Capítulo 16♡

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》Narra __________《

Acepté su propuesta algo nerviosa. Nunca en mi vida un hombre me ha visto completamente desnuda, a excepción de mi padre.
Le pedí que cerrara los ojos para quitarme la ropa y cuando me la quité toda me metí rápidamente al jacuzzi, tratando de cubrirme con la espuma que se había generado. Tragué saliva y respiré profundo.

-Listo, ya puedes abrir los ojos.

Se dió vuelta lentamente y sonrió al verme toda avergonzada tratando de cubrir mi cuerpo con la espuma. Procedió a quitarse sus prendas partiendo por las que cubrían su abdomen.

Sus marcados abdominales ya los conocía de memoria al igual que sus tatuajes que lo hacían lucir tan guapo, cuando comenzó a bajarse los pantalones desvié la mirada rápidamente mientras sentía que mi cara se ponía ultra roja.

Con veinte años me considero toda una niña chica, soy muy pudorosa y no puedo evitar sentirme incómoda y nerviosa en esta situación.
Sentí como entraba al jacuzzi lentamente y se sentó a un lado mío inclinándose de tal manera que nos viéramos las caras.

-Y Aquí estamos princesa. ¿Es tan terrible como lo imaginaste?

-Casi tan terrible -respondí remarcando la primera palabra.

-¿Habías estado alguna vez en una situación similar? Me refiero al jacuzzi, no a estar desnuda con un hombre, porque claramente no lo es.

-Nunca había estado en un jacuzzi -sonreí tímida- y ¿A qué te refieres con que "claramente no lo es"?

-Me refiero, princesa, a que claramente no es tu primera vez estando desnuda con un hombre explicó riendo.

-¿De qué me ves cara?

-No me mal interpretes, mi princesa. No te veo cara de mujer fácil ni nada por el estilo. Lo digo porque tú y tu novio ya llevaban unos buenos años y pues tienes veinte años y...

Reí fuertemente. Al parecer es imposible que en estos tiempos una chica de mi edad sea virgen.

-Sé a lo que te refieres, Bieber -dije cruzándome de brazos al mismo tiempo que cruzaba una pierna por encima de la otra- pero yo que tú no lo daría por hecho.

Justin me quedó mirando con los ojos entrecerrados mientras trataba de entender y darle sentido a lo que le dije recién. En cuanto lo comprendió abrió sus ojos como huevos fritos y su mandíbula bajó todo lo que le permitía la articulación.

-¿Es broma? -dijo sonriendo de lado.

-¿Qué cosa? -respondí riendo.

-Ya sabes, a lo que te refieres.

-¿A qué crees que me refiero?

-Deja de responder mis preguntas con otras preguntas, princesa -ambos reimos a carcajadas, después de un minuto volvió a la conversación- Anda, dilo ya.

-Si -respondí en seco y avergonzada.

-¿Si qué?

-Que si es lo que crees.

-¿Qué?

-Eso. Lo soy.

-¿Qué eres?

-Justin, sabes perfectamente a lo aue me refiero.

Justin se acercó quedando arrodillado justo enfrente mío. Tomó mis manos en las suyas y las besó. Me miró fijamente a los ojos y sonrió.

-Se a lo que te refieres, princesa. Pero quiero oírlo de tu boca.

Me ruborizé por completo y dejé de mirarlo a los ojos. Notó mi verguenza y tomó mi mandíbula con su mano.

-Soy virgen -admití y sonreí incómoda- wow, creí que jamás lo contaría a nadie -reí fuerte- que verguenza.

-No te averguenzes, princesa -rió- De hecho deberías estar orgullosa, eres única en tu tipo -ambos soltamos una risotada- ahora te siento mucho más valiosa.

-¿Cómo así? ¿Valiosa en qué sentido?

-Pues que desde el momento en que te vi me gustaste, te fui conociendo y me encantaste, hemos pasado tiempo juntos y lo valoro. Mientras más te conozco más seguro estoy de querer a alguien como tú en mi vida.

Me quedé sin palabras con la seudo-declaración que me había hecho. Esto es realmente emocionante, me encanta esto. Me acerqué y besé sus labios corta pero intensamente. Justin sonrió y se sentó a un lado mío pasando su brazo por mi espalda.

-Siento que... -me quedé callada.

-¿Qué sientes?

-Que comienzas a gustarme.

-Eso es bueno -sonrió- pero ¿Por qué lo dices con un tono de preocupación?

-Porque no sé si sea algo del todo bueno.

-¿Por qué lo dices? -dijo con un tono levemente triste.

-Porque tú eres tú y yo soy yo. Tu estás con chicas a las que yo no les llego ni a los talones. Tú eresnuna súper estrella famosa y yo soy una simple fotógrafa aficionada. Tú...

-_________ -me interrumpió- no sigas con eso. Hoy sólo estamos tú y yo aquí, dos personas de carne y hueso. En este momento no soy la superestrella ni tú la fotógrafa aficionada, sólo somos tú y yo. Sugiero que te dejes llevar por la atracción que nos tenemos, esta atracción tan dulce e innegable.

-No entiendes. Tengo miedo.

-¿De qué?, yo no te haré nada.

-No es miedo de ti, Justin. Tengo miedo de sufrir, siempre soy yo la que sufre. Yo soy de las chicas que involucra sentimientos en las relaciones, soy del tipo de chica que pone su corazón en las manos del otro, soy el tipo de chica...

-Que me gusta -dijo mirándome a los ojos- Eres el tipo de chica que cualquier hombre quisiera tener. Eres el tipo de chica que hace que Justin Bieber deje botada a Hailey Baldwin, eres el tipo de chica que provoca todo tipo de sensaciones en mi, eres el tipo de chica que ablanda al chico rudo que todos ven, eres el tipo de chica que a menos de una semana de conocerla me tiene rogando por una oportunidad.







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