Todo iba excelente, hasta que el teléfono de la casa sonó ¿Quién demonios llamaría a estas horas de la madrugada?, Zayn no se despego de mis labios y sus tres dedos seguían en lo suyo, hasta que la contestadora recibió un mensaje
“Malik, soy Arturo Di Stefano, caí en la clínica por que me fui al extremo con las copas—río desganado— necesito que me vengas a buscar, no tengo a nadie más, tu eres mi mano derecha, adiós”, Zayn abrió sus ojos de golpe y se separo de mi, el estaba muy confundido, no dijo nada y comenzó a vestirse.
Tu: ¿A dónde vas? —preguntaste incrédula
Zayn: Y-yo…—sus tartamudeos nuevamente salieron— tengo que irme, Arturo es mi patrón y no lo puedo defraudar-tomo su blusa, y en su mano derecha sus zapatos, te observo con ternura antes de dejar la habitación y se marcho.
Narra Zayn.
Las llaves de mi auto se encontraban sobre el sofá, las tome y salí afuera por mi auto plomo, presione el acelerador y salí de vuelo, estaba muy acelerado, me sentía jodidamente confundido, casi hago que ___ sea mía, nose si esto me asustaba o realmente me ponía contento..
¡Demonios!, golpee el volante molesto, pero no dejaba de observar la carretera, todo de ella era tan delicioso, cuando se corrió en mi boca fue como estar en el verdadero paraíso, pero ¿Qué haría ahora? Después de todo, ella seguía siendo mi sobrina..
Zayn: —se acerco al mesón blanco de la clínica— disculpe señorita, ¿Arturo di Stefano en que habitación se encuentra?
Secretaria: espéreme un momento—le guiño el ojo coqueta y giro su vista hacia su computadora— Arturo Di Stefano.. se encuentra en la 22, pero lamento informarle que usted no puede entrar .
Zayn: gracias—fingió una sonrisa y se fue al pabellón 22 ignorando a la chica.
Llegue a la habitación, habían cientos de médicos hay dentro, Arturo tenia un extraño cáncer al estomago y el tenia prohibido beber alcohol, y como veía esto estaba mucho peor de lo que parecía, me senté en el suelo a esperar los resultados del doctor, era lo mejor que podía hacer.
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10:00 de la mañana, me di una ducha y me puse una polera blanca en la que ponia "young" unos pantalones color negro mis converse i mi gorra OBEY...
Zayn aún no llegaba, lo intente llamar al celular pero por mala suerte su celular lo había dejado aquí, me prepare unos hot cakes, me serví jugo de durazno y me senté al sofá viendo la televisión. Cada segundo que pasaba tenia a Zayn pegado en mi cabeza, no podía quitar de mi cabeza lo que sucedió anoche, su labios, sus manos, su cuerpo.. Todo del era perfecto. De pronto sentí como se abrió la puerta y deje caer el vaso al suelo, era Zayn, el solo río y se acerco a mi.
Zayn: que despistada estas-beso tu frente y comenzó a recoger los vidrios del vaso quebrado—
Tu: perdón. —Zayn se quejó— ¿que sucede? —se levanto con su dedo ensangrentado— oh ¿te duele?
Zayn: si—dejo los vidrios a un lado, se apoyo en la mesa y se metió su dedo a la boca— todo es tu culpa—alzo una dulce sonrisa y tu te acercaste a el coquetamente—
Tu: lo siento mucho Zayn—tomaste su dedo y lo pusiste dentro de tu cavidad bucal a lo que Zayn se estremeció.
