Capítulo 47. Evan Wilson

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—¿Ya llegamos?—preguntó Luke.

—No—dije mirando por el retrovisor para ver la rubio.

—¿Y ahora?—cuestionó Niall.

—Tampoco—respondí—A la izquierda por favor—pedí al taxista.

—¿Qué tal ahora?—volvió a preguntar Luke.

—Todavía—dije con la mayor calma posible.

—Yyyyy...¿ahora?—Niall asomó su cabeza al asiento delantero donde yo estaba sentada junto al taxista.

—Dime Niall, ¿acaso parece que hemos llegado?—pregunté con paciencia.

—No—dijo.

—Entonces—me giré para verlo con una sonrisa—¡no preguntes más!—exclamé cerrando la ventanilla que divide los asientos del piloto y el Co-piloto con los traseros.—Espero que no le moleste—dije al taxista refiriéndome a la ventana.

—¿Bromeas? Yo estaba a punto de frenar para ver si tenía suerte de noquearlos—dijo el hombre y yo reí.

—No tengo problema de que lo haga ahora—me encogí de hombros.

Ahora mismo estamos en un taxi de camino hacia mi vieja casa, si es que debería de llamarla así. Como somos bastantes y un animal tuvimos que dividirnos en 4 taxis. Martín tiene uno para el solo, Michael, Ashton, Liam y Harry, en uno, Calum, Louis, Freddie y Zayn en otro y por último, Niall, Luke y yo en otro. La razón por la cual quise viajar con ellos dos es porque pensé que iban a ser más tranquilos y menos bocones pero ¡sorpresa! Son más molestos que la señora Iacopetti el día de san Valentín. El porque de esa comparación no viene al caso, solo les digo que nunca visiten a una pobre viuda en desgracia un día de amor y amistad, no se lo merece.

Sentí como mi celular comenzaba a vibrar y lo saqué de mi bolso. Cuando vi el nombre que decía la pantalla rodé los ojos.

Era Niall.

—¿Qué?—pregunté de mala gana.

—¿Ya llegamos?—preguntaron Niall y Luke al unísono.

Miré hacia la parte trasera donde ambos estaban pegados para escuchar mi respuesta.

—Si idiotas, ya llegamos—respondí viendo como el taxi iba disminuyendo la velocidad frente a la entrada de mi hogar.

Mi antiguo hogar.

—Gracias—agradecí al taxista dándole el dinero que debía de pagarle.

—Es gratis si me consigues un autógrafo de ellos dos—me dijo señalando a Luke y a Niall—Tengo dos hijas—añadió y yo asentí comprensiva.

—No se preocupe, siempre estoy preparada—dije abriendo mi bolso y saqué un papel para entregárselo al hombre—Tengo millones de autógrafos, así consigo muchas cosas ¿sabe?—sonreí y él me devolvió la sonrisa.

—Eres astuta.

—No tienes ni idea.

—¡No vuelvo a viajar contigo en un taxi!—escuché gritar a Harry. Me giré y vi cómo Ashton, Liam, Hazz y hasta el propio taxista estaban tosiendo hasta más no poder.

—Cuando un hombre tiene que dejarlo escapar, tiene que dejarlo escapar—se encogió de hombros y siguió caminando con soberbia.

—Siento que no veo—se quejó Liam achinando los ojos y extendiendo sus brazos.

—¡Luke! ¡Mi bomba anti-Mikey!—exclamó Ashton al rubio quien rápidamente fue hasta la maleta del castaño para sacar un aparato que parecía una bomba de asma.

Guerra de NiñerosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora