Capítulo 1

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-Saludad a vuestro nuevo compañero de clase.

La mitad de los alumnos resopló. ¿Por qué la profesora aún les hablaba como si fueran niños pequeños? Haría a aquel pobre chico presentarse frente a su clase, decirles por qué se había mudado, si jugaba al fútbol o al baloncesto y quién supiera qué más. El caso era que a pocos por no decir a ninguno de ellos les interesaba lo que aquel muchacho tuviera que contarles. Y él tampoco parecía muy por la labor de querer decirles nada. Para eso estaba la hora del almuerzo. Para hacer amigos. No la primera hora del primer día de clase. Eso era del parvulario.

-Me llamo Paris- dijo el joven-. En verano me mudé a este pueblo por motivos de trabajo de mi padre. Es policía, así que si alguna vez os metéis en algún lío ya sabéis con quién tenéis que hablar.

Sus compañeros se rieron.

DJ se sorprendió al oírle decir eso. No eran muchos los alumnos que empezaban el curso con un chiste.

La profesora indicó a Paris que se colocara en un asiento libre y él eligió una mesa vacía en la fila contigua a la de DJ. Era un muchacho muy bronceado así que tenía que ser de algún estado del sur. Echaría de menos el sol si no se equivocaba. Los días en ese pueblo eran mayormente nublados, aunque rara vez llovía. Eso quitaba toda la diversión de los días lluviosos y de los días soleados.

-Hey- saludó DJ chistándole al chico nuevo mientras la profesora de literatura empezaba a anotar los libros que iban a necesitar aquel curso. Paris se volvió-. Esa ha sido buena.

-Gracias- sonrió-. Llamándote Paris tienes que tener ingenio para que la gente no sea lo que le llame la atención a la gente. Normalmente piensan que es nombre de chica.

-Me llamo DJ.

-¿DJ? ¿Eres DJ en serio?

DJ se reclinó hacia atrás en su silla con cierta satisfacción.

-¿Has oído hablar de mí?

Paris se rió sin hacer mucho ruido para que no les llamaran la atención.

-No. Me refiero a que si eres un DJ de verdad. Pinchadiscos. Y por eso te llaman así.

DJ volvió a su postura inicial con cierta insatisfacción.

-No soy un DJ. Mis iniciales son DJ y cuando empecé el instituto me empecé a hacer llamar así.

-Mola.

Los dos chicos empezaron a tomar apuntes de los libros que estaban escritos en la pizarra cuando la profesora amenazó con borrarlos en dos minutos. DJ vio que Paris tenía un bolígrafo en forma de guitarra. En el mástil estaba la tinta, y el clavijero era la capucha. No pudo evitar pensar en lo incómodo que tenía que ser escribir con eso, pero por otro lado...

-¿Tocas la guitarra?

Paris lo miró como si se estuviera preguntando qué le había llevado a pensar eso, peor luego se fijó en su propia mano izquierda.

-Qué va. El músico es mi hermano pero siempre intenta inculcarme algo musical. Sin éxito. Pero la actitud es lo que cuenta. ¿Tú si tocas?

-En un grupo. De aquí del instituto. Puedo presentártelos durante la hora del almuerzo.

DJ había echado lazo del chico nuevo, pero no iba a acapararlo. Lisa lo tenía claro. Daba igual que formara parte del grupo de música que acabaría tocando en el baile de la graduación, porque ella era la delegada de clase y quién iba a dar el discurso. Para ser popular entre todos los estudiantes de último año debía presentarse a ese chico. Y lo haría.

Nadie va a la bibliotecaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora