Let me be yours

CAPÍTULO XVI: Jace

Jace

-¿Esta es la fiesta? –me pregunta Selene.

Giro la cabeza en su dirección y la veo observando como una niña pequeña el gran edificio donde se hará la fiesta.

-¿Qué pasa socia? –le pregunto sonriendo sin saber por qué- ¿Te esperabas que fuera un sitio mucho más, cómo decirlo, simple?

Ella me mira y asiente con una dulce sonrisa en sus labios. Se encoge de hombros.

-Sí –responde- Aunque no sé por qué me sorprende porque todo aquí es demasiado, –se lleva la mano a la barbilla imitando el gesto que acabo de hacer yo- ¿cómo decirlo? –desvía su mirada a mis ojos- suntuoso?

Niego con la cabeza divertido.

-Sí bueno, no todo lo que piensas aquí es tan "suntuoso" –replico riendo.

-Supongo que no tendré mucho tiempo para comprobarlo –dice seria y con ello abre la puerta del coche para salir.

Mejor me callo las preguntas que tengo, pero lo más importante, el por qué ha dicho eso y qué quiso decir.

-Por cierto –me saca su voz de mis pensamientos. Ni si quiera me he dado cuenta que le he abierto la puerta del maletero donde está una bolsa de deporte- ¿Dónde está tu coche?

-Ah –no sé por qué me he puesto nervioso. Esto es una mierda- Se lo dejé a un amigo. Lo llevará al garaje del Pentonimium.

Ella asiente conforme y coge la bolsa.

-Una cosa Jace –se vuelve en mi dirección- No sabía si preguntártelo pero yo... -no termina de preguntar lo que fuera porque llega Luna, la coge y la abraza.

-¡Menos mal que conseguiste salir! –susurra gritando. Se separa de Selene y la mira a la cara- Estaba muy preocupada. Lo siento de veras por dejarte sola, pero no podía dejar allí el coche solo porque si lo rastreaban y conseguían averiguar que es del departamente nos meteríamos en un gran lío y me despedrían porque he sido yo quien ha chequeado por la noche el vehículo porque soy quien lo ha tenido y ... -Selene la corta al ver que, de lo rápido que habla, no nos estamos enterando de nada.

-Tranquila Luna, de veras no pasa nada –la tranquiliza pasando sus manos por los hombros de ésta- Jace me ha traído.

Luna abre los ojos y me mira... ¿impresionada? Joder ni que fuera nada nuevo que ayude a alguien que lo necesita.

-¿Tú la has traído? –pregunta atónita.

-Sí –respondo cortante. Estoy empezando a mosquearme.

-Ya –cuestiona en el mismo tono- ¿Y tu...

-Man.

-Ya –se gira de nuevo hacia Bellado y le sonríe- Date prisa y entra al hotel ¿de acuerdo? Supongo que a Jace –dice remarcando mi nombre- no le importará llevarte hasta los vestuarios que hay dentro –me mira de reojo y continúa- ¿Verdad Jace?

Joder, a veces resulta ser de lo más molesta.

Asiento y ella se gira y se va.

Suspiro pesadamente pensando en tranquilizarme hasta que Selene carraspea y me saca de mi enmismamiento.