Querido diario (•terminada•)

Capítulo 10

Fecha: 25 de agosto

¡Es mi cumpleaños!

Estuve hablando con Tania durante el día. Habíamos quedado en vernos en el parque, frente al árbol más grande.

Llegó la hora. Estaba arreglandome. Estaba bonita, o eso creí.

Llegué al parque.
_________________________________
Mensaje de texto para Tania
-Recién llegué al parque, ¿estás frente al árbol?
_________________________________

Minutos después recibí respuesta. Estaba allí.

Llegué, no vi a nadie. Tal vez se equivocó de árbol.

Alguien se acerca, y desde atrás cubre mis ojos. No veía nada, sólo escuché su voz.

-Feliz cumpleaños, Dawson. -dijo mientras sonreía

Me giré. No era Tania... era él, Mirada de Café.

-Espera, ¿que haces aquí? Mi amiga, ¿donde está? -le dije algo dudosa
-Tranquila, te reunirás con ella luego.-dice mientras coloca una de sus manos en mi rostro

Se acercó un poco a mi. Sin notarlo, estaba a centímetros de sus tiernos y carnosos labios.

-Muchas gracias, Tomas. -susurré con una pequeña sonrisa

Pensaba seguir el juego, la corriente. Sí, pensaba. Me alejé antes de que sucediera aquello. Tal vez lo anhelaba, pero, no lo conozco. Igual, no me molestaría besar a éste desconocido.

-Traje un detalle para ti. Ojalá te guste. -guiñó un ojo

Me entrega varias cosas. Un ramo de rosas de color sangre fresca, una caja de chocolates (mis favoritos), y... espera, ¿un vestido rojo?

-¿Y esto, Tomas? -dije con toda la alegría del mundo
-Te lo pondrás para nuestra cita. -dijo junto a una sonrisa
-¿Cita? -guiñé un ojo
-Sí, mañana. -sonrió

Justo en ese momento sentí que iba a estallar de felicidad. Por primera vez alguien se había dedicado el tiempo de hacerme sentir bien, única, hermosa aunque tal vez no lo sea. De todos modos, es muy bueno como para ser cierto, ¿no?

Vi que nuestros amigos de la escuela iban acercándose.

Rápido tomé su mano, y busqué una pluma en mi pequeño bolso.

-¿Que estás haciendo? -dijo riendo
-Calmate.

Anoté mi número ahí. Luego que acabé, me sonrió.

Ojalá me escriba pronto...