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Conocía cada ángulo del lugar, sabía que nadie la habria visto siempre y cuando no se sentara sobre la parte izquierda. Desde allí, los padres de su amiga podrían verla desde su habitación.
Lo que más le gustaba era que desde allí podía ver su casa, pues el árbol de encontraba a un lado del jardin del hogar de su mejor amiga. Hoy no había más casa, sólo hierba quemada y algun resto de lo que un día había sido su lugar en el mundo.

Kevin estaciona el auto una antes de llegar, y se dirige a pie, entre las sombras. Escondido se quedó observando la que habria sido la casa de Debra. Desde la acera de enfrente vio los restos de alguna que otra pared y señal de que antes hubo vida en ese lugar. El estómago se le hizo un nudo al sentir el dolor que pudieron sentir esas niñas ante tanta tragedia.
Respiró profundamente para alejar esos pensamientos de su mente y buscó con la mirada algún rastro de la joven, pero sólo notó al mismo auto que pasaba por segunda vez por esa calle. "Al parecer no son tan idiotas como creía" , pensó. A los dos hombres que iban dentro no los conocía, pero sabía que eran policias, podía olerlos desde lejos. Caminó lentamente como si fuera de esos vecinos a los que les gusta pasear en la noche. El auto dobló en la esquina, pero pronto iba a volver, Debra estaba en algún lugar por ahí, bastaba mirar con atención y pensar como lo haría una niña asustada que sólo quiere volver a casa.

Miserere (#Wattys2016)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora