3.-Encerrados.

3.5K 268 46
                                    

Sucrette.

Miré a la puerta del instituto esperando ver a Nathaniel, pero no sucedió, él aún no salía, al único que veía acercarse a mi era a ¿Castiel?..Si... ese es su nombre..o bueno eso me dijo Rosalya.

Regresé mi mirada a él, mi mirada  se cruzo con la suya, fría y sin sentimiento alguno, pase saliva con dificultad y aparte mi mirada de él. Nathaniel no se lleva con él... Aunque que Nathaniel no se llevé con él, no significa que yo no deba llevarme con él, y más cuando lleva una de las camisetas de uno de mis grupos favoritos.

---Qué miras, ¿Quieres una foto o un autógrafo?---Dijo a la vez que una sonrisa burlona surcaba sus labios, pero eso no era todo, él se encontraba demasiado cerca de mi.

---Alejate.---Fue lo único que pude decir.

---Acaso te incómodo.---No se movió ni un maldito centímetro y su fresco aliento chocó contra mi rostro el cual ya sentía caliente, opte por retroceder un par de pasos yo, ya que si Nathaniel nos encontraba así, seguramente  malinterpretaria las cosas, lo miré nuevamente y logré ver que me recorría de pies a cabeza con la mirada.---Al parecer él que quiere una foto eres tú.---

---No. La pared es suficiente para recordarte..--Sonrió burlón, acaso me dijo.. Plana.

---¿Qué..?---Escapó de mis labios al verlo reír seguramente por la expresión que debo tener en este momento.

---Si. Lo que oíste eres una tabla de planchar.---Y yo que quería llevarme bien con él, me dio un golpecito en el hombro sin dejar de sonreír.---No te enojes. Me caes bien Sucrette.---Una leve sonrisa escapo de mis labios, mire la puerta de entrada y vi como Nathaniel se acercaba con pasos rápidos, cuando estuvo a sólo unos pasos de nosotros logré ver que su ceño se encontraba fruncido, miré mi hombro derecho y encontré la mano de Castiel todavía ahí, la quite con un moviento rápido pero sutil. Castiel se quedó junto a mi si borrar esa expresión socarrona.
.
.
---Alejate de ella.---Dijo Nathaniel con un tono gélido.

Castiel rió con sorna.---Tranquilo delegaducho que no le he hecho nada a tú novia.----

---Más te vale que siga siendo así.---Dijo frío, Castiel sonrió maliciosamente, se dio media vuelta y se fue, Nathaniel miró a Sucrette.---¿¡Qué hacías con él!?---

La castaña frunció el ceño.---No me grites. Puedes ser mi novio y todo pero no tienes el derecho a gritarme y peor si no te he fallado.---Espetó colocando sus manos a cada lado de sus caderas, el rubio suspiro pausadamente, le tomó la mano.---Lo siento. Me exalte. porque me puse celoso.---Le colocó una mano en la cintura.---Te quiero y no quiero perderte.---

---Yo también te quiero, por ello quiero que confíes en mi como yo confío en ti.---Dijo, le rodeo el cuello con los brazos y lo beso, Nathaniel le correspondió, poco después separaron sus labios, pero permanecieron en la misma posición.---Yo confío en ti, en quien no confío es en él.---Le dijo a la vez que le acariciaba el cabello.

---No se llevan bien verdad..---Él asintió y la abrazo, poco después se separaron.

---Vamos te acompaño a casa.---Ella asintió, se separó de él, entrelazaron los dedos de sus manos y comenzaron a caminar hacía la casa de la castaña, al llegar a despidieron con un beso y ella entro a su casa.
.
.
.
Los días siguientes Sucrette casi no hablaba con Castiel, aunque lo poco que había hablado con él se había dado cuenta de que tenían varias cosas en común.
.
.

Habian pasado dos meses desde que Sucrette ingreso al Sweet Amoris. En ese momento la castaña se encontraba recorriendo los oscuros pasillos del Sweet Amoris. Se había olvidado su libro de historia, y al día siguiente tendría una prueba importante, abrió su casillero, y sacó el libro.

---¿Qué haces aquí tabla?---Cuestionó una voz masculina, Sucrette al oír la voz se sobresalto y su libro cayó al piso.

---Tanto miedo te doy.---Dijo socarrón.

--Cre..creí que estaba sola.---Cerró su casillero, se dio la vuelta, se agachó, tomó su libro y se puso de pie.

---Mm..Rosa.---Dijo divertido. Ella se sonrojo ya que era obvio que se refería al color de su ropa interior. El pelirrojo río.---Pareces tomate.---Dijo burlón.

---Cállate.---Susurró apenada y apego su libro a su pecho.

---¿Dónde esta el idiota?---Sucrette fruncio el ceño y comenzó a caminar, Castiel la tomó del brazo.--Bien. ¿Dónde esta tú Nath?---Preguntó burlón.

---En su casa.---Respondió, se soltó y comenzó a caminar hacía la entrada del Instituto, él comenzó a caminar a su lado por el extenso pasillo, al llegar al inicio del mismo, Sucrette colocó su mano derecha en la puerta e intentó abrirla, pero no lo logró ya que estaba cerrada.

---Castiel. No es gracioso.---

---Yo no he hecho nada.---Dijo serio, y al igual que ella intentó abrir la puerta, pero tampoco lo consiguió.---Estamos encerrados.¿Tienes tú celular?---

----No---Respondió la castaña.

---Entonces no podremos salir hasta mañana.---(Es la oportunidad perfecta..para comenzar con mi venganza)---Pensó tranquilo mientras veía como la castaña trataba nuevamente de abrir la puerta mientras maldecia por lo bajo.---Es inútil.---

---Como la existencia de Ámber.---Sucrette rió a la vez que dejaba de empujar la puerta.---¿Qué hacemos?---Él sonrió de una forma maliciosa a la vez que comenzaba a acercarse a ella, estaba a sólo unos centímetros de besarla.---Vamos a un aula.---Dijo, se separó de ella y comenzó a caminar por el pasillo, Sucrette parpadeo confusa y comenzó a seguirlo.
.
.
.

☆☆☆☆Continuará.☆☆☆☆

CastielxSucrette-Dulce Venganza.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora