalla que envuelve mi cuerpo al suelo. 

Ramsey se queda mirando mi cuerpo. ¿Qué verá? ¿Una chica desnuda con pequeños pechos y tan delgada como una modelo?¿Tal vez ve el milagro del cuerpo humano? ¿Un trozo de carne? 

Apoyo mis manos sobre el pecho de Ramsey y lo empujo para que se tumbe. Él hace lo que pido y me coloco a horcajadas sobre él. Me llevo una mano al pelo para ponerlo detrás de mis orejas, pero Ramsey la toma rápidamente y la pone frente a su cara. 

- ¿Por qué estás temblando?- pregunta preocupado. 

- Porque- comienzo a decir. Mis palabras mueren y me tengo que aclarar la garganta de nuevo-. Porque es mi primera vez.