Abrí los ojos con pesadez. Me costo poder distinguir donde estaba ya que me dolía la cabeza.
-Sam, Sami -dijo una voz.
Intente abrir más los ojos pero fue imposible y me volví a dormir.
...
Sentí un piquete y abrí los ojos de golpe. Todo era blanco, ¿por qué estaba en un hospital?
-Sami... -dijo la voz femenina-. Espera aquí.
La mujer de cabellera rubia de levanto y salió corriendo. Minutos después volvió con un doctor y una enfermera.
-Samantha -dijo el doctor-. ¿Cómo te sientes?
-¿Qué hago aquí? -fue lo único que pude decir.
-¿No lo recuerdas? -negué-. Bien, no te preocupes, ya te pondremos al tanto.Me reviso todo y salio con la enfermera, antes de irse me sonrió. La mujer cerró la puerta y volvió a sentarse donde estaba.
-¿Te duele algo? -preguntó sonriendo.
-Un poco la cabeza... -dije-. Pero, ¿quién eres?
-Soy... -la mujer trago saliva -. Soy tu tía, hermana de... de tu mamá.
-¿Y por qué no esta aquí mi mamá?La mujer no sé porque se levanto llorando y salió de la habitación. Minutos después entro un hombre con ella, la abrazaba y le susurraba al oído.
-Hola Sami -dijo sonriendo.
-¿Y mi mamá?
-Sami... -dijo calmado-. Por favor escuchame hasta el final.
-¿Y mi papá? -pregunte. Y cuando no vi respuesta comencé a entrar en pánico. -¿Y Maggie?
-Sami, mi cielo -dijo acercándose la mujer-. Sufrieron un accidente, ¿lo recuerdas? -negué de nuevo-. Bueno, tus papis... tus... ellos no sobrevivieron.Sentí mi cuerpo flojo, sentía como si tuviera algo encima de mi pecho, me dolía.
-¡¿QUÉ?! -intente ponerme de pie pero el señor me detuvo-. No puede ser cierto, no, no puede ser.
-Sami... -decía la mujer-. Tranquila, por favor escucha.
-¿Y Maggie? -dije dejándome caer en la camilla.
-Ella... ella esta en coma... -dijo la mujer llorando.
-¿Qué? -dije entre sollozos-. Quiero verla... ¡Quiero verla!La mujer asintió y salio de la habitación. Me quede con el señor.
-¿Quién es usted? -pregunté.
-Soy el esposo de tu tía, vendría siendo tu tío -sonrió.
-¿Por qué no los conocía?
-Esa es otra historia que con el tiempo te contare.
-¿Con quién viviré? -dije llorando.
-Con nosotros, no te preocupes de eso ahora, ¿si?Asentí y segundos después entro la mujer con una silla de ruedas y dos enfermeras.
-Vamos Sami -dijo una enfermera. Me quite la sabana y mis piernas no respondían.
-¡¿Por qué no siento mis piernas?!
-Tranquila, están entumidas.Después de minutos en lo que me cargaban y me ponían en la silla de ruedas me sacaron de ahí. La mujer iba empujando la silla y a lado de ella; venia el señor.
Llegamos a una habitación, entramos y lo que vi, no era lo que esperaba. Comencé a llorar, la mujer me acerco a Maggie. Ella estaba dormida y con tubos, que imagen más horrible.
-Maggie... -susurré tomando su mano-. ¡Maggie!
Sollozaba y el señor me abrazo.
-Tienes que ser fuerte, por favor Sami, sé fuerte a esto.
Mi vida no podría haber cambiado más.
N/A
En multimedia deje otra opción de portada, comenten si les gusta o si prefieren la primera.
Yo, estoy indecisa, me gustan ambas, así que decidan :B
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SAMANTHA
RomanceUna vida puede ser tan corta o larga según quien la mire, podrás morir mañana pero si disfrutaste cada minuto, sentirás que viviste siglos. Un romance puede atravesar cualquier cosa, puede ocasionar cualquier locura. El amor lo cura todo, según di...