Siempre tu (AyA)

Capitulo 8

Mientras los días pasaban Marichelo se encargó de que su hermana no se enterara de la visita de Alfonso y mucho menos de la plática que habían tenido.
Anahi había pasado los días acompañando a su esposo en actividades de el estado, pero curiosamente se acordaba de Alfonso fácilmente y constantemente, no dejaba de ver sus redes sociales.
Alfonso, no paro de trabajar, de pensar y esperar esa llamada de Marichelo que aún no llegaba.

"Poncho" había quedado con Christian para ir a la misma hora al gimnasio.
Alfonso: Y pues, eso -Dijo bajando las pesas al terminarle de contar lo que había hablado con Marichelo y lo que planeaba con Anahi.
Christian: Poncho, solo quiero pedirte que pienses, apenas pudimos lograr tenerlos en un mismo sitio juntos, no quiero que vuelvan a lastimarse de la manera que lo hicieron. -Respondió secando el sudor de su frente.- Güey, no son chavos. Hay un matrimonio de por medio, no es como antes que llegabas a pedirle perdón y ya todos felices, sabes que pueden afectar muchas cosas, incluyendo tu vida. -Lo miro serio.
Alfonso: ¿Crees que no he pensado en eso? ¡He evaluado la situación miles de veces en mi cabeza! Tengo que hacerlo Bro, ya sé que es tarde pero aunque sea quiero aclarar muchas cosas. Obviamente no hago esto con el fin de arruinar su matrimonio, yo..
Christian: -Interrumpió- ¿Entonces? ¿Cuál es el fin? Llegar y decirle: "Hey Anahi, te amo perdón por todo." ¿Y ya te vas a tu casa? No manches Poncho, sé que no es así.
Alfonso: ¡Pues no se Christian, eso depende de cómo se de todo! Además, mírame a los ojos y dime que Anahi no ha pensado en mí al igual que yo en ella desde que nos vimos. -Lo miro serio.
Christian: No lo sé...
Alfonso: Si lo sabes pero no quieres decírmelo. Yo necesito decirle a Anahi todo lo que pienso.
Christian: No eres la persona más delicada para decir las cosas.
Alfonso: Pues las cosas que hizo tampoco.
Christian: ¡¿Y las que tú hiciste, qué?!
Alfonso: ¡¡Pues por eso tengo que hablar con ella!!
Christian: -Suspiro- Como quieras Poncho.
Alfonso: Ya tengo que irme Chris. -Dijo mirando su reloj y le dio la mano a su amigo.
Christian: Vas -Le correspondió- suerte, llámame cuando cometas tu locura.
Alfonso: ¡No es una locura! -Gritó ya alejándose.

Se marchó a su casa, apenas llego se dio una ducha de la cual salió con rapidez por el sonido de su celular que anunciaba una llamada entrante.
Alfonso miro quien llamaba, Marichelo, su corazón empezó a latir muy rápido tan solo de pensar la razón de su llamada.

Llamada telefónica~
Alfonso: ¡Neni hermosa!
Marichelo: ¡¿Cómo estás Ponchito?! -Saludo animadamente.
Alfonso: Muy bien, ¿Y tú? ¿Jorge, los niños?
Marichelo: Bien bien, Jorge tiene presentación y los niños no paran de preguntar por ti.
Alfonso: ¿Neta? ¡Qué hermosos! Ya pronto hago un espacio para ir a verlos.
Marichelo: ¡Aquí te esperaremos!
Alfonso: Seguro.
Marichelo: Te tengo una noticia.
Alfonso: Ay Dios mío...
Marichelo: Anahi estará aquí mañana, viene por unas cosas de promoción.
Alfonso: ¿Estará sola?
Marichelo: Si no está sola, estará con Guillermo.
Alfonso: Ok ok...
Marichelo: ¿Estás seguro de esto?
Alfonso: La verdad no -Río levemente- Pero voy a hacerlo. Gracias por tu ayuda neni, eres la mejor de todas.
Marichelo: Tranquilo. Poncho, solo por favor recuerda todo lo que hablamos ¿Si?
Alfonso: Nunca lo olvidaría, confía.
Marichelo: Va va...
Alfonso: Entonces te hablo mañana, pase lo que pase.
Marichelo: Eso espero.
Alfonso: ¡Te adoro señorita!
Marichelo: ¡Y yo a ti menso!

Fin de llamada~

Luego de grabaciones Alfonso volvía a su casa, para descansar, mañana sería un largo día.
Dio miles de vueltas en la cama pero no conseguía conciliar el sueño, no paraba de pensar en lo que sucedería mañana, las palabras de Marichelo y de Christian rondaban por su cabeza. ¿Haría bien en ir a verla? Christian tenía razón, no sólo estaba el matrimonio de Anahi de por medio, estaba Diana, la cual era muy importante para el, no quería que se viera afectada... Pero al mismo tiempo, no podía callarse más todo lo que sentía y mucho menos teniendo la oportunidad tan fácil. Alfonso guardaba muchas cosas en su corazón, estaba tan roto por ella, pero también en un momento fue quien lo mantenía vivo y eso no había cambiado del todo.
Después de horas pensando logró dormir a altas horas de la madrugada.