3. Suerte

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Capítulo 3: Suerte

Viernes 31 de octubre Halloween

Columbus, Ohio

Había llegado la noche en que su plan se iba a cometer. Estaban en el coche mientras Cooper se dirigía en dirección al club en el que Kurt Hummel estaría esa noche.

-¿Cómo sabes que estará hoy ahí?- Le preguntó curioso a Blaine sin quitar los ojos de la carretera. No conocía muy bien las calles y no tenían tiempo para perderse.

-Si te soy sincero, no ha sido muy difícil, después de tanto investigar y de navegar por internet visitando los últimos cotilleos, me he topado con un Tuit de una tal Brittany que decía que esta noche iban a un club en el que hacían una fiesta especial para Halloween- Contestó Blaine sin darle importancia -Ha sido pura casualidad.

-Pues casualidad o no, hemos tenido suerte, la suerte nos sonríe- dijo satisfecho.

-Supongo que sí... No aparques delante Coop, ve a la parte de atrás, esos gorilas que hay en la puerta no me gustan nada- Dijo Blaine observándolos desde el coche. –Detrás hay un punto muerto de las cámaras.

-Como digas hermanito, hoy mandas tú.- Le dedicó una sonrisa antes de aparcar justo dónde su hermano le había dicho.- Parece que va a llover, mira como está el cielo. Solo faltaba eso. ¡No robes mi suerte!- Dijo Cooper hablándole al cielo. Gesto que a Blaine le hizo gracia.

-Mira a esos dos acaramelados- Blaine observaba a una pareja que estaba apoyada en un muro que pertenecía al club. Los miró detenidamente, parecían los típicos niños ricos vestidos con ropa elegante comprada por papá y que luego se gastaban el dinero en salir de fiesta cada noche. -¿Tú eras así con Arleen?

-Lo sigo siendo, hay que mantener encendida la llama...- dijo haciendo gestos con los dedos. En ese momento vio salir a alguien por la puerta trasera- ¿Ese no es Hummel?- preguntó extrañado. Blaine miró entrecerrando los ojos y asintió sorprendido -Te lo repito, la suerte nos sonríe esta noche.

-Sigue habiendo unos tortolitos cerca de él Coop, no cantes victoria- en ese momento cayeron unas cuantas gotitas sobre el cristal del coche- ¡Mierda, se nos va a escapar por culpa de la lluvia!- Vio como la parejita se adentraba en el local a toda prisa, pero que Hummel se acomodaba en una de las paredes bajo un toldo.

-Blaine... la suerte, es la suerte, alguien nos quiere allí arriba. Es ahora o nunca- Cooper se estaba poniendo nervioso- Está empezando a llover más fuerte... Ahora Blaine, sal ya.- le decía mientras le daba empujoncitos.

Blaine no estaba convencido de que saliera bien. Todo este plan estaba siendo ejecutado demasiado de prisa, sin tener en cuenta los contratiempos y dejando el resultado a la muy querida por su hermano, la suerte. Salió del coche un poco agachado y con el corazón acelerado. Rodeó el muro por el lado izquierdo, el sonido de la lluvia camuflaba el ruido de sus pisadas. Tenía a Hummel de espaldas a él. Decidió saltar el muro lo más silencioso posible de un solo saltito y se acercó lentamente al chico hasta quedar pegado a su cuerpo.

De golpe escuchó la puerta delantera abrirse y el miedo se apoderó de él. Instintivamente decidió taparle la boca a Hummel por si se le ocurría decir una palabra. Le colocó el cañón de la pistola en el lado derecho de sus costillas en modo de advertencia. Blaine estaba asustado ¿Y si lo veían? En ese momento fue cuando empezó a pensar que era un mal plan. Deberían haberse quedado como estaban y no intentar secuestrar a nadie. Ellos no hacían esas cosas, ellos robaban bancos y eso se les daba bien. Robando el dinero no hacían daño a nadie, bueno, no directamente. Secuestrando a Hummel ya estaban involucrando a una tercera persona, y eso no estaba bien ¿Por qué complicarse y arriesgarse tanto?

Aquí, ahora, contigo (Klaine) PAUSADA POR "ADIAD"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora