-Entonces, ¿Momoi-san se quedará con los mininos? - le cuestionó el peliceleste a su lado.
Se habían quedado a las fueras de su hogar, había notado algo que tristemente le haría no quedarse con uno de los dos mininos. O los dos, pues eran muy apegados entre ellos.
Estaban sentados en los escalones de la entrada, mientras observaban a los gatitos tomar leche que Tetsuya había traído consigo. Ese día el muchacho estaba dispuesto a encontrar a sus felinas luces y lo había logrado, ahora les faltaba un hogar.
Tal vez sólo con Neko-chan, digo con Nekomine. - observó la mirada asustada de ambos gatitos. ¿Los separarían a pesar de todo lo vivido?
Nekogami sin creer retrocedió en su lugar encontrándose con la húmeda nariz de Nigou que siempre había estado sin siquiera ser notado por los gatos. El gatito pelirrojo se aferró a su amado azul confirmando lo que temía.
-Es que, tengo una perrita. - la mirada de Kuroko y el Nekomine lo decía todo. No era el lugar indicado si tenía que separarlos. El muchacho sonrió internamente cual gato, ya que no tenía que desistir ahora en sus futuros actos.
-Tengo que contarte algo que se me ha ocurrido Momoi-san. - la pelirrosa se emocionó ante tales palabras y el ligero cambio en la voz de su amado.
.
Midorima y Takao se habían marchado, por ende también los gatos. El arisco esmeralda aunque lindo les había dejado un arañazo de recuerdo en sus brazos, obviamente no lo echarían de menos.
El asunto era el gatito naranja, el sí que les había alegrado durante su corta estancia.
¿Que harían ahora? Jugar videojuegos, hasta les parecía tedioso.
-Bakagami. - le llamó el moreno, que hincado a su lado le tomo la mano.
-¿Q-Que haces Ahomine? - sintió su rostro arder pues, la escena parecía más una petición de matrimonio.
No podría ser eso, ¿cierto?
-Adoptemos un perro.
-¡Ni loco! - le gritó tratando de soltar su mano. -Prefiero tener abejas mieleras en casa.
Aomine sintió erizar su espalda.
-De acuerdo, me pase.
-Adoptemos un gato. - observó brillar los rubíes que tanto amaba y sabía que había aceptado. -Será como un hijo. - sentenció recordando el cómo se refería Takao a sus mascotas. -Yo seré el papá, obvio y tú...
-¡No lo digas maldito! - se puso de pie, veloz y sonrojado. -¿Donde buscaremos un gato?
-En un refugio, o en la misma calle. - ambos chicos se dirigieron a la puerta. -No debe ser difícil.
Apenas dio un paso fuera del departamento de su novio que paso a tropezarse, Kagami lo sostuvo pues había visto la caja que se encontraba a las afueras de su hogar a tiempo.
-¡Que rayos! - un maullido molesto se escucho. -¿Quien dejo esto aquí? ¿Eso fue un gato? - ahora el maullido fue irónico.
-Kuroko. - le respondió el pelirrojo mientras leía la nota para luego extendersela a su pareja.
-¿Nekomine? ¿Nekogami? - hablo sin entender hasta que al abrir la caja, dos pares de zafiros se mal miraron y dos pares de rubíes se saludaron.
-Creo que fue muy fácil. - sonrió alegre Kagami mientras acariciaba a los dos gatos.
Nekomine sabía que ese tipo no era tan lindo como el que los mimaba, ya haría algo con él.
Si tan sólo supiera que su pelirrojo minino pensaba distinto.
.
.
.
¡Ya debía actualización! Espero les guste este capítulo, no tuvo mucha rima como los anteriores pero era la parte crucial y bueno, ya quería que los AoKaga se juntaran. ♥
¡Nos estamos leyendo! :)
PD. ¿Tienen mascotas? ¿Que travesuras les han hecho? Recuerden que aunque sean perros, hay gatos que así se comportan y también tenemos a Kise doggy x'D pueden inspirarme... ♥
![](https://img.wattpad.com/cover/59820725-288-k616265.jpg)
ESTÁS LEYENDO
"Cuentos de Nekos."
FanfictionUna ocurrencia que ya había iniciado en la página "Aomine le da a Kagami" serán escritos pequeños, la mayoría inspirados en la tiras creadas por "Sorato" :) [ Ranking: #1 "AominexKagami" - 18/05/19. ]