Thomas Sanderson: uno de los mejores agentes secretos se verá envuelto en la aventura de su vida, al aceptar una misión que le dará la oportunidad de obtener el cargo que tanto desea; pero no será fácil. Todo cambiará cuando se enamore de la chica q...
Habíamos llegado. Estábamos en uno de los puntos más remotos de la tierra. Podrías llegar por diferentes medios, por barco o avioneta, nosotros preferimos sin duda la segunda, ya que a nuestro amigo Chuck la opción de sumar desayuno más barco te daba un total de vomito en la cara de Dylan y Thomas.
Era la primera isla que visitaríamos. Oahu, era la más poblada de todas las islas, está formada por dos volcanes, Waiʻanae y Koʻolau, dos cadenas montañosas a sus costados y en medio de esto se desprendía un gran valle redondo, daba el aspecto de parecer un cráter. Además Oahu contaba con 139 playas. Oahu era bien llamada "sitio de reunión", ya que mezclaba lo mejor de los dos mundos, tanto el urbano como el rural.
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El autobús nos recogió y llegamos hasta el primer punto de reunión del tour que habían contratado la agencia. En cuanto bajamos del vehículo, la ola de calor me golpeo de frente. La guía, ya saben esas tipas que parecen vestir como exploradores salidos de la película de Tarzan, con shorts y playeras cafés, nos entregó un tríptico con diversa información.
Chuck fue el primero en bajar, estaba sumamente emocionado, traía una mochila mas grande que él y se notaba que iba llena de cosas, estaba entusiasmado con aprender surf, en el camino sus pies eran incontrolables debido a las ansias.
—Bien. ¡¿Listos para la aventura chicos?!—gritó feliz mientras alzaba el mapa al sol para poder verlo mejor—. El horario dice que primero visitaremos el volcán en Diamond Head, cruzaremos el valle y después pasaremos el resto del día en Waikiki. ¡¿Alguna duda?!.
—Emm... Chuck si sabes que venimos a investigar ¿no?. Debemos seguirlos—le recalcó Dylan.
—Lo sé—se alzó de hombros sin dejar de sonreír—. Es Por eso que esto—señaló el itinerario—, amigos míos, que es una copia exacta de lo que planean hacer la familia Neeson. Así que hay que apresurarnos porque lo mas seguro es que llegaron antes.
Chuck dio media vuelta y comenzó a marchar muy orgulloso. Era un genio. Dylan y yo nos quedamos asombrados del chico, nosotros ni siquiera pensamos en como íbamos a saber donde estarían y Chuck incluso ya tenía una copia de su itinerario. Me alegraba de que fuera nuestro vigilante.
Llegamos hasta donde iniciaba el recorrido de Diamond Head. Chuck no dejaba de tomar y tomarnos fotos. El inicio de un puente en subida que te internaba en medio de la vegetación. La familia Neeson ya se encontraban ahí, a unos cuantos metros más adelante de nosotros. Empezamos el recorrido y ellos ni siquiera notaron nuestra presencia, pero yo vaya que si notaba su presencia.
Caminar. Detenerse. Tomar agua. Poco a poco se volvía un mártir la travesía. El calor hacia mas denso el aire, haciendo de cada paso mas agotador. Lo único que me hacia seguir adelante era mi mirada exánime en la meta: la cima del volcán cada vez más cerca. Me di cuenta que no era el único al sentir cansancio cuando vi como el entusiasmo de Chuck había sido sepultado por el cansancio. Pero cuando llegamos la recompensa fue grandiosa, una vista de trescientos sesenta grados. El aire se metió fresco entre mis pulmones, las piernas me ardían de tanto caminar, no fue fácil llegar pero la vista valió la pena....
