Capitulo 2

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Alfonso recibió aquel texto y se tumbó en la cama. Pensaba tantas cosas, se encontraba nervioso.
Hace ya mucho que no veía a las chicas, con la que mantenía contacto era con Maite y sin embargo hace ya varios meses que no sabía de ella.
¿Reaccionarían bien al verlo? También habían pasado unos años desde su último encuentro con Dulce, no había sido tan incomodo como lo espero, pero tampoco tan natural como eran las cosas antes.
Luego venía la parte que tenía que reconocer era la que más lo asustaba...Ella.
Tenia tanto tiempo sin verla, las cosas entre ellos estaban tan rotas en todos los sentidos.
Solo recordar el día en que cada quien tomó su camino les dolía. Pero no olvidaban ni el más mínimo detalle.
El cansancio de cada uno por su trabajo, la frustración de estar juntos pero tener que mantenerlo en silencio, las agendas que impedían tantos encuentros, un día cualquiera los llevo de la más mínima discusión a la más grande. Por orgullo se alejaron y para la mala suerte de Alfonso, Manuel estuvo ahí para ser su pañuelo de lagrimas. Las acciones de parte de los dos los lastimaba cada vez más creando tantas heridas.
Cuantas cosas sentiría al verla, había tanto dolor de por medio, pero al mismo tiempo tanta confusión.

En su casa Anahi también estaba invadida de pensamientos y preguntas.
Si Christian había decidido hacer la reunión es por qué todos estaban libres ¿O no?. Quizás él no se presente, no sería la primaria vez que faltara a algo relacionado con ellos. ¿Por qué sería distinto? Aunque conocía a su amigo, Christian sería capaz de hacer lo imposible por conseguir lo que quiere, si quisiera que Alfonso estuviera en esa reunión, lo lograría.
¿La odiara? Sumando todos sus problemas de separación, el hecho de que fuera Manuel con quien ella estuviera era lo peor del caso, nada sacaba más de quicio a Alfonso que un político. Siempre había despreciado la política y nadie sacaba de su mente que su país se regía por puros corruptos, entonces, ¿que la mujer de su vida se casara con una de esas personas, como no lo destrozaría? .

Pasaron 2 días de vida cotidiana para los RBD, y llegó el tan esperado sábado.
Alfonso grababa parte de una nueva temporada de Sense 8.
Anahi se encontraba metida en el estudio con su equipo preparando algunas cosas.
Christian se encontraba arreglando todo para la noche y cumpliendo algunos compromisos.
Maite llegaba a México luego de un exitoso viaje.
Dulce pasó el día con su madre dando un paseo.
Y Christopher grababa escenas para una nueva película.

Las horas pasaban hasta que se hicieron las 7:30.

Anahi concentrada en su celular, en el sofá de su casa hasta que noto la hora y empezó a arreglarse.
Después de 30 minutos, sonó el timbre.
Corrió a abrir para encontrarse con Guillermo.
Guillermo: ¿Lista?
Anahi: No sé qué ponerme. -Corrió de nuevo a su habitación.
Guillermo: -Soltó un largo suspiro- Que no sean 2 horas any, por favor.
Anahi: Calmate -Gritó.
Después de unos minutos...
Guillermo: Anahi, ¡Son las 8:30!.
Anahi: -Apareció rápidamente- Ya estoy lista, vamos. -Salieron rápidamente para entrar al coche y emprender el camino hacia la casa de Christian.

Anahi: Llegamos -Dijo mientras aparcaba el coche.
Guillermo: Ya todos deben estar aquí -Observó los demás autos.
Anahi: Si...
Guillermo: No deberías de estar tan nerviosa. -Comentó mirándola.
Anahi: ¿Ner..nerviosa? ¿Por qué o qué?
Guillermo: -Sonrío de lado- solo deja de estarlo, todo saldrá bien. -Bajo del coche.
Anahi sonrió.
Bajo también y al tocar la puerta, se encontró con su mejor amigo.
Christian: ¡Flaca! -Abrio los brazos y Anahi se abalanzó sobre el para fundirse en un abrazo.
Anahi: Te extrañaba.
Christian: ¡Y yo a ti!.  ¡Guille! -Saludo a Guillermo también.- Vengan. -Camino hacia el jardín seguido por Anahi y Guillermo.
Dulce: ¡Campana! -Se acercó hacia Anahi.
Anahi: ¡María! Como te extrañaba -Se abrazaron.
Maite: ¡Mis niñas! -Se unió.
Anahi: Maitita. -Agregó con una sonrisa para luego saludar a Pedro, Luis y Carolina que ya se encontraban ahí.
A los minutos tocaron nuevamente el timbre.
Christian: Vaya una de ustedes, ya les abrí a todos.
Maite: ¡Que anfitrión! -rieron.- Yo no voy.
Dulce: Yo tampoco -Dijo rapido.
Anahi: ¡No se vale!... Me chocan. -Se levanto y fue hacia la entrada.
Puso su mano en la puerta con un poco de miedo, ¿Y si era el? ¿cómo lo saludaría? ¿cómo reaccionaría el al verla?.
Tomo valor y abrió la puerta, encontrándose con Christopher.
Christopher: ¡Hola!
Anahi: ¡Bebe! -Saludo con un beso en la mejilla y lo invito a pasar. Christopher saludo amablemente a todos.

Alfonso se encontraba aparcando su coche en la casa de Christian, había sido de las raras veces en las que se preocupo tanto por su atuendo.
Bajo del coche y se acercó a la entrada para luego tocar la puerta.
Christian: Pensé que no vendrías Güey -Río.
Alfonso: ¿te he defraudado alguna vez?
Christian: Muchas veces, pero no importa, entra. -Ambos rieron y Christian camino adelante. El corazón de Alfonso empezó a acelerarse cada vez mientras se acercaba a la puerta del jardín. Casi antes de cruzarla empezó a escuchar las voces de los presentes.
Paro en seco lo que llamó la atención de Christian.
Christian: ¿Todo bien Poncho? -Volteo para mirarlo.
Alfonso: Si -Hizo un intento de sonrisa lo que terminó pareciendo más una mueca.
Christian: ¿Por qué tan nervioso? Mira, las chavas andan de muy buen humor y Ucker y yo intervenimos si vemos que se vuelve algo incomoda la situación. -El solo asintió- Estoy seguro de que ella no reaccionara mal, tranquilo hombre. -Golpeó su hombro amistosamente.
Alfonso: Ojala.
Christian: Claro que si, ahora, a saludar -Alfonso estaba por decir algo pero de un gran empujón Christian hizo que quedara frente a todos pero de espaldas. Se volteó lentamente y al voltearse alguien llegó directamente hasta sus brazos dándole un gran abrazo.
Maite: ¡Cómo te extrañaba!
Alfonso: Mi Mai hermosa -Sonrío en grande y la rodeó con sus brazos- Te extrañaba mucho, tenía mucho sin verte.
Maite: Ya no te alejes así Poncho -Se separó para mirarlo.
Alfonso: No lo haré Perronita -Le dio un beso en la frente, Maite le había dado mucha confianza, como siempre. Camino hacia los demás, su mirada buscaba a una persona en específico pero no la encontraba.
Pedro,Luis y Carolina: ¡Poncho!
Alfonso: ¡Los chingones están aquí! -Rieron y los saludo a los 3 , luego camino hacia Dulce un poco incomodo.
Dulce: ¿Cómo estas ardilla papa? -Dijo sonriendo lo que hizo que una sonrisa se escapara del rostro de Alfonso.
Alfonso: Ardilla -La abrazo y esta le correspondió.- Tenía tanto tiempo sin verte.-Sonrío. Seguía su búsqueda con la mirada pero aún sin ningún éxito.
Guillermo: ¡Herrera! ¿Cómo estás? -Saludo con un abrazo.
Alfonso: ¡Guiller! Todo bien bro, se te extrañaba. -Le correspondió.
Christian: Bueno, ya que llegó Ponchito...¡La botella de vino!
Alfonso: Ah, es que no han empezado.
Christian: ¡Por esperarte Güey! Así que te toca buscar las botellas en la cocina.
Alfonso: No manches -río- Está bien, la buscare.
Entro a la casa y siguio a la cocina, camino directamente hacia el fondo donde se encontraba la bolsa con las botellas. Las tomo, pero al dar vuelta se dio cuenta que no estaba solo, al otro extremo había alguien más, y ese alguien...Era ella.

Siempre tu (AyA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora