Capítulo 17

245 20 1
                                    

Nos encontramos los cuatro haciendo deberes en casa de Katherine cuando su primo y mi hermano entran por la puerta riéndose

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Nos encontramos los cuatro haciendo deberes en casa de Katherine cuando su primo y mi hermano entran por la puerta riéndose.

-Vaya, reunión de nenes - dice divertido Jake -. Nosotros no os molestamos. Vamos a jugar a la play arriba - coge a mi hermano por los hombros y lo guía hasta las escaleras, donde desaparecen.

Mi mirada se posa en la morena que está escribiendo en su cuaderno y me quedo ahí durante unos segundos. Contemplando su perfil. Sus labios ligeramente fruncidos cuando está concentrada, esos mechones de pelo que se le caen de la coleta. Y ese golpe en el brazo por parte de mi mejor amigo para que deje de mirar así a mi vecina.

-Pareces un psicópata - me susurra para que solo yo le oiga.

Sin embargo no lo ha debido decir muy bajo porque alcanzo a ver la sombra de una sonrisa en el rostro de la morena.

Volvemos al silencio que había antes de que los chicos entraran y el grito de emoción de la rubia hace que mi corazón dé un brinco en el pecho.

-Joder, Britt. Vaya susto - digo, aún con la mano en el pecho.

-Acabo de caer en que dentro de nada es Halloween - hace una pausa y saca un cuaderno de su mochila -. Y al ser la presidenta del comité de bailes del instituto quiero que salga perfecto.

-¿Y qué tenemos que ver en todo eso? - pregunta curiosa su mejor amiga.

-Necesito que me ayudéis a organizarlo todo - sonríe ampliamente y mira directamente a Katherine.

-Ah no, de eso nada. No me vas a meter en tus líos - se niega rotundamente la morena.

-Oh, venga. Va a ser divertido - le pone un puchero a su amiga y esta cede.

-Está bien - acepta al final.

La rubia aplaude ante la respuesta y pasa a mirarnos a nosotros.

-Conmigo no cuentes rubia - me niego.

-Jason, tú nunca ayudas en nada. Bastante tengo con ir - me encojo de hombros y miro a Spencer.

-¿Spencer? - pregunta por lo bajo Brittany.

Sabe perfectamente que si le pone esa vocecita de niña buena el tonto de amigo va a acabar yendo.

-Vaaalee - asiente -. Pero un rato que yo tengo que currarme los deberes y esas cosas.

-Estupendo, ya veréis que bien va a quedar todo.

La siguiente media hora se me pasa volando entre ejercicios hasta que tengo una cosa de matemáticas que no llegué a copiar.

-Katherine - la llamo.

Levanta la cabeza de su libro y me mira expectante.

-¿Me dejas lo de mates? -pregunto.

-El cuaderno está en la mesa grande - me señala la mesa que tengo a mis espaldas y le doy las gracias.

Me levanto y camino hasta la mesa, en la cual se encuentra el cuaderno de matemáticas de la morena en perfecto estado. Cojo el cuaderno y me dirijo a la cocina a por un vaso de agua. Cuando estoy a punto de volver a entrar en el salón, una hoja cae de entre las páginas del cuaderno y me agacho a recogerla. Es una nota:

"No todo el mundo es quien dice ser"

Miro la nota por las dos caras. No hay nada que indique quién la ha escrito. Y tampoco puedo basarme en la forma de escribir ya que está hecha con trozos de letras de revistas y periódicos. Quien la haya escrito ha pensado en todo.

Con mucho cuidado vuelvo al salón con la nota entre el cuaderno y mi mano, de forma que no se pueda ver, y cuando me agacho de nuevo en mi sitio, intento meter la nota en mi cuaderno para llevármela sin que Katherine se de cuenta. Pero en el proceso es Spencer quien se percata de mi maniobra.

-Luego te cuento - le susurro para que las chicas no me pillen.

Me aseguro de recoger todo en mi mochila cuando he terminado los deberes y me pongo en pie.

-Voy a ver qué hacen los chicos - el resto del grupo asiente y pasa de mí.

Subo las escaleras corriendo y llamo a la puerta de Jake. Me gritan desde dentro que pase y eso hago. Les veo juntos riéndose y jugando a las carreras de coches en la play.

-Peter, ¿podemos hablar un momento? - me mira por una milésima de segundo y cuando ve mi expresión para la partida y se levanta.

-Un momento, Jake - este último asiente y se levanta para ir al baño aprovechando la interrupción.

Me aseguro de que nadie nos puede escuchar y le cuento a mi hermano lo de la nota. Él se queda tan impresionado como yo.

-Han pasado a contactar con ella - reflexiona -. Esto está yendo muy lejos. ¿Tienes la nota?

Asiento y miro para atrás, volviendo a comprobar de que no haya nadie por ahí.

-Tenemos que comprobar las huellas - le digo.

-Hay que ponerla vigilancia - le miro directamente.

-Su padre es un traficante de armas. ¿Y si se da cuenta? - se lleva las manos a la cabeza y las baja de golpe.

-¿El tío de Scott no era policía? - me río en su cara y al ver que no va de broma me pongo serio.

-¿Quieres meter a la policía en esto? Para eso se lo decimos a Jake.

-Decirme qué - nos interrumpe de pronto el moreno.

-Era una sorpresa que mi hermano te acaba de joder - improvisa Peter -. Tengo dos entradas para ir a ver al Chelsea - miente.

-¡No me jodas! - salta emocionado.

-Espero que no te importe que te lo haya dicho ahora, pero la verdad es que casi mejor, así me aseguro de que tengas el día libre - vuelve a mentir.

-Oh no te preocupes. Aunque hubiera tenido que trabajar habría cogido el día libre - le da un abrazo a Peter y luego me mira a mí.

-Tranquilo, Jason. No has estropeado nada - suelto un suspiro falso y sonrío.

-Menos mal. Pensaba que Peter me iba a matar - desvío la mirada hacia el rubio y le veo señalando la puerta con la cabeza -. Bueno os dejo.

Bajo a paso rápido las escaleras y veo que los otros tres componentes del grupo ya han terminado también.

-¿Nos vamos? - le digo a Spencer.

Gira la cabeza hacia la rubia y luego vuelve a mirarme a mí.

-Tengo planes con Brittany - deja caer.

-¿Cuando lo haréis oficial? - suelta Katherine.

-¡Katherine! - le regaña Britt.

-¿Que? Es verdad - me mira a mí y me encojo de hombros.

-Déjales, se creen que no se nota - suelta una carcajada y me despido de ellos.

-Os veo mañana.

Y dicho esto, cuando salgo de casa de la morena, veo de nuevo el coche que vi el otro día. Esta vez me da tiempo a quedarme con toda la matrícula.

Te tengo cabrón.

________________________________________________________________________________

Siglos después aparezco. La constancia no es lo mío. Lo siento. También el inicio del curso ha sido un poco fuerte así que espero poder escribir, pero no os prometo que sea todas las semanas ni nada de eso. Estoy intentando tener los capítulos más o menos preparados para después simplemente poder publicarlos esté donde esté y que no me pase lo que otras veces.

De nuevo, lo siento. Espero que nos leamos pronto.

Srtamj

ESPÍA AL DESCUBIERTO // EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora