Capítulo 3

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Algunos estudiantes también se acercan preguntando.

—S-Supongo que...–Río nervioso–Soy famoso–Admito al fin.

—¿Cómo que famoso?–Pregunta aún confundida Sam.

—Sí, soy famoso, el famoso cantante Justin Bieber–Me rasco la nuca–No le deis mucha importancia–Sonrío y al cabo de un rato todo el mundo se disipa menos Sam.

—Explícamelo.–Me pide.

—No puedo, Sam, simplemente eso, soy famoso y ya, no tiene mas–Asiente sonriendo ligeramente aunque se que sigue aún confusa.

—¿Vamos a clase?–Asiento acompañándola por los pasillos.–No eres como todos los famosos.

—¿A sí? ¿Como soy?–Pregunto alzando una ceja.

—Supongo que no eres tan creido, cuando quieres–Río ligeramente asintiendo–No te conozco de mucho, pero tus ojos no engañan y se te ve completamente vacio.–La sonrisa se retira de mi cara–Pero creo que aún es demasiado pronto para preguntarte sobre eso que en un momento te dejó destrozado.

—Gracias por no insistir–Suspiro aliviado y Sam sonríe.

—No es nada–Llegamos a clase y me siento de nuevo en mi sitio, todo el mundo llega un poco después que nosotros, una profesora entra a la sala.

—Buenas tardes, menudo jaleo ha creado afuera, eh Bieber–Sonríe y me rasco la nuca.

—Supongo que son las desventajas de ser famoso–Razono.

—Hablando del tema, hoy, chicos, hablaremos sobre distintas temáticas en videoclips.
Supongo que todos sabéis que depende de su temática pueden presentar unas emociones u otras.–Sonríe explicando–He traido unos videoclips de un famoso cantante donde hay muchos cambios en su manera de hacer videoclips.–Gesticula–Los veremos y luego hablaré un poco mas sobre demás temáticas.

Prepara algo en el ordenador de clase y enseguida una melodia familiar hace que eleve la vista hasta el proyector.

—Anda, ese tio me suena–Digo en cuanto me veo en el videoclip.

—Todos lo veréis claro, un simple ejemplo de amor, inocencia y ternura. Y ahora veremos dos tipos completamente diferentes.–Dice la profesora y todos asentimos.


Me encojo en la silla un poco una vez el videoclip empieza, toda la clase gira su vista hacia mí en varias partes.

También hay partes en las que comienzan a susurrar cosas o a mirarme pervertidamente.

Miro a Sam que mira el videoclip con los ojos abiertos, haciendo que inevitablemente suelte una carcajada.

Decido obviar la mirada de Lissa y de Harry encima mía y tarareo en bajo la canción.

—Bueno, como aquí vemos, el pequeño Bieber ha crecido, su estilo ha cambiado, como vemos perfectamente aquí, erotismo, siguiendo trasmitiendo sentimientos sobre el amor.
Ahora veremos el último videoclip, algo mas...musical, siguiendo guardando su erotismo
pero guardando un buen trabajo de baile detrás.

Vuelta a Canadá | j.bDonde viven las historias. Descúbrelo ahora