Cuando te encuentre [Joe Jonas y tú]

Capítulo 11: Que sea solo una condición

Capítulo 11: Que sea solo una condición

Mi reloj marcaba las 1:30 de la tarde, ya me estaba desesperando porque se suponía que a las 1 estaría aquí. Le había dejado mensajes, audios y más de 20 llamadas perdidas, pero para variar no lograba comunicarme con ella.

Había pasado casi una semana de la fiesta, no he vuelto a ver a Joe, quizás no hemos coincidido estos días. Me quedé muy preocupada con lo de la estúpida apuesta, todas estas noche me he dormido pensando en eso, espero que lo de hablar con sus alumnos haya funcionado porque la verdad que ganas de hablar con Peyton no me faltan, pero no puedo hacerlo, Joe no quiere que yo intervenga.

Cuando regrese a mi casa el domingo en la noche, llegue con muchas ansias de verlo, esperaba encontrármelo pero no tuve suerte; aunque al entrar a mi departamento me encontré con toda la sala impregnada en su perfume. Me acosté sobre el sofá y abrace la almohada que usó, y olía a él, lo sé, parecía una loca, pero me gustaba. Joe me gustaba.

-___- era su voz, la voz que tanto había deseado escuchar.

Me puse de pie rápidamente, porque de tanto esperar me había sentado sobre las escalinatas de la entrada del edificio -hola- le dije con la más amplia sonrisa que podía tener. A leguas se notaba la felicidad que tenía por verlo.

Se veía perfecto, traía una remera blanca, una campera roja, pantalón de vestir en color camel y zapatos marrones. El cabello negro peinado hacia arriba y apenas se notaba su barba. -¿esperas a alguien?-

-a Peyton- me encogí de hombros -se supone que saldría temprano de la escuela y vendría para aquí, pero aun llega y no me responde- suspire con fastidio.

-oh- musitó -perdóname que te lo diga, pero ella no fue a la escuela - abrí mis ojos en señal de sorpresa -hoy tenia sociología y estuvo ausente-

Comencé a maldecir para mis adentros -porque hace esto- estaba furiosa -no se para que me enojo, si siempre hace lo mismo... ya no debería sorprenderme-

Joe dejo los libros y las cosas que traía sobre uno de los escalones de la entrada, y me tomo de los brazos -hey tranquila- me dijo con voz dulce -no reniegues- en sus labios se dibujó una pequeña sonrisa -dime... ¿te puedo ayudar en algo?-

Inhale y exhale -se supone que nos veríamos para ayudar a mamá a elegir el vestido- dije -¿me ayudarías?- pregunte casi en susurro.

-sí, pero con una condición- respondió, mientras elevaba el dedo índice de su mano derecha.

-¿qué condición?- conteste con otra pregunta -pero que sea solo una- aclare.

-que aceptes una invitación a almorzar- mordí mi labio inferior y asentí.

***

- entonces el próximo 15 de agosto es tu cumpleaños- estábamos conociéndonos un poco más, ya habíamos almorzado así que en cualquier momento nos iríamos a ver el vestido -tienes que festejar Joe-

-supongo, pero creo que más que un festejo yo sería feliz viendo a mis hermanos, los extraño bastante- me conto que tenía 3 hermanos, Kevin el mayor, Nick el tercero y Frankie el más pequeño.

Ellos eran muy unidos, y los extrañaba mucho. Según me dijo, el mayor vivía en New Jersey con su esposa, y hace poco se había enterado que sería tío. Luego estaba Nick que vivía en New York porque había sido aceptado en la escuela de Juilliard. Y Frankie estaba aquí en los Ángeles con los papas de Joe.

Tome su mano -tranquilo Joe, te prometo que algo haremos para que puedas verlos-

-___- oí mencionar mi nombre.

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Buenas noches, como están? Acá les dejo un nuevo capítulo. De quién será la voz que escucho ___?
Muchas gracias por el apoyo. Ahora me estoy durmiendo, pero mañana leeré algunas historias que encontré que me encantan ♥
Qué estén muy bien, y que tengan una muy buena semana.
Un beso enorme.