Capítulo 18

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Caminamos en silencio mientras atravesamos los pasillos del instituto

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Caminamos en silencio mientras atravesamos los pasillos del instituto. Son las ocho de la tarde, sábado, y estamos los cuatro, colándonos en la piscina climatizada del instituto porque al idiota de mi mejor amigo le apetecía darse un baño en condiciones después del partido que habíamos tenido apenas dos horas antes.

-Recordadme por qué he decidido venir - les pido a las tres personas que van por delante de mí.

-Porque sabes que esto va a estar genial - me aclara la rubia.

Cuando llegamos a las puertas que dan a la piscina nos aseguramos de que no haya nadie por aquí y entramos sin pensarlo dos veces. Dejamos las mochilas con la ropa de cambio en los bancos que hay a uno de los lados de la enorme piscina y comenzamos a quitarnos la ropa.

Las chicas son las primeras en saltar a la piscina y antes de que eso pase he podido fijarme en las increíbles piernas de la morena y en lo diminuto que parecía su bikini.

-¡Guerra de caballitos! - grita Katherine divertida y con una enorme sonrisa en la cara.

Spencer y yo nos tiramos a bomba prácticamente encima de ellas y nos ponemos por parejas. La rubia y mi mejor amigo por un lado, y Katherine y yo por otro.

Me sumerjo apenas unos segundos para que Katherine se suba en mis hombros y cuando ambas parejas estamos listas comenzamos con la guerra.

Katherine empuja con tanta fuerza que casi acabamos en el agua por su culpa unas cuantas veces pero consigo mantener el equilibrio, solo hasta que la tramposa de Brittany me pega una patada en los huevos y no me queda más remedio que encogerme de dolor, cayendo Katherine detrás de mí.

Cuando consigo sacar la cabeza del agua veo a la morena venir protestando hacia mí.

-¿Qué has hecho? Ya los tenía - me regaña con una mueca de desaprobación.

-Pregúntale a tu amiga. Me ha pegado una patada en la zona prohibida - digo señalando la zona mencionada. Se gira como un resorte y la mira con cara de indignación.

-Eso es trampa. ¡Sois unos tramposos! - grita hacia la pareja de enfrente.

-No pusimos ninguna regla - se encoge de hombros Spencer.

-¿Eso significa que puedo darte una patada yo a ti? - amenaza Katherine mientras camina hacia las escaleras.

-Kath - protesta la rubia -. Nada de enfadarse.

-No estoy enfadada, iba a ver si mi padre me había llamado - ignoro lo que sigue diciendo y miro a mi mejor amigo que me hace señas como un loco.

Señala a Katherine que está de espaldas al tanque de agua y asiento. Luego me indica el móvil y salimos muy despacio del agua. Spencer corre a cogerle el móvil y yo la agarro por la cintura y la tiro conmigo de nuevo a la piscina.

-Malditos cabr... - el golpe del agua interrumpe lo que estaba gritando y aguanto a la chica que me patalea durante unos segundos sumergida. Cuando la suelto sube rápidamente hacia la superficie y yo me río en su cara -. Jason te voy a matar - me apunta con un dedo, amenazante.

-¿De verdad? - digo acercándome a ella.

Veo que me mira sorprendida por la cercanía y echa a andar hacia atrás hasta que choca contra la pared. Entonces yo vuelvo a caminar hacia ella.

-¿Qué haces? - me mira por encima de sus negras y largas pestañas y se le suben los colores.

-Bueno, tomate, has dicho que me ibas a matar. Estoy esperando - doy otro paso más y pone su mano en mi pecho, bajo la mirada hasta la zona y vuelvo a mirarla. Ella todavía con sus ojos en donde su mano está apoyada.

-Pareces una piedra - ante tal estupidez me echo a reír como un loco y me salpica con todas sus ganas.

-No me esperaba eso - digo entre risas -. Más bien esperaba una bofetada o algo así - ella tuerce la boca en una sonrisa y dejo de reírme cuando veo una mancha roja rodearnos.

-¿Jason? - pregunta preocupada.

Braceo hasta llegar a ella y la empujo fuera de la piscina lo más rápido posible. Veo la sangre salir de su abdomen y le grito a Spencer que me traiga el botiquín.

-Se te han saltado los puntos al empujarte - corro a los bancos a por una toalla y me agacho de nuevo a su lado en el bordillo -. Mierda - me quejo.

Brittany y Spencer llegan con el botiquín y un montón de papel higiénico del baño y le echo una cantidad razonable de alcohol sobre la herida. Suelta un pequeño grito por el escozor y me aprieta el brazo.

-¿Vas a coserme tú? - asiento en respuesta y pasa a cogerle la mano a su amiga -. No sé si...

-¿Quieres desangrarte aquí mismo? - espeto con una brusquedad que no pretendía.

Diez minutos después le he cosido de nuevo los dos puntos que se le habían saltado y me lavo las manos en el grifo del baño. Cuando salgo todos se encuentran sentados en el suelo y mirando el agua de la piscina.

-El lunes ya habrá desaparecido - deja caer la rubia -. Esperemos que el filtro haga su trabajo.

No digo nada y camino hasta llegar al banco donde se encuentra mi mochila.

-¿Que haces? - pregunta Katherine al acercarse a mí.

-¿Recoger mis cosas? - recalco lo obvio. Me pone la mano en el hombro derecho y da un pequeño apretón.

-No ha sido tu culpa, nadie sabía que podía pasar esto - intenta tranquilizarme. Algo que solo logra ponerme más nervioso.

-Se te han saltado por mi culpa, y esto podría haber salido muy mal - meto por último la toalla ensangrentada y la morena me hace girar para que la mire.

-Gracias a ti todo ha salido bien. Relájate, ¿vale? - ¿está de broma?

-Es de tu vida de lo que se trata. Katherine no puedes relajarte en una situación así, esta vez ha salido bien porque sé de primeros auxilios. Tienes que preocuparte más por ti misma - le reprocho sin ganas de seguir aquí.

-Tienes razón - cede, cogiendo aire -. Gracias, Jason - se junta por completo y me da un abrazo. Dura más de lo previsto y finalmente deposita un suave beso en mi mejilla -. Eres como mi ángel de la guarda - dice con una sonrisa, antes de volver a girarse y caminar hasta su mochila.

Si supiera que todo esto le está pasando porque me estoy involucrando en su vida seguro que no pensaría lo mismo. Me estoy dejando llevar por las circunstancias y veo que nada bueno puede salir de todo lo que estoy empezando a sentir.

¿Por qué tuviste que volver a Londres, Katherine?

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Bueno mis pequeños saltamontes... ¡Lo prometido es deuda!

Espero que os guste el capítulo.

Nos leemos pronto, beibis.

ESPÍA AL DESCUBIERTO // EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora