[ Vhope ] Ser Libre

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No es que lo hubiera planeado. ¿O sí?

Taehyung no sabía, en todo caso ¿por qué siguió a fueras sino esperaba a nadie?

Tal vez porque muy dentro de él, la esperanza de hablar con Hoseok lo hacía quedarse.

Al escuchar la despedida de Nam hacia Hoseok, Taehyung guardó su móvil en su bolsillo trasero para después arreglarse su cabellera, tal vez, suponiendo que estaría enmarañada por el viento.

Solo por eso, y no porque quería verse bien para el otro.

–Hola. – saludó Hoseok a Taehyung, por primera vez cogiéndole de frente su mano.

Con una Taehyung sorprendido y sonrojado, Hoseok no aguantó hacer eso debido a la preocupación que tuvo todo el día acerca de cómo le fue al menor. – ¿Qué tal? – preguntó, observando esos ojos inexpresivos ante todos pero menos con él.

–Bien. – soltó el menor, agachando la cabeza para airearse por sí solo. Soplando su rostro.

En verdad estaba que enrojecía, ahora no sabía que explicaciones daría ante eso.

–Vamos. – le codeó Hoseok con el brazo que le sostenía la mano. Sonriéndole, dándose a notar con su tono de voz. – ¿En serio no tienes nada que contarme? – le preguntó, cambiando su voz a uno serio pero preocupante.

–Bueno, no pasó mucho. – comentó ejerciendo cierta presión en su mano, pareciendo entrelazarla y Hoseok lo completó.

Ahora si era verdaderamente vergonzoso y Taehyung sabía que lo había causado. –Vamos. – le indicó, halando de sus manos entrelazadas, para que empezaran a caminar en dirección a su casa.

Dentro de Hoseok había una batalla entre sonreír por el hecho de que iban caminando con las manos entrelazadas o porque aún no sabía sobre el estado del menor y cuál era su pronóstico.

– ¡Entonces podrás ver! – dijo Hoseok efusivo, parando su caminar y posarse delante del menor. Haciendo que chocasen.

Todo ocurrió gracias a que Taehyung le contó los pormenores de su cita con el médico y las posibilidades de que habría una oportunidad para él.

Pero había algo y era la reacción de Hoseok el cuál hizo a Taehyung sonreír con tristeza.

Encerrándose en sus propios pensamientos de que la gente lo aceptaba solo por... caridad.

Y eso era lo que temía.

No le dijo nada a Hoseok, solo apartó delicadamente su mano de la del otro ara llevarla dentro de su bolsillo pues; si bien tenía justo en ese momento un bajón de ánimo, aún quería conservar el calor que la mano de Hoseok le brindaba. Aunque sea por unos minutos más.