💕𝑬𝒔𝒑𝒊𝒂𝒏𝒅𝒐 𝑨𝒍 𝑨𝒎𝒐𝒓 ✰︎ೃ °➫ 𝑪𝒐𝒎𝒑𝒍𝒆𝒕𝒂

20. Campamento con los Neeson

Adelaide

Sostenía mi mano, ¿acaso estaba temblando yo o era él?. Me miraba fijamente a los ojos, con sed y ansias de querer confesarme algo. Le costaba respirar, sus ojos estaban muy abiertos aguardando por el momento.

—Tranquilo Thomas. Puedes decirme lo que sea. Siempre estaré ahí contigo.

Una sonrisa nerviosa se le dibujó en el rostro. No importase que tan fuerte se escuchaban los gritos de la gente en el karaoke, le pondría mi máxima atención en cada palabra.

Y tras tomar aire por fin comenzó a hablar:
—Escucha...., yo no quería que esto pasara, no formaba parte de mi plan.....pero...

Sus ojos se tornaron cristalinos como el agua del mar que rompía como música de fondo ante nosotros.

—¡Pero si es nuestra querida niña!—exclamó una voz, miré por encima del hombro de Thomas y me encontré con Yzma. Demonios.

—Mónica—fingí felicidad—. Franck—saludé asintiendo con la cabeza al papá de Bash.

Thomas se volteó para mirarles, en su cara se dibujó un cierto patrón de enojo y agradecimiento extraño de entender.
Era como si maldijera y a la vez bendijera la presencia de ellos que hizo interrumpir su habla.

—Creí que estarías adentro en el Karaoke con tu familia—había algo en el tono de voz de Yzma que me hacía desear golpearla, además era su forma de menospreciar a Thomas con la pura mirada de sus repugnantes ojos.

—No—tuve que aguantar toda la furia de titanes que llevaba dentro—. Estaba paseando con Thomas.

Eso estuvo mal. Pero no me importaba. Las cosas estaban empezando a cambiar.

No me había percatado de que Thomas y Franck estaban en un duelo a muerte de miradas.

—Con Thomas—Yzma abrió los ojos como un zopilote carroñero—. Bueno en ese caso los dejamos.

—No—interrumpió Thomas frunciendo los labios y agachando la cabeza—. En verdad. Me retiro. Adiós Adelaide.

Se despidió de mí soltando mi mano, yo no la solté hasta que estaba lo suficientemente lejos como para seguirla sosteniendo.

Miré toda su andar, veía como se alejaba con su guitarra en la espalda , miré al chico de cabello güero oscuro, contemplé al chico alto y de facciones perfectas, observé a Thomas Sanderson marcharse de mi lado.

¿Cuantas mas veces tendríamos que estar separados?.

—¿Es un buen muchacho?—preguntó Yzma.

Yo estaba aún en el trance que llevaba su nombre, cuando ella me preguntó y no pude evitar contestarle con el corazón:
—Si. Es un buen muchacho—cada palabra sonó separada, dándole matices diferentes al pronunciarla.

—Pequeña mía. No sé como a mi hijo puede gustarle tanta inocencia—sentí la palabra golpearme como un insulto, volteé para mirarla directo a los ojos—. Mira hacia aya—señaló Yzma al lugar donde se llevaba a acabo la noche de karaoke del hotel. Ni siquiera me había dado cuenta de que mis padres estaban cantando—. Velos, tu linda y unida familia. Tus hermanos mayores siempre tan simpáticos—miré a George y Fred aplaudiendo y riendo—. A tu hermano Daniel, todo un profesional—mi hermano tomaba de una margarita pero Henry hizo que casi la escupiera con alguno de sus comentarios—. Tu hermano menor Henry, un verdadero genio, con un gran futuro—mi hermano menor reía tanto que casi se ponía morado—. ¡Y al final lo más importante!—exclamaba Yzma y sentí su mano caer sobre mi hombro—. Los pilares de la familia Neeson. Tu padre Adam y tu madre Catherine—mis padres estaban abrazados, cantando felices—. Un verdadero ejemplo de familia, todos médicos profesionales, unidos, con dinero, estabilidad, pero no todo es eterno, todo podría venirse abajo, sería una lástima que todos pagaran por la falla de alguno de los cachorros.