7. Torre eiffel

16 9 0
                                    

Frank no tuvo ningún problema con mis vacaciones, solo sería una semana y además no había nadie a quien partir la cara, por ahora, así que decidí ir a visitar la Torre Eiffel.

Me aloje en un hotel cercano porque tenía pensado pasar el día de mi cumple allí, viendo el paisaje, paseando...

Pero para ese día aun quedaban dos, y como se me metió el trabajo en la cabeza hice una pequeña investigación por mi parte. Encontré en la base de datos a un señor no con muy buena pinta, que al día siguiente encontré en un museo, muy entretenido mirando un cuadro antiquísimo si, también tuve que estudiar muchas obras de arte para saber reconocerlas.

De repente las alarmas de seguridad saltaron y todos salieron de allí corriendo, menos el hombre, que seguro hizo saltar las alarmas porque ahora se dirigía a robar el cuadro, no debió de darse cuenta de mi presencia (nadie lo hace, gravísimo error).

Pasé detrás suya y justo cuando metía el cuadro en una enorme bolsa le cogí el brazo retorciéndoselo detrás de la espalda.

- Ssh, no creo que eso sea tuyo, ¿verdad?, pues devuélvelo rapidito.

- Maldita mocosa, ¿como me has encontrado?

- Dale todo el mundo con llamarme mocosa- le apreté mas el brazo y soltó un grito- y no es que seas invisible, la verdad es que a sido muy fácil.

La policía entró y pude ver su cara de sorpresa al encontrarse al hombre atado en el suelo con una nota en la boca:

- Siento haber intentado robar ese valioso cuadro, y haberle llamado mocosa a la increíble chica que me ha detenido.

PD: no intenten buscarla, ya estará muy lejos de aquí.

El ultimo toque se lo di yo, pero lo bueno es que ahora si me relajaría, mi cumple era mañana y tenía un plan estupendo.

Volví al hotel, me duché, cené y me puse a ver la tele, ya estaba cayendome de sueño, cuando oí que llamaban a la puerta, me levanté y la abrí, pero solo había una carta.

La cogí y sentándome otra vez en la cama la empecé a leer:

- Hola pequeña, seguro no te has dado cuenta, pero son las 00:30 de la noche, por lo que acabas de nacer hace diecinueve años, muchas felicidades, y también tengo que felicitarte por el increíble trabajo en el museo, ya se nota que estas madurando y muy rápido. No olvides que te quiero como a una hija, no llevamos mucho tiempo juntos, pero te tengo un cariño especial, por eso te pido que tengas cuidado.

De tu entrenador Frank a mi pequeña Lore, muchos besos y abrazos.

Vale lo admito, lloré un poco mucho, pero es que yo también lo sentía como a mi padre porque desde que los verdaderos me dejaron en el orfanato, nadie me había vuelto a dar esa seguridad en mi misma, y él siempre me ha estado apoyando, a parte de entrenarme para ser cada vez mejor, yo también lo quería.

~~~~~~~~~~~~~~~~

Me desperté con el mejor humor del mundo, algo raro en mi, ya que normalmente me despertaba el maldito reloj que me sacaba de quicio.

Me levanté con toda la calma del mundo, desayune, me volví a duchar (esta vez con también la cabeza) y me preparé, puse:

Un vestido que Frank me envió después de la carta, la verdad es que era precioso, claramente me conocía mejor que nadie, no me gustaba nada extravagante, y así era, era rojo (mi color favorito, como ya habréis descubierto), corto, me llegaba cuatro dedos por encima de la rodilla, de tirantes cruzados a la espalda y vuelo caído, de zapatos opté por unas tiras plateadas de raso.
El pelo lo dejé suelto, como mas me gustaba, y solo apliqué labial rojo para resaltar el color.

Cuando estuve lista me dirigí a mi plan, para llegar solo tuve que cruzar una calle, pero fue muy tranquilo, corría una brisa fresquita, que quedaba perfecta con el calor que hacía.

Ya estaba arriba contemplando las preciosas vistas, que me recordaron tantos momentos...porque un año antes de dejarme en el orfanato mis padres me trajeron aquí, paseamos todo París, y acabamos aquí mirando hacia...todo.

Sin darme cuenta ya se había hecho de noche, y sin planearlo una lágrima corrió por mi mejilla, no sé si por los recuerdos o por ya no tenerlos, cuando una mano me rodeó la cintura, me quedé paralizada sin saber quien podía ser, si alguien que me había descubierto o alguien que no sé porque motivo me conocía.

                         *********************
Holi, siento no haber actualizado, pero aquí ya os dejo otro capítulo y seguiré actualizando seguido.

Besos y gracias a todos😊😘

El PasadizoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora