Guerra de Niñeros

Capítulo 24. Ya no estoy loca

—¿Tú otra vez?—pregunté incrédula.—¿Nunca te das por vencida Swift?

—Tranquila Cora, no estoy aquí por Harry gatito vio...digo, por Harry—lo señaló y él se veía sumamente aterrado—Como ya sabrán estoy saliendo con Tom—sonrió.

—¿Tom?—pregunté con el ceño fruncido—Pensé que salías con Calvin.

—Terminamos hace un par de semanas, ¿qué acaso no ven noticias?—preguntó obvia.

—Vaya Taylor, eres más rápida que Calum cuando lo persiguió Toro el año pasado—dijo Harry en tono de broma.

—Como sea—sonrió moviendo su melena—Harry ya no me interesa en lo absoluto, están en el olvido todos mis sentimientos hacia él. Aprendí que no eres la gran cosa cariño y que hay más peces en el océano, más grandes y más lindos.

—Ouch—murmuró él en lo bajo.

—¿Entonces qué haces aquí?—preguntó Zayn. Taylor lo miró y él se encogió en su asiento—Señorita.

—¿Siguen teniéndome miedo?—preguntó haciendo puchero—Descuiden, ya dejé a un lado mi etapa de ex novia psicópata loca desquiciada—dijo haciendo un ademán de manos—Espero que todos los rencores queden en el pasado—volvió a sonreír.

—Es difícil hacerlo cuando una vez me perseguiste hasta el hospital—dije sentándome entre medio de Louis y Niall.

—O cuando una vez desperté y estabas a mi lado tomándome fotografías—dijo Harry.

—O cuando te metiste en nuestro bus—apuntó Zayn.

—Para tomarme fotos—se señaló Harry.

—O aquella vez que nos amenazaste que...

—Esta bien, lo entiendo, era una loca, pero ya cambié—interrumpió a Liam—Y para demostrarlo—tomó su bolso que descansaba en la mesa que había a su lado y lo abrió.

—Si llegas a sacar un arma de ahí juro que te lanzaré a Louis—le advertí y el castaño me miró ofendido.

—¿Porque mejor no lanzas a Niall?—preguntó indignado.

—Porque tú eres mucho más pequeño y liviano.

—Chicos, chicos—nos llamó la atención Taylor—Ya les dije que no estoy loca—rió mientras sacaba un panfleto de su bolso—Miren—nos lo entregó—Como ven, gracias a que me he rehabilitado, creé un campamento para jóvenes y adultos. Las recaudaciones van hacia una organización de personas dementes como yo...digo, como mi otra yo, y eso los ayuda a rehabilitarse—sonrió con orgullo.

—Vaya Taylor, eso es muy amable de tu parte—dijo Liam examinando el panfleto.

—Gracias, estoy intentando hacer cosas buenas de todos las cosas malas que hice en mi pasado.

—Entonces tienes mucho que hacer—murmuró Harry y yo le di un codazo.

—Harry—lo regañé—No seas grosero.

—No te preocupes Cora, tiene razón—dijo Taylor con una media sonrisa—Hice cosas muy malas en mi pasado, pero estoy muy contenta de poder remediarlas.

—¿Sabes Taylor? Te creo—le sonreí—Creo que si cambiaste, y me alegra mucho que lo hayas echo. Eres muy diferente a como eras antes, ya ni siquiera me asustas—ella sonrió ampliamente—Excepto cuando haces eso, eso asusta—señalé su sonrisa.

—Lo siento, todavía tengo que controlar eso—se disculpó.—Entonces chicos, ¿qué dicen? ¿Me perdonan?

Los cinco se miraron no muy convencidos.