Capítulo 1

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Sábado 20 de agosto del año 2040.

Era una fría mañana en New York cuando Serena despertó como casi todos los días desde que su esposo había muerto, con el corazón acelerado y la frente juagada en sudor.

Hacía más de seis meses que estaba yendo a terapia con una de las mejores amigas de su difunto esposo para superarlo pero aún no podía. Asistía a las consultas dos veces por semana con la doctora Amy Mizuno en el Montefiore Medical Center, (lugar en el que había trabajado su marido como cardiólogo cuando vivía) pero no había caso. No importaba cuántos medicamentos tomara ni cuánto lo hablara con su psicóloga, aún no conseguía aceptar su muerte.

La vida al lado de Darien Shields no había sido fácil y si bien era cierto que estaban a punto de separarse antes de que aquel fatídico accidente lo matara, lo amaba. Fue su primer novio y no sólo eso. Había sido su primer y único amor.

En la cama y sin tener una pizca de ganas de levantarse ya que aquella mañana estaba más fría de lo normal, tomó fuerzas y lo hizo. Se levantó para tomar un baño, salir a enfrentar un mundo que era tan duro y lo era mucho más sin él a su lado.

En la mesa y mientras terminaba de preparar el desayuno para ella y para su hija decía por "teléfono"...

— ¡Hola, Helios! Sí, sí, sí, hoy vamos a estar aquí. ¿Cómo que quiénes? Pues Rini y yo, genio. ¿De quién más podría estar hablando? Claro que sí. Ven que aquí puedes almorzar. No digas eso Helios que no es molestia y recuerda que no es de gratis.

Sonrió mientras hablaba por "teléfono" y miró a Rini que sonreía igual que ella.

—Tú me ayudas a pasar el año y yo te pago la mensualidad. Míralo como un trabajo. ¿Lo de almuerzo? Es como un pago adicional por venir hasta aquí a explicarme ese maldito taller de cálculo que me va a dejar más bruta de lo que ya soy. Mira que yo sé que vives muy lejos y es lo mínimo que podría hacer por ti. Sí, sí, sí, Helios. Ya no me digas más y mejor mueve el trasero. Nos vemos más tarde entonces. Chao.

Helios Jones era compañero de clases de Serena y se había convertido en un muy buen amigo suyo. Siendo diez años menor que Serena, alto, delgado, de ojos color miel y cabello rubio siendo más bien plateado, era un muchacho de veinticuatro años que estaba como ella, tratando de sacar sus estudios adelante con la esperanza de con eso poder ingresar a la universidad.

La psicóloga le había recomendado a Serena, a manera de terapia, retomar proyectos que había dejado inconclusos. Uno de muchos había sido ése, terminar la secundaria, porque cuando quedó embarazada de Rini no había podido seguir estudiando.

Al principio Serena estaba renuente a hacerlo pero lo hizo porque su hija le insistió mucho para que lo hiciera. Y ni que hablar de sus amigas. Mina y Lita habían ayudado mucho también a que se decidiera a retomar sus estudios.

Como era de esperarse, a Serena no le iba muy bien en las clases. Ella, con treinta y cuatro años de edad, era una de las estudiantes más viejas del curso. Se sentía inútil, fuera de lugar y un día en el que había sido especialmente difícil para ella, iba a retirarse pero se arrepintió cuando Helios, que estaba sentado a su lado y se daba cuenta de su incomodidad, le dijo que la entendía y que si no comprendía algo de lo que el profesor les estaba explicando, él con mucho gusto le ayudaría. Que él podía explicarle y ayudarle con lo que no entendiera.

Gracias a Helios, Serena no se retiró del instituto en donde estaba cursando los dos últimos años que le hacían falta para ser bachiller y cada vez se sentía más cómoda en clase. Él, era muy amable, muy decente y a ella le caía bien por eso. Le tenía cariño, y era tanto que lo veía como a su hermano menor. Verlo le recordaba al hermano que había perdido hacía ya muchos años y le gustaba pensar que lo estaba ayudando de alguna manera. Pues Helios era muy inteligente, atractivo y buena persona pero él no era como Serena o como Rini. Helios no contaba con una buena posición social. Era muy pobre y vivía en lo más profundo de los suburbios de la ciudad.

Un robot enamorado...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora